31.8.09



31/08/09
Ya había escuchado hablar tanto sobre esta película que le traía ganas desde hace rato, además que después de encontrármelo por sitios insospechados el muay thai comenzaba a gustarme bastante como arte marcial. Aunque le sigue ganando el kung fu, claro.
De todos modos lo más seguro es que me hubiera tardado un poco más en verla si Bake no hubiera insistido en tener nuestro maratón de golpes (con la participación especial de Bob Dylan por ahí, oh). Y con esta lo inauguramos.



"Si no consigues traer de vuelta la cabeza del Buda, grandes desgracias caerán sobre nuestra aldea"

Cuando veo películas de artes marciales me gusta desconectarme un poco y disfrutar del paisaje. O de las coreografías de pelea, mejor dicho. Además que con mi eterno amor por Tailandia, esas escenas iniciales en que los hombres se suben ágilmente por el enorme árbol mientras parecen estar pintados de tierra blanca, no podían si no emocionarme.
La trama es la mínimamente necesaria, porque no hay caso en confundir al espectador con algo más que una historia simple pero efectiva. Unos compradores de piezas religiosas (o algo así) visitan la pequeña aldea esperando comprar un pequeño Buda, pero los habitantes los rechazan por considerar que les ofrecen muy poco dinero. En venganza, y para demostrar que son muy malos, se llevan la cabeza del Buda mayor que es el principal protector de la aldea. Y la población comienza a temerse lo peor, de modo que mandan a su guerrero (el buen Tony Jaa) a que la recupere y consiga librar a su pueblo de las desgracias.
Y a partir de ahí el tendrá que darse de patadas con todo aquel que se interponga en su camino. Obviamente. Y qué patadas.
Lo más divertido es que la historia tiene un sentimiento de videojuego clásico: tienes a tu personaje, quien tiene que cumplir una misión para ganar el juego, y una serie de elementos que irán pasando por su camino para ayudarlo o dificultarle el paso, además de unos cuantos items que debe utilizar sabiamente cuando sean necesarios. El otro tópico que también aparece un poco es el del joven que va de su pequeño y tailandés pueblo hacia la capital y se vale de su inocencia casi ingenua para resolver (por lo general un poco mal) los problemas iniciales. Porque Ting, nuestro protagonista, es un excelente luchador de muay thai, pero sigue siendo un pueblerino que se encuentra perdido en la enorme Bangkok.
Y bueno, tomamos todos estos elementos, los mezclamos, añadimos un gran número de peleas y tenemos, básicamente, "Ong-bak". No diré que va a revolucionar el cine de artes marciales pero sin duda que es una película muy bien hecha, con una buena fotografía, con un cuidado atento en lo que tiene que mostrar, y que tiene algunos detalles que la hacen bella a su forma. Diría que principalmente los escenarios que muestran indiscriminadamente una gran cantidad de enormes Budas o figuras religiosas talladas en piedra.
Porque Tailandia es hermosa y hay que mostrarlo. Yeah.

Los personajes son curiosos, también con un tinte un poco de videojuego, y la historia se desarrolla como seguro todos nos lo imaginamos. Pero, vamos, que resulta de lo más entretenido además de que Tony Jaa es todo un maestro para los golpes.

Ahora, ¿el muay thai es tan bueno como el kung fu? No sé, no sé, creo que aún tengo ese amor por las técnicas animales del kung fu. Pero habrá que verse.

También me han comentado ya (Bake y /paranormal_cine) que hay una confusión medio extraña con la continuación. Aparentemente salió primero una película que se proclamaba como "Ong-bak 2" pero en realidad no tenía nada que ver (¿o era que estaba Tony Jaa ahí también? ajam, no recuerdo) y unos años después ya salió la verdadera "Ong-bak 2". No estoy muy segura de todo esto pero yo tengo una segunda parte por ahí, así que reportaré cuando me entere si tengo la verdadera o la falsa. Jo.




¿Cuál es tu arte marcial favorito?












