21/03/11
Supongo que me todavía me intenseo mucho hablando de Satoshi Kon, y precisamente "Millenium actress" la vi poco tiempo después de su muerte. Ahora estoy convencida de que si alguna de sus películas iba a hablarme en ese momento del suceso no podría haber sido otra que ésta.
"I hate you more than I can bear. And I love you more than I can bear"
Un hombre y su camarógrafo van en busca de una actriz retirada hace muchos años para tratar de armar una especie de documental sobre ella. Dicha actriz es Chiyoko Fujiwara, quien se retirara en el momento más alto de su carrera a un sitio apartado de toda mirada pública. Sus películas y su aura particular inspiraron a muchas personas, entre ellas el hombre que la ha seguido con un interés profesional pero también personal, al querer saber algo más de su vida y los motivos que la llevaron a alejarse de todo. Con él lleva una llave que Chiyoko perdió en una de sus últimas actuaciones, y con esa llave comienza la historia.
Chiyoko era una joven que comenzó a ser actriz por las razones menos esperables: viéndolo como única oportunidad de poder viajar por el país en busca de un hombre al que sólo vio un par de veces. De tal modo, a través de las producciones pero también de sus propias películas, continuo con dicha búsqueda. Genya Tachibana y su camarógrafo se adentran por completo en los relatos confundidos de la vida y ficción alrededor de Chiyoko, un personaje tan real como cinematográfico. Y así, mezclándose y participando por sus películas son testigos no sólo de una búsqueda milenaria sino también del desarrollo del cine en Japón.
Creo que "Millenium actress" es una de las películas que mejor logran captar la esencia del cine y el actor como dos seres indivisibles. La idea de que Chiyoko ha sido no sólo ella sino todos sus personajes y el modo en que esto se muestra a través del estilo y la elaboración visual de la película la hace un relato fantástico y maravilloso. Una historia de todas las máscaras que componen a un ser humano y que, en el final, son siempre la misma. Además de ello la película es increíblemente bella y uno puede sentirse atrapado en ese remolino de secuencias dispares que nos llevan siempre en una misma dirección, un mismo eje sencillo que es el que desencadena todo ese cataclismo. Muy apropiadamente la misma actriz confiesa desde el inicio que toda su vida ha estado ligada a los terremotos, algo que también hablará mucho de ella a lo largo de la historia.
Ahora yo soy completamente subjetiva y no puedo evitar sentir que, de algún modo, esto también habla de la figura de Satoshi y de su propio y fugaz paso por el cine. Creo que ese microuniverso de ficciones por los que atraviesa la actriz puede también reflejar la suma pequeña pero abrumadora de las películas que dirigió este gran cineasta. "Millenium actress" me parece probablemente una de sus películas más formalmente simples (en relación a una trama muy delimitada, no me malinterpreten) pero más fantásticamente bellas. Es, llanamente, preciosa. Y, como todas las cosas preciosas, es también un poco cruel.
Ahora sólo me queda por ver "Tokyo godfathers" y la verdad es que tengo un poco de temor de hacerlo. Supongo que hay algo de esperanzador en seguir creyendo que, por lo menos, todavía me falta 'algo más' de la filmografía de Satoshi Kon por ver. Y una vez que la vea se habrá ido para siempre.
:(
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