28.10.13

Parece que hace una vida que no me aparezco por aquí. Días pesados. Pero estamos de vueltaaa. Y con una serie, animada, para variarle un poco.



"Vamos a visitar juntos el infierno"
Me topé con "Ayakashi" (a la que a veces se le anexa el subtítulo "Japanese classic horror") por casualidad y supe que era todo lo que quería en una serie: pocos capítulos, tramas paranormales, animación japonesa. No hay más que hablar. 

Sus 11 capítulos se dividen para dar forma a tres historias distintas, con diferentes directores y estilos de animación que, a su modo, retoman trazos de ilustración clásica del país, lo que da un toque todavía más particular a la revisitación de leyendas clásicas japonesas. 
La primera es "Yotsuya Kaidan" (del capítulo 1 a 4), cuento del que ya hemos hablado en otra de sus adaptaciones clásicas. Es una célebre historia retomada por un autor Kabuki (cuyo estilo se corresponde con los trazos de los capítulos) que trata sobre un ambicioso y violento ronin cuyos actos van desencadenando una serie de funestos eventos. 
Seguimos con "Tenshu Monogatari" (del capítulo 5 a 8), que trata sobre una suerte de historia de amor entre un humano y la princesa de los Dioses Olvidados. Con un estilo un poco más típico animesco y la que más aprovecha los elementos fantásticos.
Finalmente, "Bake Neko" (del capítulo 9 al 11), contada desde la perspectiva de un farmacéutico ambulante que llega a una casa maldita para encontrarse con que es el espíritu de un monstruo-gato quien causa las desgracias familiares. Su estilo es una suerte de ilustración clásica estilizada con detalles que parecieran trazos de pincel. 

Con capítulos cortos que no alcanzan a llegar a los 30 minutos y un atractivo entre la tradición y lo paranormal, "Ayakashi" es una serie que no sólo tiene una producción increíble sino que además resulta de lo más interesante y amena. Como puede suceder con casos así, alguna de las historias destaca por encima de las otras (el tramo final con el Bake Neko es fantástico) pero manteniendo en general un muy buen nivel tanto en el ritmo narrativo como en su estilo visual. 

De hecho es una idea tan aparentemente sencilla y que funciona tan bien (haciendo especial énfasis en el cuidado estético) que me sorprende que no la hayan aprovechado más para continuar con más leyendas clásicas. Sin ir más lejos, la del Ayakashi, criatura mitológica marina japonesa. 




¿Última serie de animación que hayan visto?

20.10.13

Una serie de eventos más bien afortunados interrumpieron MI Festival de Sitges al parecer de manera indefinida. De modo que retomaremos las reseñas regulares y quizá en algún momento nos toque hablar de las demás películas que vi al respecto. Dentro de mucho tiempo, probablemente. 
Así que: Hong Kong, ¿falsos documentales?, terror. Todo lo que un domingo necesita.



"Se cree que si la persona que murió recibe el aliento de una persona viva en menos de 49 días, se llama al espíritu y vuelve del infierno"
Un grupo de investigadores paranormales recorren Asia en busca de nuevas y extrañas emociones. Tras una breve introducción en las zonas afectadas por el tsunami que asoló Indonesia, nos trasladamos a Tailandia, a que empiece la verdadera función. Y todos saben que yo no soy muy fan del terror tailandés pero el ir de la mano de unos hongkoneses quizá me daba un poco más de seguridad.

Al parecer la película parte de un programa de televisión en Hong Kong con el mismo formato. Una estructura más o menos usual en los programas de televisión, sobre todo los que tienen componentes paranormales, en que van en busca de experiencias distintas, las presentan un poco a modo de reportaje y luego le añaden su toque especial. Nosotros no contamos con el contexto respecto al programa o los personajes, pero suponemos que una vez agotada la familiaridad de su país natal lo lógico era lanzarse a otro para su gran aventura cinematográfica. Y Tailandia no sabe qué hacer con su cine pero como cultura tiene sus apropiados rincones oscuros.

"The Unbelievable" puede tomarse de tres modos. Para nosotros, occidentales, es posible verlo como si todo formara parte de la estructura de falso documental, con un programa ficticio utilizado en favor de retratos esotéricos de otra cultura. Como 'especial' de un programa real, podemos sospechar los recursos de la ficción acomodando convenientemente las supuestas experiencias, o también podemos creernos que gran parte de lo que muestran es real. Después de todo, cosas más raras se han visto. No estamos hablando de un intento descarado de convencernos que hay espíritus y tirar cosas a la mínima provocación. Lo paranormal comienza con lo tradicional y es hacia esas raíces hacia las que nos acercamos.

A través de fragmentos un poco rudimentarios, como si no hubieran tenido tiempo de editarlos del todo, nos sumergimos en las tradiciones esotéricas propias de Tailandia desde distintas perspectivas. Vamos desde las historias repetidas de casas malditas (que no pueden faltar en ningún país) hacia sesiones de espiritismo, chamanes particulares, hasta talismanes de lo más inesperados (como momias de nonatos) (que de hecho a los meses de ver esta película leí un artículo sobre que la policía en Tailandia había interceptado un intercambio, creyendo que era de droga, para encontrarse con maletas llenas de cadáveres momificados de bebés). Están las presentaciones a modo de reportaje y luego hay el deseo absurdo de experimentación al más propio estilo 'juguemos ouija en el cementerio maldito'. Que consigue un efecto mucho más contundente que los usuales programas del estilo gracias a lo que yo considero es pietaje real. No de espíritus manifestándose, claro, pero sí de rituales íntimos o tradiciones extravagantes y un poco agresivas, que el equipo tuvo el acierto de grabar. 