30.8.09



30/08/09
Miriam y yo siempre hablamos de ver juntas por lo menos una película a la semana pero casi nunca lo hacemos. Hace unos días estaba en su casa y me dejó escoger lo que veríamos entre los discos que le habían regalado en un curso, entre los que se encontraba "Fat girl". Yo había visto anunciada la cinta dentro de un maratón de películas escandalosamente sexuales donde se referían a ella como un punto muy cercano a la pornografía infantil.
Y, ya saben, la curiosidad.



"I want my first time to be with someone I don't love"

En general me quejo de las traducciones de los títulos aunque estoy consciente de que la mayor parte de las veces es debido a la poca creatividad de los que escogen las traducciones. O el hecho de que a veces tomen por tontos a los espectadores, como si fuéramos incapaces de apreciar un título metafórico. Etc.
Sin embargo en este caso me parece que la curiosa traducción del título no es sólo cuestión de si se adecua o no, sino que también influye en cierta forma en la idea con la que nos acercamos a la película. Es decir, a mí la película llegó como "Fat girl". Y desde el primer momento es evidente que hay una chica con sobrepeso (sobre todo si tomamos en cuenta que se pasea entre tanta francesa flaca) pero nos creemos que toda la cuestión se refiere a ella, o que será nuestro punto central, o lo que sea. Pero esa percepción es engañosa y por momentos nos llevará a conjeturas no del todo aproximadas. Y todo eso por no saber que el título original es "A mi hermana", el cuál probablemente, al menos a mí, me hubiera dado una mejor idea de lo que venía en la película, que es más bien una relación entre dos adolescentes.
Quizá no parezca un cambio demasiado trascendente pero a mí me parece que sí tiene cierta relevancia al enfatizar dos cosas distintas.

Bueno, ajam, sobre la película. Hay dos jóvenes, dos hermanas, que son tan distintas como podrían ser, ya casi estereotípicamente (una, hemos dicho, es gorda, la otra muy delgada, una más bien fea, la otra increíblemente atractiva, una muy retraída y la otra muy desenfadada al relacionarse con los demás) pero lo que comparten, al menos durante la trama, es la aproximación a la sexualidad. Entramos de lleno en una conversación en que ambas manifiestan sus puntos de vista por la primera relación sexual, también de manera engañosa ya que mientras Anais (la hermana menos agraciada) parece tener juicios muy establecidos sobre una sexualidad quizá demasiado abierta (el perder la virginidad con un extraño, por ejemplo), su hermana Roxane se encuentra en un utópico punto contrario. La realidad juega distinto y Roxane acostumbra conquistar chicos con quienes mantiene relaciones casi completamente sexuales pero negándose a perder su virginidad del todo en un intento medio absurdo de conservarse pura.

Se podría decir que la visión sobre la sexualidad va siempre sobre esa línea de correspondencias. La visión que tenemos de la sexualidad de Roxane con Anais como testigo en todo momento, y los argumentos con los que cada una de ellas trata de convencerse de su posición, aunque no siempre sea sostenible.

La trama se puede resumir, de manera casi burda, en los sucesos que viven ambas hermanas durante un verano con la familia durante el cual Roxane comienza a andar con un joven italiano también de viaje que trata de convencerla de que pierda su virginidad con él. La visión de ambas chicas, especialmente de Anais quien parece más desesperada por confirmar su sexualidad mientras que se sabe, de algún modo no muy clara, algo ajena aún a ella. Y algún que otro drama familiar que lleva a que la película concluya de modos insospechados.

Yo no sé, a mí eso de escandalósamente sexual me parece muy drástico. Digo, hay que tomar en cuenta que las actrices deben de tener unos 13-14 años y que tienen ya secuencias completas en que se encuentran desnudas y participando en actos sexuales, pero ni siquiera es algo terriblemente explícito. Sí me parecen quizá un poco más fuertes las escenas en que Anais inspecciona su cuerpo porque tampoco estamos acostumbrados a ver exploración de cuerpos femeninos no ideales, y, también está, que tiene 14 años (o algo así). Pero yo creo que eso de que se encuentre cerca de la pornografía infantil es inflar un poco la película esperando que una horda de depravados (como yo, awwww) la busque. Es más una película sobre la sexualidad antes que una película sexual.

