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12.10.09



12/10/09
Bueno, estuve un poco ausente porque me fui al festival de cine de Morelia a recoger las migajas de los últimos días. Así que al menos durante poco más de una semana estaremos con esas reseñas antes de continuar con mis miles de películas atrasadas. Creo. Ajam.
La primera que vimos fue "Tales from the golden age". Primero porque el país invitado fue Rumania y habían miles de películas de ahí. Luego porque el único director citado en el programa era Cristian Mungiu y a mí me ganó con "4 meses, 3 semanas y 2 días". Y luego porque tengo una fijación por la Rumania del periodo de Ceausescu.



"Cuenta la leyenda que miles de personas tuvieron que robar de su trabajo por años para poder sobrevivir"

La idea es sencilla pero la verdad que resulta de lo más apropiada. Sobre todo que últimamente aparecen tantas colecciones temáticas de cortometrajes por todos lados. Y, bueno, tienen un periodo histórico, comunista en este caso, un dictador, y una serie de situaciones lógicas (aunque paradójicamente absurdas) como las que suelen suceder en estos periodos. Así aparecen una serie de cinco (jo, creo que eran cinco, al menos sólo esos puedo recordar) leyendas que se dicen que ocurrieron durante ese momento histórico. Situaciones relacionadas con los problemas sociales que se vivían pero principalmente con lo absurdo que resultaban en muchas cuestiones.

Para resumirlas rápidamente tenemos la leyenda de la visita oficial (mi favorita), donde muestran los preparativos excesivos que tenía que realizar cada población cuando un coche oficial iba simplemente a pasar por ahí. Es una delicia de lo absurdo. La leyenda del fotógrafo oficial, donde muestran todos los retoques que se debían hacer a las fotografías de Ceausescu antes de ser publicadas. La leyenda del repartidor de pollos, donde se ve cómo uno debía aprovechar hasta lo mínimo que ofreciera su trabajo (muchas veces de forma ilegal) para conseguir alimentos y otros artículos. La leyenda del nosequé del cerdo (jo, no recuerdo el nombre) donde vemos cómo se conseguían alimentos imposibles de conseguir de contrabando. Y la leyenda de los vendedores de aire, donde nos muestran hasta las maneras más ridículas en que se engañaba a la personas para poder conseguir dinero.

Con una mirada desenfadada y muy hilarante presenciamos supuestos sucesos que seguramente en el momento no fueron realmente graciosos. Una muestra fresca de cómo el abuso de poder es también absurdo. Y de hecho supongo que cualquier país cuya historia involucre cualquier movimiento de dudosa legalidad podrá pensar en episodios así, que vistos ahora son completamente absurdos.

Un grato inicio del festival, al menos de lo que me tocó a mí, claro.




¿Alguien que quiera compartir una hilarante anécdota histórica?
A mí se me ocurre que el día de la independencia de México se celebra el día del cumpleaños de Porfirio Díaz y no en la fecha que sucedió realmente. Jo.