Si sus momentos de terror no consiguen ser demasiado terroríficos (porque fieles a la verosimilitud televisiva, si es que eso existe, no se arriesgan con experiencias muy radicales) lo compensa con creces con el interesante retrato de la subcultura espiritista de un país. Con algunos momentos incluso muy bien logrados. 
Sería fantástico poder ver el programa de televisión original.




¿Algún programa (real o ficticio) paranormal que les guste?

16.10.13

Yo no fui de los que aclamaron exhaustivamente "Drive", aunque poco se necesita agregar a lo buena película que es. Pero ya había caído en el encanto de Nicolas Winding Refn (y su nombre de conde europeo) con "Bronson". Y al parecer "Only God forgives" (con un título que al parecer va a entrar en mi top de títulos favoritos) sólo venía a confirmar mis sentimientos.



"Time to meet the devil"
Al parecer muchos de los que cayeron ante el encanto de "Drive" no esperaban que continuara (y con Ryan Gosling de por medio, se enfatiza el asunto de 'continuación') con "Only God forgives". Es sin duda una cinta mucho más complicada, arriesgada y con tintes experimentales. Hay que recordar que "Drive" no era un guión del director, como sí lo es este proyecto. Una cuasi tragedia griega que nos lleva hasta Tailandia.

Julian es dueño de un gimnasio de muay thai, una fachada apropiada para su negocio de drogas y otras ilegalidades que lleva junto con su hermano Billy. Billy es un hombre un poco perturbado y al parecer el poder que han conseguido los hermanos en el país no hace sino descontrolarlo más, y a poco de iniciar la película encuentra un fin trágico cuando, después de asesinar brutalmente a una prostituta menor de edad, es a su vez asesinado por el padre de la misma (bajo la benévola mirada de Chang, un policía). Como si la cosa necesitara complicarse más Crystal, la madre de ambos, llega al país para exigir las cabezas de aquellos involucrados en la muerte de su primogénito. 

El título alude de algún modo a la ley del talión. A la búsqueda desesperada de venganza y el ciclo infinito que esta violencia inaugura. La ubicación en Tailandia no podría ser más apropiada y las relaciones entre los personajes se complica en virtud de una implícita jerarquía de poder: extranjeros que se aprovechan de los negocios ilegales de un país en vías de desarrollo, la corrupción y la impunidad que permiten esos negocios pero que también son capaces de contratacar a traición, la vanalización de la vida humana cuando ésta se interpone en la necesidad de venganza. En el supuesto derecho a la venganza. 

Y todo esto puede sonar a thriller garantizado pero la trama juega en un nivel mucho más elemental de lo que uno podría esperar en una película con esta premisa. Lo importante no es ya quién asesina a quién, quién busca o encuentra a quién, quién gana. Es la necesidad, la desesperación, y una búsqueda mucho más profunda la que guía una serie de escenas que oscilan muchas veces entre la violencia fortuita y el surrealismo. Es una película muy instintiva, casi primitiva, en tanto los personajes como las imágenes son guiadas por instintos básicos, por emociones profundas e inconscientes. Los juegos de luces, los diálogos y silencios reveladores, la incoherencia que a veces parece regir las acciones, revelan una perpetua lucha eterna en el interior de personajes incapaces de externarla. Es esa la verdadera desesperación, la verdadera necesidad, la verdadera búsqueda. Es la incapacidad de alcanzarla, concretarla, alcanzarla, lo que define los sucesos. 

Con una crítica y recepción mucho más negativa que su anterior cinta, para muchos es un ejercicio extraño y en muchas ocasiones inentendible. Para mí es una reinvención fantástica de la tragedia clásica y de las mejores películas del año. Excelente. 




¿Película de Ryan Gosling favorita?

15.10.13

Cuarto día de MI Festival de Sitges y vamos de nuevo a la carga con Asia. Ahora con Corea del Sur y sus históricas intrigas políticas (la cual fue algo así como la temática de ayer).



"Gentlemen, it's your patriotism that is basically sustaining the country"
Ya en algún otra ocasión he comentado, a razón de alguna película, el periodo oscuro por el que atravesó Corea del Sur antes de llegar al esplendor económico y social que la caracteriza en nuestros días. Aunque salieron relativamente bien parados de la guerra con sus compatriotas del norte, el gobierno que quedó instaurado (por influencia de Estados Unidos) fue una violenta y represiva dictadura. Ahí partimos en "National security", título de la película y nombre de la ley que existía en aquel entonces y que permitía detener a cualquier persona sospechosa de atentar contra la integridad nacional.

Kim Jong Tae es un padre de familia quien fuese líder de un movimiento por la democracia durante muchos años antes de retirarse. Desde entonces es seguido y acosado por las autoridades quienes no dudan de asociarlo con cualquier situación adversa que se presente. Lo que parece ser otra de tantas visitas de rutina de la policía termina con su confinamiento en Namyeong-Dong, conocido centro de detención para criminales políticos y eje oscuro de la dictadura en turno. Durante 22 eternos días Kim Jong Tae fue sometido de manera sistemática a torturas, interrogaciones y toda clase de abusos con tal de obtener de él lo que se pretendía. La ilusión del gran complot. La película hace un recuento bastante detallado de esos días y sus procedimientos.