Ahora bien, el problema que yo tuve con ella, es que me parece que para lo que cuenta se toma mucho tiempo. Entiendo que esa vacilación es parte de la idea, pero no creo que consiga una gran revelación sobre el despertar sexual de las jóvenes, ni que genere una toma de consciencia sobre nada. Ni nada en particular, me parece el retrato de una forma de pensar, casi congelada en un momento particular, que culmina de manera extraña y que rompe un poco con el resto de la trama.
No diría que es una mala película porque tampoco llegué a mirar desesperada el reloj esperando que termine, pero es de esas que, una vez que terminan, lo único que me dejan pensando en "ah".

Y para esto nos tragamos todos los extras del dvd, que en realidad eran todos entrevistas con la directora disfrazadas de otras cosas. Y creo que una vez que ella te explica detalle a detalle cada cosa que quiso representar en la película, qué piensa de sus personajes, qué piensa del final, qué piensa de los que ven la película, etc; entonces crees que las cosas tienen un poco de sentido, pero el problema reside es que sigues sin creer que la película explique todo eso por sí misma.

¿O soy yo? Hay tantas reseñas en imdb diciendo que es una joya que me llevan a preguntarme si habrá una diferencia de visiones entre una mujer atestiguando una confesión sexual de una joven, o un hombre mirando la misma situación.
























28/08/09
Después de mi reseña sobre "Beautiful boxer" y la reiteración de mi fanatismo por las películas de trasvestis y/o transexuales, Juniper Girl me recomendó que buscara "Funeral parade of roses", a la que se refirió como ya una película de culto sobre el tema. Y, aunque lo esté reseñando mil años después, la verdad es que apenas dejé pasar una semana (el tiempo que me tardé en encontrar una versión que funcionara) antes de verla.



"All definitions of cinema have been erased. The doors are now open"

No sé si soy yo, pero creo que uno no puede estar listo para enfrentarse a una película como ésta. A menos que te la cuenten con detalle y ya nada tenga gracia. Pero aún así probablemente todo habría algo que te sorprendiera.
Tiene algo entre nouvelle vague, surrealismo buñuelesco y engañoso documental que te confunde, te sacude, te confunde un poco más pero te atrapa desde el principio. Unas sensuales imágenes iniciales que pueden recordar un poco a "Hiroshima mon amour" con demasiada intensidad de luz.
La película gira alrededor de Eddie, quien de algún modo encarna muchos de los tópicos alrededor de los trasvestis: se prostituye, se arregla exageradamente, tiene un pasado familiar tormentoso y vive atrapado en una relación amorosa irregular. En una de las primeras escenas, que además se repetirá constantemente a lo largo de la película, va en el coche junto con su amante y también dueño del sitio en que trabaja, cuando mira que por la calle, cerca de ellos, pasa la madame del mismo sitio y pareja oficial del dueño. De alguna manera Eddie, a lo largo de la trama, se encuentra siempre atrapada en ese suceso.
De películas sobre películas, al tiempo que vemos la vida cotidiana de Eddie en el bar donde trabaja, también nos encontramos con otras tomas en que ella y sus compañeras trabajan con un grupo de artistas en la grabación de una película. Con cortes que nos remiten a documentales, a una ficción dentro de la ficción, y a escenas de contenido meramente metafórico, conformamos la vida de Eddie a través de ciertos retazos de lo que nos parece es una realidad. Una realidad compleja, casi onírica y con un componente fatídico casi mitológico.

Además de la espectacular, fuerte y emotiva visión sobre el mundo gay asiático, diría que una de las grandes virtudes de la película y que no puede si no encantarme, es el efecto de hacer que la trama avance sin que el tiempo lo haga. A través de la repetición de la primera escena que he mencionado, nos queda una sensación constante de que todo lo que vemos ha pasado siempre en un tiempo inexacto, incapaz de ser precisado, y que de alguna manera la realidad siempre vuelve en el mismo punto y que aunque hayamos visto nuevas acciones y escenas, todo ha quedado detrás y la continuidad va hacia un futuro atrapado e inalcanzable (hasta el mitológico desenlace, claro).

