7.10.10



07/10/10
Sitges, día 1. La verdad no pensé que a corto plazo estaría frecuentando el festival de Sitges, de terror y cine fantástico, pero heme aquí, borrando una línea más de mi lista de cosas por hacer antes de morir. Y, bueno, ¿qué mejor modo de comenzar el festival que con Hideo Nakata?



"¿O realmente crees que me interesaba tu pequeña y ridícula crisis de identidad?"

Bueno, la verdad no es tan bella como parece. Yo me dejé engañar fácilmente al leer el nombre de Hideo Nakata y supuse que se trataba de una producción japonesa y la idea original era "¿qué mejor modo de comenzar el festival que con cine asiático?". Pero pasan unos pocos minutos y ¿con qué me encuentro? ¡con Kick-ass! ¡con acento inglés! (sí, ahora sé que él es inglés, pero yo no puedo dejar de verlo como Kick-ass) Entonces todo cambia y tengo que replantearme todos mis juicios originales sobre la película.

No es lo mismo hablar de nuevas tecnologías (bueno, tan nuevo como puede ser un chat, ustedes me entienden) en Japón que en Inglaterra, aún cuando la perspectiva sea de un japones, basada en el guión de un irlandés. Todo esto es cada vez más confuso.
Un grupo de jóvenes concurren en un chat abierto por William. Al principio parece que el asunto no irá más lejos pero deciden romper el hielo hablando de las cosas que odian y poco a poco sus personalidades van apariendo. Está Eva, una joven glamourosa y superficial; Emily, quien vive acosada porque sus padres quieren hacer de ella una perfecta dama inglesa; Mo, un joven reprimido al que le cuesta hablar de lo que siente; y Jim, un chico terriblemente deprimido. Y está, claro, William, quien se muestra como un joven desenvuelto y seguro que oscila entre una actidud agresiva y un presuroso interés en los problemas de los demás. Hacen click y se proponen encontrarse frecuentemente en ese mismo lugar.
Pero el mundo virtual es todo un lugar, algunos de ellos tienen sus propios chats y establecen distintas interrelaciones. Pero William parece mucho más interesado en conocerles de verdad, saber quienes son realmente y cuáles son sus puntos débiles. Poco a poco lo que comienza como una serie de conversaciones triviales se va convirtiendo en un verdadero confesionario donde William y Eva aprovecharán las oportunidades para dar toda clase de malos consejos a los demás personajes.

Lo que se trata de hacer, me parece, es un estudio sobre cómo las interrelaciones en un medio virtual pueden tomar toda clase de caminos equivocados. Cómo se puede ir de lo superficial a lo "íntimo" pero también como uno puede encontrar todas las cosas que igual no hubiera querido ver. Hay muchas alusiones a situaciones reales como las personas que se han suicidado grabándolo con la webcam o esos chats donde se dan asistencias para el suicidio. Por mencionar.
El principal problema es que mucho del interés de fondo se ve opacado por una de las atracciones principales de la película, y es que vemos todo lo que sucede en los chats como si fuesen espacios reales. Sí, como cuando la chica de "Ghost whisperer" chatea y se ve a ella misma como su propio avatar vestida de maneras provocadoras. Claro. O como la idea del mundo virtual de "Gamer". Pero mucho más sencillo: es una especie de hotel donde uno escoge un cuarto y lo decora a su estilo. Los avatares son realmente una representación exacta de uno mismo, si acaso variando ligeramente en la actitud hacia el mundo real.
Al principio el constraste no es especialmente agradable. Principalmente porque no creo que represente la relación exacta que uno establece de manera virtual, dado que el trato no es equiparable a un encuentro físico. Además que minimiza mucho la idea de que, finalmente, uno está solo de su lado de la computadora. Eventualmente uno se va acostumbrando a la ambientación pero creo que le quita algo de seriedad en algunos puntos que lo hubiera requerido.

Luego, Aaron Johnson. A mí me agrada, pero no puedo verlo como un villano. Creo que ni él mismo se puede ver como un villano. Obviamente acá está contextualizado de algún modo, que de hecho son las partes más convincentes de su personaje, pero aún así se supone que tiene ideas malévolas, y es difícil creérselo. Es difícil verlo tan inteligente y maquiavélico. Y eso hace que los demás personajes se vean un poco tontos por resultar tan manipulables.

Es una película entretenida pero no mucho más. Creo que el ser brillante y bonita e inglesa y con niños con problemas pero que son buenas personas por dentro, le quita ciertos puntos. Puntos que habría recuperado fácilmente localizándose en Japón y enfocándose en un montón de frikis con problemas. O eso digo yo. Tomemos en cuenta que un montón de los datos enfermos de crímenes o similares alrededor de internet suceden por ahí. Le da credibilidad.

Pero bueno, todos estos días estaremos documentando Sitges, o al menos lo que nos toque ver.




¿Película favorita de Hideo Nakata?

0 guiños:

Publicar un comentario