Uno podría decirse que ya hemos visto gran parte del aspecto malvado de la humanidad y su infinita capacidad de expresarse en cuerpos ajenos. Las largas secuencias de tortura no están para sorprender a nadie, ni siquiera parecen esmerarse de manera exhaustiva en ser explícitas o crueles, pese a que dejan bastante en claro y desde el principio las inhumanas condiciones por las que atravesaban los presos políticos de la época. Si bien es una pena que sean las secuencias más largas y ocupen la mayor parte del metraje (como si fuera necesario recordarnos en todo momento hasta dónde pueden llegar esos abismos), dejando un poco de lado los aspectos más interesantes relacionados con esta ley de 'seguridad nacional': el poco interés en la verdad, la necesidad de arrastrar más y más culpables, la construcción del discurso oficial sobre el que se sustentaba la dictadura y que necesitaba señalar a comunistas, norcoreanos y todos los demás enemigos del pueblo. El escenario se completa con una serie de personajes de distintos rangos, desde el jefe de sección hasta el torturador oficial, complementándose con los oficiales menores que sólo se encargan del trabajo sucio. A veces pareciera que no resultan tan agresivas las escenas de golpes y suplicios como los momentos en que la *tregua* se construye sobre mentiras que son más que evidentes para todos los presentes. Un círculo de violencia y agresión sin sentido destinado a construir absurdos. La base de cuántas dictaduras.

Una película muy dura en su justa medida, dentro de espacios limitados y con la excelente actuación de Won-sang Park como protagónico indiscutible. Aunque con algunos elementos de más (siempre me han desesperado las ilusiones-flashback en cautiverio, por contrastar con el resto de la atmósfera, aunque me imagino que son situaciones reales de lo más comunes) y que por desgracia no aprovecha algunos puntos que podrían ser bastante interesantes, como lo que sucede después (con el país y con los involucrados) y que se resume en una escena final que podría haber sido un golpe mucho más contundente.




¿Otras películas sobre presos políticos que les gusten?

14.10.13

Por una de esas maravillosas alineaciones cósmicas, "The World's End" se estrenó en salas nacionales el pasado viernes, coincidiendo de manera exacta con MI Festival de Sitges y dándome el gusto de al menos poder disfrutar de una de tantas películas en pantalla grande. Gracias, Edgar Wright, tú siempre puedes alegrar mi día.



"How can you tell if you're drunk if you're never sober?"
Saben ya que amo a Edgar Wright y su Trilogía de Sangre y Helado, ¿no? ¿Es que puede haber alguien que no ame a Edgar Wright? (De hecho creo que los que se sentaron justo detrás de mí en el cine dirían que sí que se puede).

Cada sabor de helado cornetto correspondiente a cada película revela algo sobre su naturaleza. A "The World's End" le toca el helado de menta. Verde. Extraterrestres. Ciencia ficción. La película inicia como una problemática oda a la adolescencia y los tiempos perdidos, con un hombre cuya vida se quedó detenida en su último año escolar y el intento de hazaña de su grupo de amigos de beber una cerveza en cada uno de los 12 bares del pueblo. Nunca fue tan feliz como esa noche. Varios años después, fracasado e inconforme con su vida, se decide a reunir a la banda y tratar de recuperar esos años perdidos repitiendo la alcohólica odisea. Pero ellos ya no son los mismos. Y muchas cosas en el pueblo ya no son las mismas. 

Una vez más, Wright consigue que una trama de amistad, amor y/o lealtad sea configurada a través de un complejo complot de catastróficos géneros clásicos. En este caso una serie de guiños a cintas clásicas de ciencia ficción, destacando "La invasión de los ladrones de cuerpos", que es un gran clásico para revisitar. Lo que ya es una gran puesta en escena en la que nos topamos con Gary King (Simon Pegg rockeando su personaje, como siempre), un hombre mayor perpetuamente atrapado en el pasado, y el choque constante que se da con sus antiguos mejores amigos que han podido seguir sus vidas: Andy (la otra mitad del dúo fantástico, Nick Frost), Oliver (mi amado Martin Freeman), Steven (Paddy Considine) y Peter (un adorable Eddie Marsan); no puede sino mejorar cuando al clímax emocional de esta reunión de generación empiezan a agregarse los elementos robóticos-alienígenas. Y viene el festín. 

No es que vaya a ser la mejor de la trilogía pero es difícil quitarle su corona a "Shaun of the dead" (una de las pocas películas cuya traducción al español me parece maravillosa: "El desesperar de los muertos"), pero es una garantía de calidad, diversión y pasar unas fantásticas horas en el cine. Wright, como siempre, consigue llevar la comedia a otro nivel.




¿Película favorita de la Trilogía de Sangre y Helado? 

13.10.13

Segundo día de MI Festival de Sitges y era claro que no íbamos a pasar por alto las novedades asiáticas, ¿no? Entre los directores consentidos del festival, y que este año tienen buena presencia, estaba el fantástico Johnnie To que estrena dos películas. Una de ellas su primera producción de acción en China Continental. Difícil resistirse. 



"I'm a cop, you a drug trafficker. I didn't betray you; I busted you"
Tras una redada en la que capturaron a varios pequeños traficantes que llevaban droga encima (por no decir adentro), el capitán Zhang se topa casi por casualidad con un hombre que había provocado un aparatoso accidente de tráfico, descubriendo rápidamente que llevaba una alta cantidad de droga encima. Timmy Choi es un productor masivo de drogas y la pena que se le viene encima no es muy esperanzadora: los crímenes relacionados con tráfico de droga son pena de muerte segura en China. Timmy accede a introducirlos en su red de contactos como agentes encubiertos a cambio de evitar una muerte segura. A partir de ese momento las cosas comenzarán a complicarse de formas inesperadas.