Como he repetido ya antes, la belleza visual es sencillamente cautivamente, pero además, refuerza de una manera extraña pero efectiva los sucesos que van apareciendo, aunque no siempre entendamos muy bien en qué manera. Tal como explican en uno de los episodios, en que Eddie escapa de un perseguidor bajando a una galería de arte subterránea; parece que todo en la película nos remite a las máscaras. Al modo en que, a través de su transexualidad, Eddie y sus amigas se encuentran disfrazadas, de tal modo que por más que una máscara sea retirada, encontraremos una nueva debajo, hasta que el propio rostro se convierta en una máscara. Y de esta manera no sólo los personajes si no todos los elementos en la película jugarán en formas engañosas con nosotros, siendo a la vez y no siendo lo que aparentan en un principio.

Si la sexualidad y la identidad sexual son un terreno misterioso, de maneras no menos misteriosas deben ser representados. Y esta película es un logro magnífico a esa premisa.

Sí, supongo que en parte se debe a que tengo una debilidad por el tema, pero incluso a niveles narrativos y visualmente estéticos la película se encuentra maravillosamente lograda.
Y ya, no quiero sonar aún menos objetiva de lo que ya he sido. Jo.
























27.8.09



27/08/09
Yo me había prometido que no vería más películas de robots por lo que quedaba del año después de lo terrible que resultó "Transformers 2". O quizá sólo dije robots gigantes. De cualquier modo no tenía intención alguna de verla aunque tampoco tenía demasiado en contra. Hasta era algo fan de las películas viejas cuando era pequeña.
Pero, una vez más, Ian insistió y terminamos viéndola.



"We've been fighting a long time. We are out numbered by machines. Working around the clock,without quit. Humans have a strength that cannot be measured. This is John Connor. If you are listening to this,you are the resistance"

Lo más triste es que creo que Christian Bale está dejando de molestarme tanto. Con eso de que últimamente se aparece hasta en la sopa, ya hasta me resulta un poco más tolerable. Y la verdad es que aquí la hace bastante bien.
Creo que todos sabemos que la película está pensada para ser una palomitera de verano. Con muchos efectos, tomando una franquicia ya clásica y con actores que llamen la atención en los posters. Y robots, muchos robots, todo tipo de robots, robots queriendo arruinarnos la vida a todos. Así que tampoco es que vayamos a reivindicar la saga y convertirla en una película de culto. De modo que si uno va con expectativas reales se enfrenta contra una buena película.
La trama es sencilla, y se agradece que nos dieran un producto que no necesitara demasiados conocimientos previos para que cualquiera pueda disfrutarla sin haber tenido que rentar todas las anteriores. Es un futuro cuasi apocalíptico y es todo lo que necesitamos saber. Eso y que los robots pelean contra los pocos sobrevivientes (eso nunca me parecerá demasiado lógico en una película, pero quién soy yo para cuestionar a la ciencia ficción) y que Christian Bale está ahí para salvarnos.
De toda la trama temporal y familiar de las películas nos queda nada más la idea de que los robots quieren matar a Kyle Reese y que eso debe ser evitado a toda costa. Y, mientras tanto, que la guerra sigue contra las máquinas.
Y, después de eso, acción. Más robots, más armas, más explosiones, más robots y personajes cruzándose cada cierto tiempo para darnos unas cuantas líneas y, robots.

No puedo mentir, la verdad es que me entretuve bastante en el cine. También es que todas las dudas que podría haber tenido me las disipó Helena Bonham Carter en los primeros minutos. Y de ahí la verdad es que uno va siguiendo la trama y aunque no sacaremos un gran premio (iba a decir un oscar pero, jo, nunca se sabe) de todo eso, se disfruta bastante. Los personajes son bastante superficiales pero cumplen bien con su labor, algunas situaciones ya las hemos visto mucho en este tipo de películas pero no nos molesta volver a verlas. Y el ritmo que lleva la película se mantiene estupendamente para entretenerte sin que llegue a ser pesada.

Lo que sí, una pena ver a Bryce Dallas Howard en un papel tan sin chiste. Con lo que me había gustado en "La aldea". Pero creo que después de su cara bonita quedó poco más que explotar. Jo.

