"The Dunwich horror", Leigh Scott

02/05/10
Después de la grata experiencia de "Cthulhu", mi hermano y yo nos sentíamos muy confiados buscando nuevas películas basadas en textos de Lovecraft. Sin duda debimos andar con cuidado. Eligiéndo de qué texto queríamos ver algo nos encontramos con una adaptación moderna de "El horror de Dunwich", que es uno de mis cuentos favoritos del autor. E ingenuamente lo buscamos.



"Para poder llegar al final de esto tendrás que comenzar a creer"

Los primeros diez minutos de película debieron advertirnos claramente que no valía la pena molestarnos en ver más. Porque más nos tardamos en ver una entrada con símbolos medio esotéricos y góticas letras que anuncien que se trata de Lovecraft y no imitaciones, y de pronto ya estamos dentro de una recámara de una niña poseída por un demonio-murciélago (y lo digo porque literalmente tenía alitas de murciélago y ojos que brillaban en morado) mientras que el dr. Henry Armitage (que no es otro que Dean Stockwell, sí, el que en aquella serie del viajero en el tiempo le iba diciendo lo que tenía que hacer) y su bella asistente (que parecía una Jean Grey pirata) combatían con ella gracias a sus aparatitos mágicos.
Y narrado así les juro que no suena ni la mitad de terrible que estuvo. No sólo porque las actuaciones y los vagos efectos especiales eran buenos, sino, principalmente, porque nada parecía acomodarse correctamente con nada. Parecía el trabajo de unos estudiantes con unos pocos y muy concretos recursos a utilizar.

Luego, la historia de la familia Whateley en modalidad 'yo me leí el libro y creo que Lovecraft pudo hacer todo más emocionante con un bicho gigante que babeara y una elfa rubia'. Porque Lavinia parece una elfa muy rubia. Y más que con problemas mentales parece un personaje parodia de "Scary movie". De algún personaje muy rubio, obviamente. Bueno, es la de la imagen, para qué les digo más, y debo decir que esa toma incluso la favorece.

Y ya, tenemos otro profesorcillo por ahí que no cree, y que es ex pareja de la bella asistente, y tienen que resolver el misterio. Oh, pero él no cree en superpoderes espaciales mortales, así que estarán discutiendo como adolescentes todo el tiempo mientras van experimentando un suceso paranormal tras otro. Penosos sucesos paranormal, como que un gurú gordo en medio de un montón de mujeres arbitrariamente desnudas camine en el aire. Así, por hobby. Pero, oh, luego todo será un sueño. Y así, sucesivamente.

La terminamos por no dejar, aunque yo antes de la media hora quería arrancarme los ojos. Y me hubiera hecho un favor porque no hubo nada después que pudiera salvarla ni un poquito. Todo parecía completamente fuera de lugar: el sitio dónde se grabó, la ambientación de los lugares, los actores, que el director hubiese nacido. Si quitaban el nombre de Lovecraft de los créditos y le ponían a la película un título como "La maldición de la familia loca en medio del bosque" no habría perdido ni un poco de retórica, aunque Lovecraft hubiera podido descansar un poco más tranquilo, antes de que otra terrible producción de serie B mancillara su nombre una vez más.

Terrible. TERRIBLE. No creo que haya situación que pueda justificar lo mala que es. Aunque, claro, quizá si yo hubiera visto en imdb que tiene 4 estrellitas (que no sé quién fue el piadoso que le dio cuatro estrellitas), hubiera reconsiderado mi decisión. Pero es que hay incluso algunas películas de pésimas críticas que resultan hasta divertidas de lo malas que son. Y este no es uno de esos casos, claro está.

Lo peor es que en la búsqueda también conseguí la versión del 70. Se supone que es un remake pero me niego a pensar que alguien haya ideado algo tan malo y luego alguien haya pensado que valía la pena volver a hacerlo. No hay que decir el miedo que tengo a verla, ¿cierto?