Si bien uno puede decir (como muchas críticas han enfatizado) que Johnnie To no está descubriendo el hilo negro de las películas de detectives, de tráfico de drogas, de agentes encubiertos; también es cierto que las posibilidades que localizar la trama en China Continental le dan a la historia sirvieron para que renovara un poco su usual perspectiva del cine de acción. Una red de acciones y localizaciones mucho más amplia, dándole una nueva dimensión especial. Un ritmo distinto que prima en muchos momentos a la estrategia por encima de la acción pura. Y una serie de detalles que variaría la aproximación a la estructura clásica de lealtades y traiciones entre policías y criminales. Apenas esos ligeros cambios le dan un empuje monumental a la película que no necesita mucho para configurarse como un nuevo clásico de un director que ya tiene algunos cuantos clásicos en su haber. Una maravilla.

Zhang y Choi son dos personajes excelentemente configurados que se contemplan de manera fantástica sin repetir las fórmulas usuales de amigos/enemigos del cine hongkonés. Zhang es un capitán de policía enorme, con una capacidad histriónica increíble y que no teme llegar hasta las últimas consecuencias para hacer su trabajo. Había visto ya a Honglei Sun en otras excelentes películas (como "El camino a casa" o "Mongol") pero nunca conquistando de esa manera una película. Gran parte de la fuerza en pantalla partía de su poderoso temple y presencia. En el extremo contrario está Timmy Choi, un individuo débil, cuya honestidad y cooperación parecen siempre producto de su incapacidad de grandes acciones. Pero incluso con esta 'debilidad' es capaz de hacer que la historia tome su rumbo, se ajuste a sus movimientos, y el modo en que va mostrando sus verdaderos rostros conforme se despliega la trama lo hace un antagónico maravilloso. 

Y aunque al inicio pueda parecer que no habrá tanta acción y violencia gratuita como nos tienen acostumbrados este tipo de historias, hay que esperar por el explosivo tramo final. Increíble. 

Seguro que parece que yo siempre tengo más que palabras amables para Johnnie To, pero hay que admirar su inmensa capacidad para seguir cautivando y sorprendiendo tras tantas películas. Es sin duda todo un maestro en su arte. Y eso que todavía no les he hablado de "Blind detective", pero esa casi que irá al orden habitual de mi lista de espera.




¿Película favorita sobre tráfico de drogas? (No, no se vale decir "Breaking Bad")

12.10.13

Por segundo año consecutivo da inicio MI Festival de Sitges. El segundo mejor Festival de Sitges del mundo. Y, bueno, sin mayor preámbulo (retoque de tambores): "Upstream color".



"I have to apologize. I was born with a disfigurement where my head is made of the same material as the sun. It makes it impossible for you to look directly at me"
Es engañoso hablar brevemente de lo que trata "Upstream color". Podría decirse que trata sobre un hombre y una mujer que se conocen, ambos arrastrando hechos dolorosos y traumáticos en su pasado, con los que ahora deben luchar para intentar de reconstruir sus vidas, juntos. Lo que la haría sonar un poco como una película dramática-romántica no particularmente especial. Pero también podríamos decir que se trata sobre dos individuos que han comenzado a formar parte del ciclo de vida de un organismo del que ambos desconocen la existencia, pero que los consume desde dentro, sin permitirles ver el panorama general. Un panorama de sonidos amplificados, temores irracionales, luchas biológicas por la supervivencia. Todo eso es "Upstream color". Y más.
 
Hace casi 10 años Shane Carruth sacudió al género de la ciencia ficción contemporánea con su ópera prima "Primer". Una muy complicada, teórica y maravillosa revisión de los viajes en el tiempo. Tras una larga ausencia vuelve a las pantallas con una nueva y enredada trama, donde parece experimentar con los límites entre lo convencional, lo experimental y lo meramente sensitivo. "Upstream color" es una historia que en gran parte de sus momentos exige que se deje de pensar en ella en los términos más regulares de la construcción del relato, de acción-reacción. 
Uno percibe y entiende las razones inmediatas. Abrimos con lo sucedido a Kris, una mujer que pierde sus ahorros y parte de su vida tras un inusual secuestro. Vemos el suceso paso por paso, lo que sucede después y la acerca a Jeff, un hombre al que conoce en un camión. Vemos las escenas de su vida conjunta. Pero detrás del cuidado excesivo en los detalles sensoriales (los sonidos exacerbados, las tomas detalle, los colores tan nítidos, los diálogos que construyen sus universos interiores) hay una cortina que nos impide ver más allá. ¿Cómo llegaron a ese punto? ¿Cuáles son las verdaderas implicaciones de las situaciones que vivieron? ¿Cuáles son esos secretos que se extienden sobre ellos como sombras? Uno tiene que renunciar a entender y dejarse arrastrar por esa marea de emociones e imágenes que van construyendo, secretamente, extrañamente, el relato detrás de ellos. Renunciar y sumergirse. 

Al igual que con "Primer", la película corre el riesgo de que al no entenderse demasiado, al ser tan lenta y tan llena de aparentes simbolismos, el espectador pueda no establecer nunca una conexión real y termine por parecerle innecesariamente complicada e inetendible. La verdad es que por sus elementos yo hubiera creído que terminaría por perderme pero caí en el encanto del exceso de sensaciones que construyen la fuerza central de la historia. 
Fantástico modo de iniciar este Festival. Y todavía falta, uy.




¿Otras películas con toques experimentales que les gusten?

10.10.13

Por Iván me enteré de la existencia de este documental, hace unas semanas en que comenzaba a anunciarse su próximo estreno. Una serie de elementos conseguían llamar la atención rápidamente: un pequeño y desconocido hecho histórico relacionado con los funestos hechos del 68 en México, un personaje olvidado durante años, un retrato cruel de las condiciones de las instituciones de salud mental en el país y su utilización como herramienta política. Todo eso ponía sobre la mesa "El paciente interno". ¿Y cómo resistirse?