Y, claro, se entiende que la película es sólo para pasar el rato, tampoco vayan a confundir mi emoción con algo más que agradecimiento por no tener que odiar a los robots por el resto de mi existencia. O de este año, al menos.




¿Eras fan de las películas viejas de 'Terminator'?


























26.8.09



26/08/09
Siempre me ha parecido que esta película tiene uno de los mejores títulos. Aunque por aquí la tradujeron terriblemente como "Atrapado sin salida". Como si necesitaras hacerte una mejor idea de qué iba la trama que involucra a Jack Nicholson en un psiquiátrico.
Lo que no logro explicarme muy bien ahora es porque yo tenía la extraña idea de que era una película más bien light y por lo cual decidí a verla una noche con mi hermana esperando dormir tranquila. Inocente de mí.



"What do you think you are, for Chrissake, crazy or somethin'? Well you're not! You're not! You're no crazier than the average asshole out walkin' around on the streets and that's it"

Las películas sobre psiquiátricos siempre me han gustado, ya sea que tengan alguna final seudo documental, sean de terror o sobre algún loquito en particular. Y, claro, si tenemos que poner a algún actor como desequilibrado mental no podría ser otro que Nicholson. No es de extrañar que se piense que su personaje quizá estaba un poco trastornado.
No sabemos exactamente las condiciones anteriores de McMurphy antes de que llegara hasta ese psiquiátrico. Aparentemente se trata de un convicto del que se cree quizá tenga algún trastorno mental (lo que haría más lógico que cumpliera su condena en un asilo y no en la cárcel) y por ello termina dentro del pabellón de los locos mientras los médicos y enfermeras determinan si debe regresar a la cárcel o quedarse con ellos.
Todo suena un poco a excusa y es cierto que el propio McMurphy no se lo toma demasiado en serio al principio mientras comienza a conocer a los demás personajes a su alrededor. Una increíble orquesta en la que un sinnúmero de personalidades distintas van apareciendo entre el grupo que McMurphy arma a su alrededor. Me parece realmente destacable el conformar un grupo tan amplio de actores y de conductas patológicas sin que caiga fácilmente en que uno opaque a los demás o que sus padecimientos parezcan estereotípicos o superficiales. Nos vamos asomando a la vida del adolescente tímido y patológicamente dependiente que no puede hablar sin tartamudear en exceso, el hombre exageradamente feliz que fácilmente podría confundirse con alguna especie de retraso, con el intelectual incomprendido que medita obsesivamente sobre sus aparentes problemas. Es todo un caleidoscopio dentro de esas paredes blancas, y el modo en que van organizándose, caóticamente, alrededor del recién llegado, quien parece claramente el más cuerdo de todos.
Y a partir de ahí viene lo demás, las condiciones reales, lo que va más allá de un sitio en que se encuentran encerrados pero aún con ciertos servicios. El abuso de las autoridades, su desinterés, el control sádico de la enfermera encargada (increíblemente caracterizada Louise Fletcher) y los problemas reales que llevaron a cada uno de los pacientes hasta ahí.

Uno no puede evitar quedarse atrapado en ese espacio entre el juego que McMurphy trata de establecer y la realidad de sus condiciones. Las injusticias, el abuso, el control arbitrario sobre otras vidas humanas. Y, claro, las terribles prácticas psiquiátricas de aquel entonces. Uno se siente fascinado por las excelentes actuaciones y un guión tan cuidado, pero también indignado por lo que va representándose en pantalla.
Una película excelente que difícilmente podrá dejar a alguien indiferente.

Además, qué actuaciones, bien dijo mi hermana que jamás había sentido tantas ganas de que mataran a un personaje. No por nada les valió diversos premios tanto a Nicholson como a Fletcher como personajes principales. Es increíble como ella con tan poco margen de expresión facial puede llegar a manifestar tantas emociones (y provocar otras tantas).
Altamente recomendable. Digo, de Forman, no faltaba más.



Creo que ya lo he preguntado antes pero ¿cuál es tu película favorita de Jack Nicholson?