08/07/08
Es una confesión difícil de hacer: tenía ganas de ver una película romántico o algo así. Es decir, no iba tampoco a arriesgarme a un drama apastelado pero planeaba dejar un poco de lado los asesinatos, el terror, las batallas épicas, etc y ver un poquillo de romance. Ya hace algún tiempo reseñé "Wicker park" y comenté que, dado que no fue nada de lo que esperaba, terminó por gustarme mucho y la consideré bastante bien hecha para una premisa romántica.
Se nota que el género no me agrada especialmente, ¿he?
Pues bueno, la apuesta más fuerte en ese momento sonaba por la original francesa por la cuál hicieron el remake de "Wicker park": "El apartamento". Lucía ideal, especialmente si tomamos en cuenta que la pareja estrella son Vincent Cassel y Monica Bellucci, quienes me parecen adorables en todas sus películas juntos (aunque sería un poco injusto, siendo que Monica evidentemente encarnaba a Lisa y mi personaje favorita, al menos en la primera referencia, es Alice).
Pero mmmm, las cosas se salieron un poco de control.
"Si hay algo que no soporto es la tibieza"
Hay algo poderoso en el poder de convencimiento. Cuando comenzó la película me propuse dejar atrás todas mis nociones previas de la historia que ya conocía por el remake, y aunque, bueno, uno no puede evitar saber un poco por dónde va la trama (sobre todo porque a veces a los norteamericanos les gusta hacer calcas más que remakes), realmente llegué a olvidar muchos de los detalles claves de la primera. Que mi hermana luego mencionaba oportunamente.
Bueno, para los que hayan visto la otra, la tomaré necesariamente como referencia, ajam: ciertamente es muy similar, de esos remakes que realmente se toman muy estrictamente lo que sucede. Pero por una parte la ambientación es diferente, claro, son los 90 y todo luce mucho más retro, y explica algunas cosas como que en pleno Nueva York a nadie se le ocurra localizar a la gente por medio de su celular: en esta aún no eran comunes de modo que era lógico que uno se perdiera nada más. También el hecho de que sea en París le da un toque distinto, necesariamente, algo en la ambientación que queda bastante distinto a lo cosmopolita que luce la versión norteamericana.
Es también muy curioso ver a Cassel tan joven, no sé, tiene algo tierno. También Monica luce increíblemente guapa, aunque eso no es novedad en ninguna circunstancia. Hay algo también en los personajes que los hace parecer un poco más psicópatas (sutilmente, claro está) que en la otra versión. Digo, además del hecho que a nadie le parece extraño que siempre haya alguien siguiendo a otra persona, o alguien obsesionado enfermizamente con alguien, no, es lo más normal del mundo en las grandes capitales.
Ahora bien, cuando entra Alice en escena las cosas cambian un poco, al menos desde mi percepción. Primero, la actriz, Romane Bohringer es muy extraña, físicamente hablando. Obviamente uno está predispuesto al haber visto a alguien más (Rose Byrne, en este caso) realizando el mismo papel. Pero, no sé, había algo entre extraño y perturbador en ella que la convirtió en otro personaje completamente, muy lejos del que a mí me había encantado en la otra película. Aunque, por otro lado, con su propio y particular encanto.
Y bueno, conforme va avanzando hacia el final pequeños detalles comienzan a variar, sin aparante gran trascendencia, con la otra versión hasta que, ajam, viene el gran spoiler (ok, no es tan grande, pero personas susceptibles que esperen verla no deben continuar leyendo hasta que termine el párrafo): el final es terriblemente deprimente. Olvídense de la clásica idea que la versión hollywoodense obviamente apoya de que el amor verdadero sobrevive a todo y uno sólo necesita encontrarse con alguien a quien no ha visto en años por casualidad en un aeropuerto y entonces su vida se detendrá y podrán amarse etc etc etc. Los franceses dicen: eso no pasa aquí y fin.
Así que mis planes de una apacible tarde viendo una película romántica se vieron interrumpidos por una clara manifestación de la realidad.
Está bien, es una valiosa lección cinematográfica que todos debemos aprender. O algo así. De cualquier modo tiene su propio encanto, a pesar de ser tan similar a la otra. Y Vincent luce tan sensual como siempre.
Quisiera ir a ver "Wall-e". El robotito ese se ve adorable. Pero tampoco tengo demasiadas ganas de salir últimamente. Mmmmmm.
¿Cuál es tu película favorita de Cassel & Bellucci?