"Detrás de cada movimiento hay un hombre que está dispuesto a dar la vida"
Unos años después del asesinato masivo de estudiantes en la Plaza de las Tres Culturas en México, con el presidente Díaz Ordaz repitiendo en sus discursos su reivindicación ante los sucesos y su papel casi salvador, un hombre movido por una profunda (casi obsesiva) fe religiosa y la noción de que su vida debía servir para propósitos mayores, decidió asesinar al presidente en plena calle. Falló. Tras la usual cadena de abusos de autoridad y vejaciones fue conducido a un hospital psiquiátrico donde pasaría los siguientes 23 años de su vida, hasta que una estudiante de derecho deseosa de hacer su tesis sobre casos clínicos penales se encontrara con su muy irregular expediente. Ese hombre es Carlos Francisco Castañeda de la Fuente, ahora un mendigo en las calles de México, incapaz de organizar su vida en sus mínimos detalles. Como bien menciona uno de los periodistas que siguió su caso para denunciar tanto los atropellamientos cometidos por el gobierno de Díaz Ordaz como el uso (o maluso) de las instituciones mentales para propósitos inhumanos, es un hombre que si bien no se cuenta entre los cientos de personas desaparecidas de ese sexenio, no deja de ser una víctima dolorosa de las muchas injusticias que pueblan la historia reciente de México. 

El documental tiene muchas perspectivas, muchos ángulos. Es un solo caso, un solo hombre, pero su trayectoria permite marcar diversos puntos, complejas redes y consecuencias, abusos. Tenemos en primer plano a un hombre de casi 70 años, cargado de manías, traumas, dañado irreparablemente, no sabemos desde qué punto. Vemos cómo intenta ajustarse a un nuevo centro social para indigentes, cómo se relaciona con sus parientes que continúan vivos, cómo recuerda hasta los más mínimos detalles del episodio más oscuro de su historia. Tenemos luego el hospital, la revisión de su pasado opresor y de las condiciones muy poco humanas que vivían sus reos. Otras historias. Tenemos a la abogada que descubrió y llevó su caso hasta poder solucionarlo, entre tantas otras irregularidades penales con las que se encontró en el hospital. A los periodistas que denunciaron estas situaciones, que se dedicaron a seguir descubriendo procesos ocultos desde hace años. Mientras más nos adentramos en este laberinto, mientras más sabemos, nos van quedando más dudas que respuestas: ¿Tenía realmente delirios esquizoides antes de ser internado? ¿Cuántas otras historias de interés político fueron silenciadas en esos pabellones? ¿Podemos llegar a comprender que un hombre quisiera cuasi inmolarse por señalar a una figura política como responsable directo de tan atroces acciones?
Hay momentos en que Francisco Castañeda cuenta lo que él vivió durante el 68 y se le quiebra la voz. Al espectador también se le quiebra algo al presenciar esos abismos de la humanidad, sucedidos apenas pocos años atrás. 

Un duro retrato histórico y social que además es manejado con la medida exacta para su complejidad, con un equilibrio justo entre sus sombras. Además, la clase de cine mexicano que da gusto ver. Hablamos hace poco también de "Heli" y es que parece que esta temporada no nos está yendo nada mal.




¿Otros documentales sobre instituciones mentales que recuerden? 

9.10.13

Quisiera ver todo lo que ha hecho Shunji Iwai, todo, hasta sus películas cortas para televisión. Y también quisiera ver todo lo que ha hecho Tadanobu Asano, que lo amo profundamente. Voilà. "Fried Dragon Fish" estaba ahí para cumplir todos mis sueños.



"Fish has taught me many things. Different things"
Esta es una pieza bastante temprana tanto para el director como para el actor, y lo cierto es que se nota. Uno porque se ve increíblemente jovencito y otro porque parece sólo aspirar a un cierto divertimento extravagante para televisión. Un producto que puede resultar un poco extraño cuando se piensa en su filmografía más reciente, ya algo consagrado como un autor de culto en cierta medida.

La trama, siendo en realidad muy simple, resulta bastante rara desde el inicio. Una agencia de detectives privados contrata a la mala un cierto programa que viene con una 'asesora' incluida. Una extravagante chica que se involucra un poco hasta en los casos de la agencia. Una serie de robos de peces tropicales pronto se van relacionando con algunos otros crímenes más graves. No hay muchas pistas pero Poo, la enérgica asistente, no tarda demasiado tiempo en dar con Natsuro, un solitario joven que vive rodeado de peces en espera de *algo más*. La relación que se establece entre ellos es algo atípica y la vida de Natsuro comienza a trazar un curioso paralelismo con la de aquellos peces que tanto le apasionan. Pero todavía falta la acción, claro está.

Viéndola por lo que es, un mediometraje (no llega a la hora de duración) que parece casi querer experimentar con una historia inusual, la verdad es que la película consigue atrapar, entretener y enternecer. Además que Asano demuestra que desde muy temprano tuvo esa maravillosa capacidad de hacer suyo a un personaje y una historia. Hay algo en él que parece perfectamente capaz de convertirse en pez en cualquier momento, al mismo tiempo que se mantiene con este sentimiento de que está 'fuera de su elemento' y tenemos que descubrir por qué. Incluso en contraposición con el hiperactivo personaje de Poo la relación parece funcionar bastante bien y la en apariencia complicada trama no se interpone con una historia que en realidad se trata sobre relaciones humanas. Cosa que a Iwai, todos sabemos, le encanta y maneja de maravilla, aunque aquí apenas si se dejen ver guiños de lo que parecía ya prometernos a futuro. 

