13/06/09
Creo que a estas alturas ya todos saben que amo las películas de travestis. A esta, en particular, llegué de un modo extraño: estaba navegando por unos foros de temática transexual (donde se aprovechaba para reseñar películas, libros y material al respecto) cuando en uno de los tópicos se atacó ferozmente a esta película. Debo confesar que buscarla fue algo de morbo pero, por otro lado, la película de "Bajo las piernas" del mismo director, además que la sinopsis presentándola como un musical de un transexual narcoléptico, no hizo más que llamar más y más mi atención.
"Si todos tenemos talento, lo que no tenemos es dinero para desarrollarlo"
Parece que a Ramón Salazar le encanta trabajar con Mónica Cervera, ya lo había hecho en el cortometraje de "Hongos" y en la película que mencioné anteriormente. Debo decir que es una actriz que me gusta de un modo extraño, porque estoy convencida de que su encanto reside en que es, esencialmente, fea. Y la verdad que no cuesta mucho trabajo que uno se la crea como transexual.
La película es rara, como uno podría esperarse, pero para mí de entrada tuvo la desventaja de que es ese tipo de musicales que cuando introducen el escandaloso número musical, hacen que como espectador me sienta incómodo. Será por eso que en general son pocos los musicales que me gustan, claro.
La apuesta más clara de la película es la parafernalia de los bailes junto con lo inusual de su presentación. A la más mínima provocación, que sucede cuando Marieta comienza a quedarse dormida, se monta un espectáculo inesperado y un poco ridículo con adaptaciones de todo tipo de canciones ya consagradas. Vamos de covers de "La vida es una tómbola", "Muchachita", "Parole parole" o "I want to break free". Algunos números incluso son visualmente agradables y/o entretenidos, pero en otros resulta menos afortunada su presentación.
La trama en sí no da para mucho más, nos limitamos a la imagen bastante plana de un transexual que quiere operarse. Y quizá eso no sería del todo malo si no fuera porque todo parece centrarse, claro, en los 20 centímetros que mide el miembro que pretende extirpar. Al más puro estilo freudiano, la película es una oda a la obsesión del falo. Básicamente.
No dudo que eso pueda resultar ofensivo para un transexual, ya que todo queda reducido a la más estereotipada de las caricaturas, que se inclina hacia la vulgarida, la fijación en el sexo por el sexo, y una visión infantil de la situación. El abuso de los números musicales hace que después de un rato la situación ya sea aburrida y cuando la película termina nos damos cuenta de que en realidad no pasó nada.
El elenco es casi destacable si no fuera porque la combinación resulta ser muy pobre. La única que tiene un papel mínimamente real es Mónica Cervera, que diré que no lo hace mal pero su personaje tampoco es de lo más carismático. Aparece mi adorada Najwa en un papel adorable de prostituta-conejo-embarazada, pero si apenas aparece en un par de escenas, sólo en una es aprovechada. Y esto es su número musical, que es divino porque ella además me gusta como cantante, pero, eso, sólo es una vez. Por ahí aparece también Lola Dueñas que igual participó en su película anterior, sin lucir especialmente bien y con igualmente unas dos escenas. Lo mismo para Macarena Gómez. Creo que la única otra mención importante sería para Miguel O'Dogherty, el compañero enano de Marieta, que es un encanto. O quizá también Rossy de Palma como la Frío, que fue mi transexual favorito. Oh.
En conclusión no creo que sea recomendable ni como musical, ni como película de travestis, ni como película onírico-surrealista. Aunque he leído que algunas reseñas dicen que siendo tan extraña e inesperada les ha resultado de lo mejor, pero yo creo que Salazar podría haber dado algo mucho mejor que este burdo boceto.
¿Cuál es tu película favorita de Mónica Cervera?
Creo que a estas alturas ya todos saben que amo las películas de travestis. A esta, en particular, llegué de un modo extraño: estaba navegando por unos foros de temática transexual (donde se aprovechaba para reseñar películas, libros y material al respecto) cuando en uno de los tópicos se atacó ferozmente a esta película. Debo confesar que buscarla fue algo de morbo pero, por otro lado, la película de "Bajo las piernas" del mismo director, además que la sinopsis presentándola como un musical de un transexual narcoléptico, no hizo más que llamar más y más mi atención.
"Si todos tenemos talento, lo que no tenemos es dinero para desarrollarlo"
Parece que a Ramón Salazar le encanta trabajar con Mónica Cervera, ya lo había hecho en el cortometraje de "Hongos" y en la película que mencioné anteriormente. Debo decir que es una actriz que me gusta de un modo extraño, porque estoy convencida de que su encanto reside en que es, esencialmente, fea. Y la verdad que no cuesta mucho trabajo que uno se la crea como transexual.
La película es rara, como uno podría esperarse, pero para mí de entrada tuvo la desventaja de que es ese tipo de musicales que cuando introducen el escandaloso número musical, hacen que como espectador me sienta incómodo. Será por eso que en general son pocos los musicales que me gustan, claro.
La apuesta más clara de la película es la parafernalia de los bailes junto con lo inusual de su presentación. A la más mínima provocación, que sucede cuando Marieta comienza a quedarse dormida, se monta un espectáculo inesperado y un poco ridículo con adaptaciones de todo tipo de canciones ya consagradas. Vamos de covers de "La vida es una tómbola", "Muchachita", "Parole parole" o "I want to break free". Algunos números incluso son visualmente agradables y/o entretenidos, pero en otros resulta menos afortunada su presentación.
La trama en sí no da para mucho más, nos limitamos a la imagen bastante plana de un transexual que quiere operarse. Y quizá eso no sería del todo malo si no fuera porque todo parece centrarse, claro, en los 20 centímetros que mide el miembro que pretende extirpar. Al más puro estilo freudiano, la película es una oda a la obsesión del falo. Básicamente.
No dudo que eso pueda resultar ofensivo para un transexual, ya que todo queda reducido a la más estereotipada de las caricaturas, que se inclina hacia la vulgarida, la fijación en el sexo por el sexo, y una visión infantil de la situación. El abuso de los números musicales hace que después de un rato la situación ya sea aburrida y cuando la película termina nos damos cuenta de que en realidad no pasó nada.
El elenco es casi destacable si no fuera porque la combinación resulta ser muy pobre. La única que tiene un papel mínimamente real es Mónica Cervera, que diré que no lo hace mal pero su personaje tampoco es de lo más carismático. Aparece mi adorada Najwa en un papel adorable de prostituta-conejo-embarazada, pero si apenas aparece en un par de escenas, sólo en una es aprovechada. Y esto es su número musical, que es divino porque ella además me gusta como cantante, pero, eso, sólo es una vez. Por ahí aparece también Lola Dueñas que igual participó en su película anterior, sin lucir especialmente bien y con igualmente unas dos escenas. Lo mismo para Macarena Gómez. Creo que la única otra mención importante sería para Miguel O'Dogherty, el compañero enano de Marieta, que es un encanto. O quizá también Rossy de Palma como la Frío, que fue mi transexual favorito. Oh.
En conclusión no creo que sea recomendable ni como musical, ni como película de travestis, ni como película onírico-surrealista. Aunque he leído que algunas reseñas dicen que siendo tan extraña e inesperada les ha resultado de lo mejor, pero yo creo que Salazar podría haber dado algo mucho mejor que este burdo boceto.
¿Cuál es tu película favorita de Mónica Cervera?
iba a preguntar si tenía alguna relación con el relato de bukowski, pero ya vi que no
ResponderEliminaryo también amo profundamente a najwa. como tiene que ser
me encantaron tus cuadros el otro día. gracias
besos