Es una confesión difícil de hacer: tenía ganas de ver una película romántico o algo así. Es decir, no iba tampoco a arriesgarme a un drama apastelado pero planeaba dejar un poco de lado los asesinatos, el terror, las batallas épicas, etc y ver un poquillo de romance. Ya hace algún tiempo reseñé "Wicker park" y comenté que, dado que no fue nada de lo que esperaba, terminó por gustarme mucho y la consideré bastante bien hecha para una premisa romántica.
Se nota que el género no me agrada especialmente, ¿he?
Pues bueno, la apuesta más fuerte en ese momento sonaba por la original francesa por la cuál hicieron el remake de "Wicker park": "El apartamento". Lucía ideal, especialmente si tomamos en cuenta que la pareja estrella son Vincent Cassel y Monica Bellucci, quienes me parecen adorables en todas sus películas juntos (aunque sería un poco injusto, siendo que Monica evidentemente encarnaba a Lisa y mi personaje favorita, al menos en la primera referencia, es Alice).
Pero mmmm, las cosas se salieron un poco de control.
"Si hay algo que no soporto es la tibieza"
Hay algo poderoso en el poder de convencimiento. Cuando comenzó la película me propuse dejar atrás todas mis nociones previas de la historia que ya conocía por el remake, y aunque, bueno, uno no puede evitar saber un poco por dónde va la trama (sobre todo porque a veces a los norteamericanos les gusta hacer calcas más que remakes), realmente llegué a olvidar muchos de los detalles claves de la primera. Que mi hermana luego mencionaba oportunamente.
Bueno, para los que hayan visto la otra, la tomaré necesariamente como referencia, ajam: ciertamente es muy similar, de esos remakes que realmente se toman muy estrictamente lo que sucede. Pero por una parte la ambientación es diferente, claro, son los 90 y todo luce mucho más retro, y explica algunas cosas como que en pleno Nueva York a nadie se le ocurra localizar a la gente por medio de su celular: en esta aún no eran comunes de modo que era lógico que uno se perdiera nada más. También el hecho de que sea en París le da un toque distinto, necesariamente, algo en la ambientación que queda bastante distinto a lo cosmopolita que luce la versión norteamericana.
Es también muy curioso ver a Cassel tan joven, no sé, tiene algo tierno. También Monica luce increíblemente guapa, aunque eso no es novedad en ninguna circunstancia. Hay algo también en los personajes que los hace parecer un poco más psicópatas (sutilmente, claro está) que en la otra versión. Digo, además del hecho que a nadie le parece extraño que siempre haya alguien siguiendo a otra persona, o alguien obsesionado enfermizamente con alguien, no, es lo más normal del mundo en las grandes capitales.
Ahora bien, cuando entra Alice en escena las cosas cambian un poco, al menos desde mi percepción. Primero, la actriz, Romane Bohringer es muy extraña, físicamente hablando. Obviamente uno está predispuesto al haber visto a alguien más (Rose Byrne, en este caso) realizando el mismo papel. Pero, no sé, había algo entre extraño y perturbador en ella que la convirtió en otro personaje completamente, muy lejos del que a mí me había encantado en la otra película. Aunque, por otro lado, con su propio y particular encanto.
Y bueno, conforme va avanzando hacia el final pequeños detalles comienzan a variar, sin aparante gran trascendencia, con la otra versión hasta que, ajam, viene el gran spoiler (ok, no es tan grande, pero personas susceptibles que esperen verla no deben continuar leyendo hasta que termine el párrafo): el final es terriblemente deprimente. Olvídense de la clásica idea que la versión hollywoodense obviamente apoya de que el amor verdadero sobrevive a todo y uno sólo necesita encontrarse con alguien a quien no ha visto en años por casualidad en un aeropuerto y entonces su vida se detendrá y podrán amarse etc etc etc. Los franceses dicen: eso no pasa aquí y fin.
Así que mis planes de una apacible tarde viendo una película romántica se vieron interrumpidos por una clara manifestación de la realidad.
Está bien, es una valiosa lección cinematográfica que todos debemos aprender. O algo así. De cualquier modo tiene su propio encanto, a pesar de ser tan similar a la otra. Y Vincent luce tan sensual como siempre.
Quisiera ir a ver "Wall-e". El robotito ese se ve adorable. Pero tampoco tengo demasiadas ganas de salir últimamente. Mmmmmm.
¿Cuál es tu película favorita de Cassel & Bellucci?
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