Sin que tenga que ser necesariamente una joya, yo enfatizo la tierna y extraña relación entre los dos protagónicos y el brillo de Tadanobu (siempre). 
Oh, y también es cierto que me encantan los peces. No es que crea que eso tenga relación, claro.



¿Otras películas relacionadas con peces que les gusten?

7.10.13

Ya saben que usualmente no suelo reseñar cortometrajes, pero siempre hago una excepción cuando se trata de mis directores consentidos. Y Park Chan-Wook, con todo y nuestros altibajos, siempre va a ser mi consentido.



"She chose to run away"
"Judgment" es una de las primeras piezas del director, y la producción más temprana de las que he visto suyas. Con un estilo (y posiblemente un presupuesto) bastante simple y con limitados recursos, el director muestra su maestría para aprovechar historias cotidianas y transformarlas en cuidadosas disecciones de la naturaleza humana. En este caso aprovechando un hecho real sucedido en Seúl en la década de los 90.

En el no muy grato espacio de una morgue se encuentran una pareja, el encargado de la morgue, un periodista y un policía. Días atrás un desastroso accidente provocó que un centro comercial se derrumbara en pleno día, matando a muchas personas. La evidente negligencia detrás del suceso llevó a las compañías involucradas a pagar altas cantidades a los deudos de las víctimas. En lo que debería ser un proceso burocrático habitual para reconocer a una de las últimas víctimas, la situación se complica cuando el empleado de la morgue declara que la víctima no es la hija de quienes dicen ser sus padres, sino suya. Ante la imposibilidad de aclarar la confusión en el momento, los personajes se involucran en una serie de discusiones casi surreales que esconden las terribles ambiciones y problemas de comunicación en las relaciones humanas. 

En sus 20 minutos de duración la historia pasa por ser cómica, conmovedora, cruel. Con dejo de puesta en escena teatral, plantea una serie de reflexiones sobre los lazos humanos y el modo en que pueden manipularse muchas veces a conveniencia, o influenciados por otros intereses. Demostrando que no siempre se necesitan grandes corporaciones para lucrar con la tragedia humana y que los propios individuos muchas veces sólo están esperando para ver qué trozo del pastel les toca. 

Y lo mejor de todo es que pueden ver el corto completo aquí: "Judgment".



¿Último corto recomendable que hayan visto?

6.10.13

Después de ver "Om Shanti Om" me propuse buscar más películas de la guapísima Deepika Padukone. Y no lo hice. Pero más tarde que nunca llegué a "Love aaj kal" guiada únicamente por eso.



"¿Por casualidad no te habrás enamorado de mí?"
Dos historias de amor. Jai Vardhan Singh es un joven despreocupado que se encuentra con Veer Singh, un hombre mayor dueño de un restaurante donde el primero pasa mucho tiempo, en un momento decisivo de su vida. Ambos son indios pero viven en Londres, donde Jai conoce a la guapa Meera Pandit y comienzan una relación informal que termina cuando ambos deciden hacer su vida en otros lados (ella de vuelta en India, él aspirando a mudarse a Estados Unidos). Su historia de amor despreocupado sin compromisos no checa con la mentalidad romántica de Veer, quien trata de convencer a Jai de la importancia del amor contándole su propia historia, de cuando años atrás tuvo que vencer todos los obstáculos para poder estar con su amada Harleen. Entre esa historia ya escrita y otra por escribir, coincidirán una serie de momentos y sentimientos.

Con todo y mi profundo amor por Bollywood, todavía hay ciertos tópicos que no soy capaz de soportar en sus presentaciones más convencionales. Ya en otras ocasiones hemos hablado de esas recurrentes historias de amor-odio donde la pareja se resiste odiosamente a un amor que es más que evidente antes de volverse locos el uno por el otro (y quizá enfrentar algún drama). Aquí tratan de *modernizar* esa misma estructura añadiendo una *nueva mentalidad*, convenientemente ubicada fuera de la India. No cabe duda de que Jai y Meera son pareja, pero con esta idea de que son algo así como pareja informal es que se empeñan en mantener una fachada de 'no necesito este amor' que va generando todas las idas y venidas de la trama de un modo que no tarda demasiado en ser fastidioso. Porque ni siquiera hay un intento de hacer sutil la situación, algo así como un 'pensé que no me dolería dejarte ir pero ahora veo que te amo', sino que parece un juego de niños donde ambos se encaprichan por no demostrar sus sentimientos y por ello generan un problema tras otro. Da ganas de sentarlos frente a un terapeuta y enseñarles sobre comunicación y aceptación de los propios sentimientos. O darles un par de bofetadas y decirles: ¡¿Cómo no vas a estar enamorado de Deepika Padukone con lo guapa que está?!
Que eso sí, guapa y lo que sea, cuando hay menos bailes y más *actuación* queda bastante claro que no hay mucho más que una cara muy bonita. 

La segunda historia, la de Veer Singh, más de época y con la premisa de 'todos se oponen a este amor pero lucharé por él' es mucho más sobrellevable e incluso interesante pero como la vemos casi como telón de fondo y toda su razón de ser es convencer al protagonista de la otra historia, pues no tiene mucha oportunidad de salvar la situación. 
Aunque no llega a los patrones usuales de Bollywood de películas larguísimas (ésta apenas cumple con las dos horas exactas), los tópicos románticos no tardan en hacerse un poco molestos y alargar demasiado una historia que es pura ceguera de sus protagonistas. Oh, decepción.

Por suerte Padukone vuelve a la carga junto a Shahrukh Khan (que sí que es sinónimo de calidad) con "Chennai Express" que debe ya estrenarse por estos meses. A esa sí que le traigo ganas.




