"Moon Child", Takahisa Zeze

17/12/12

Y pese a todo, seguimos con Takahisa Zeze, con una producción que se veía, si es posible, todavía más particular que las anteriores.

"I'll make you a ninja soon"

A estas alturas ya no queda demasiado claro que Zeze sea un director entregado al nuevo pinku. Lo cual, irónicamente, sería una actitud muy pinku, sin duda. "Moon Child" es una película que tiene un aire muy a lo Hong Kong ochentero a la vez que Japón futurista, todo revuelto dentro de una extravagante historia. 

Por allá del año 2014 (y lo futuro que resultaba en el 2003), Japón ha colapsado al igual que otras economías y el mundo ha llevado el asunto de la globalización al máximo. Una muestra de ello es Mallepa, un sitio donde convergen todas las nacionalidades asiáticas posibles (y algunas occidentales) que han tenido que huir de sus lugares de orígenes. Es un sitio del todo se vale y de lucha constante por la supervivencia. Es ahí donde se encuentran Shou y Kei, dos huérfanos que crecen juntos y que se encontrarán eventualmente a su vez con los hermanos Son y Yi-Che a quienes los unirán aventuras y desventuras a lo largo de una historia conjunta. Llena de mafias, disparos, romance, peleas, vampiros y muchas otras cosas.

Sí, dije vampiros.

El resultado final es confuso porque siendo sin duda extraño, tampoco resulta tan extraño como uno podría creer. Si todo parecería indicar que se conseguiría algo así como una suerte de serie B futurista de peleas, nos encontramos con que queda más cerca de un tributo a John Woo en un universo a lo Blade Runner. El extra de vampiros es lo de menos. 

Uno de los principales chistes de la película era que se trataba de la primera incursión cinematográfica de Hyde (de la banda japonesa L'Arc~en~Ciel) y Gackt (de Malice Mizer). Ellos son los protagonistas y queda bastante claro que muchos momentos están planteados para que se luzcan. Con todo no deja de ser una extraña elección para iniciarse en el cine, aunque no sé si me sorprende o me parece adecuada para estos dos particulares idols. 

Personalmente yo disfruté de ese mencionado sentimiento a lo John Woo y el hecho de que la película en general es bastante sencilla y disfrutable. Tiene su acción y su drama en raciones justas y el modo en que retratan ese futuro casi apocalíptico que no deja de recordarnos un poco al cine de yakuzas más decadente, le da un buen toque. Hay una aparición fugaz del maravilloso Susumu Terajima a quien disfruto ver haciendo cualquier cosa aunque sea por unos minutos. 

¿Otras incursiones de cantantes en el cine que les gusten?