¿Alguna película sobre relaciones informales que les guste?

5.10.13

Continuando con algunos de los documentales proyectados en el Festival de Cine de Derechos Humanos, vamos con "Benghazi: El frente no armado", una perspectiva de la revolución libia por una corresponsal colombiana.



"Nunca hubiéramos pensado que uno de nosotros sería uno de los primeros mártires de esta revolución"
Dentro de los distintos alzamientos de la primavera árabe, el sucedido en Libia se caracterizó por la sostenida batalla entre el violento gobierno de Gadafi y la población en resistencia, quienes tardaron meses en poder derrocar al dictador. Natalia Orozco, reportera colombiana, fue enviada a dicho país en los inicios de sus movimientos de resistencia y estuvo presente durante parte importante de los movimientos. Llegó a conocer e involucrarse con figuras clave en la resistencia en Benghazi, una ciudad que demostró que establecer un frente pacífico es tan importante como combatir de frente a las agresiones del gobierno. El corto documental (no llega a la hora de duración) nos da un panorama rápido de los sucesos en dicho país y de los personajes que en ese rincón particular contribuyeron desde una posición distinta a comenzar a construir un futuro a largo plazo.

Aunque el seguimiento puntual de la revolución en sí es bastante general y no va a servir demasiado para que un desconocedor se enteré detalladamente de lo que sucedió en Libia, el principal interés es sin duda centrarse en los *revolucionarios* que se concentraron de manera temprana en el problema de que lo más difícil no es un derrocar un gobierno, sino construir uno nuevo después. Al mismo tiempo que los choques violentos con el ejército y la policía en las calles, en Benghazi una serie de personas comenzaron a trabajar en propuestas para renovar un país que tantos años llevaba férreamente controlado. Jóvenes entregados a convocar a las manifestaciones, los creadores del primer canal de noticias no oficial, organizadores de grupos para hablar de política entre los jóvenes, abogados dedicados a los casos de presos políticos. La mirada hacia un país que todavía está un poco en ruinas pero que ya sueña y trabaja en la construcción de sus nuevos caminos.

Por más que sea una perspectiva interesante y una introducción general al panorama libio, la película no termina de concretar ninguna de las que parecen sus propuestas iniciales y no despega del tono de reportaje televisivo. El no ahondar en las particularidades más específicas de la revolución (en contraste con las sucedidas en otros países de la zona) o en los sentimientos íntimos de la documentalista en particular, quien con voz en off nos dice en un primer momento que su interés por los sucesos se volvió personal en algún punto pero luego no termina por mostrar esa conexión, por convencernos de su papel (aunque sea de testigo) ahí. 
Es otro de esos ejemplos documentales en que el tema es interesante por sí mismo pero la realización es apenas correcta. Aunque siendo que está producido, entre otros, por Canal 11, eso podría explicar su aspecto televisivo.




¿Algún otro documental o película relativos a Libia?

4.10.13

Desde este pasado miércoles tiene lugar en el DF el Festival Internacional de Cine de Derechos Humanos, una oportunidad única de ver documentales y asomarnos a realidades que difícilmente llegarían por otros medios a las pantallas del país. Así que hay que aprovecharlos. Y ya saben que yo, si puedo irme por Asia, pues qué mejor. Empezamos con Camboya, que además será la primera película que tocamos de ese país. 



"Sino podían llevarse bien, como marido y mujer, entonces las matábamos"
No es demasiado el contexto que se nos da de la situación pero es suficiente como para darnos una idea del panorama más general. Durante los años 70, durante la dictadura de Pol Pot, se inició una campaña para aumentar la población de Camboya con una meta increíblemente alta. Como parte de las acciones que se tomaron al respecto, cientos de miles de mujeres jóvenes fueron obligadas a casarse con soldados del régimen. Sochan Pen tenía 16 años. Tras huir, sobrevivir a una dictadura, volverse a casar, tener seis hijos, esperar 30 años, apenas puede comenzar a abrirse sobre lo que sucedió, lo que tuvo que vivir durante el corto tiempo pero brutal tiempo que vivió con ese primer marido. Es entonces cuando decide que hay que hacer algo, cualquier cosa, para tratar de hacer más tolerables a los fantasmas que lleva encima.

El recorrido de Sochan está destinado a ser breve, a ser cotidiano. El tribunal al que dirige su queja no es del todo confiable. La situación en Camboya no ha cambiado demasiado tras tantas décadas y muchas de las personas a las que señala viven en su misma comunidad, como si nada. Ella lo que quiere es entender, y alterna los preparativos de la boda de su hija con su particular investigación, acudiendo a aquellos que sabe estuvieron involucrados en los sucesos y preguntándoles (con una increíble tranquilidad y educación) por qué lo hicieron. Una parte de ella quiere justicia y quiere creer que alguien va a pagar pero quizá en el fondo sabe que las cosas no son tan fáciles, y quizá esa parte se contenta de algún modo con poder mirar a esas personas a la cara y hacerles las preguntas más inocentes y más terribles: ¿por qué lo hacían? 

La historia de Sochan no es solo una representación de la realidad de cientos de mujeres de su país, sino un testimonio más entre tantas mujeres que han vivido y viven las acciones y consecuencias de la violencia de género en todo el mundo. Su caso, al no detenerse en los detalles crueles, al representar una vida cotidiana que sigue ajena al pasado, cobra fuerza al mostrar cómo incluso habiendo 'salido adelante' de un episodio tan atroz no puede sólo dejarlo atrás, queda marcada para siempre por algo que sucedió tantos años 30. Ni siquiera puede hablar con su familia de eso. Y también, a su limitado y sencillo modo, no se detiene a aceptar lo que sucedió, y atraviesa su propio proceso para encararlo a pesar de sus pocas opciones. 
Tal vez por ser apenas un retrato breve (el documental no llega a la hora de duración), por conmocionarnos sin necesidad de demasiadas imágenes crueles o grandes victorias, es que la película termina por ser entrañable y esperanzadora. Adjetivos inusuales si pensamos en el oscuro periodo histórico que atravesó el país durante el régimen de Pol Pot.

Seguiremos hablando de algunas otras piezas de este festival en los próximos días.




¿Alguna otra película sobre Camboya que recuerden? 

3.10.13

Y bueno, ya habíamos hablado antes de "Hasta el viento tiene miedo" y "Más negro que la noche", de modo que no podíamos terminar este mini-maratón sino es coronando su célebre trilogía de terror con "El libro de piedra".



"En algún momento quizá debamos aceptar que Silvia ha aprendido mucho de ese libro"
Eugenio y su nueva esposa, Mariana, se mudan junto con la hija del primero a vivir en una enorme casa alejada de la ciudad. Silvia, la hija, parece encontrar un único consuelo en jugar con un amigo imaginario llamado Hugo, que parece ser la única *persona* con la que se lleva bien. Como si los niños con amigos imaginarios siniestros en enormes casas no fueran suficientemente tétricos por sí mismos, a eso se le agrega que Hugo tiene una manifestación física, que es una estatua que se encuentra en los alrededores de la casona. Una estatua lo suficientemente siniestra. El padre decide contratar a una institutriz, Julia, para que se encargue de la educación de Silvia y con un poco de suerte consiga sacarla de sus oscuras fantasías que ya comienzan a inquietar a las demás personas de la casa. 

"El libro de piedra" tiene tanto de terror clásico como de elementos característicos del director, quien siente mostrará en otras ocasiones su inclinación por los niños perturbados entre la realidad y la fantasía, y las tempranas inclinaciones por la magia oscura. Una vez más, la película gana gran parte de su fuerza justo en el punto en que no nos queda claro si lo que sucede es propio de una entidad paranormal o de la mente hiperactiva de una niña sola, desatendida, capaz de contagiar sus fantasías hasta incomodar a las demás personas. El 'racional mundo adulto' pronto se ve irrumpido por la posible presencia de un niño extra, una sombra que carga un libro y comienza a moverse libremente por la enorme casa. 

Yo le tengo un especial cariño a "Veneno para las hadas", creo que mi película favorita del director, pero no toma demasiado tiempo darse cuenta de que la calidad promedio de sus producciones es fantástica, y que todavía es capaz de inquietar a décadas de sus estrenos (con todo y el look setentero de por medio). "El libro de piedra" no es sólo una se sus obras cumbre sino todo un clásico de culto del cine mexicano. Heredera de una tradición de terror con aires europeos pero perfectamente adaptada a su momento y sus condiciones. Y demostrando una vez más que habitar enormes casas alejadas de la civilización, en cualquier país, no puede ser una buena idea. 




¿Película de Carlos Enrique Taboada favorita?

2.10.13

Si me hubieran preguntado yo habría jurado que Taboada se dedicó de manera exclusiva al cine de terror, pero no. Como muchos directores del momento era un hombre multifacético y me encontré de pronto con esta particular visión de la Guerra Cristera, un episodio histórico que no ha sido lo suficientemente explorado por el cine nacional.



"Todo lo que se hizo fue tan deplorable que es mejor que la historia de estos sucesos se escriba dentro de 50 años cuando no exista ninguno de nosotros"
Y, profecía autocumplida, "La guerra santa" se estrenó justamente 50 años después del fin de la Guerra Cristera. Alejándose además de la versión más usual de cómo el malísimo gobierno se dedicó a perseguir a los buenos-buenísimos católicos que tuvieron que defenderse como pudieron.
La película parte de uno de los casos menores. Una pequeña población rural que de pronto se encuentra atrapada por las amenazas de su párroco cuando se niega a dar misa o abrir la iglesia en resistencia dentro de la lucha de poder que tenía lugar entre el gobierno y la iglesia católica. Los campesinos se encuentran atrapados ante las amenazas de los terribles pecados que caerían sobre ellos sino salían a defender a su Señor JesuCristo. No demasiado convencidos vamos siguiendo a algunos de estos soldados por la interminable y laberíntica lucha que los llevó a recorrer el país sin saber bien por qué. Involucrándose en una absurda lucha armada en los que participaban básicamente como carne de cañón para los intereses oficiales de cada bando.

Voy a asumir que, pese a la recuperación del tema en los últimos años (se estrenaron las películas "Cristiada" y "Los últimos cristeros"), no hay muchas películas sobre el suceso, especialmente por aquellos años. Taboada se arriesga al presentar una visión, quizá un poco tendenciosa pero bastante sincera, mucho más compleja que la simple lucha entre dos instituciones. Sin complicarse con demasiados detalles históricos más que los necesarios para la trama, sin dedicarse a señalar quiénes son los buenos, quiénes los malos, la película se centra en los diversos rostros anónimos que atravesaron esos años sufriendo directamente las consecuencias de una guerra que en muchos casos no entendían. 

La historia concreta puede perder un poco de fuerza en razón de la larga duración temporal de los hechos, pero si bien eso no nos permite ahondar demasiado en la psicología concreta de los personajes, gana mucho en la concreción de un panorama general de esos años y la implicación más inmediata de la Cristiada en la vida de un gran número de personas.
Como pueden notar, la filmografía de Taboada está llena de maravillosas sorpresas.




¿Película sobre algún periodo histórico no muy conocido que les guste particularmente?

1.10.13

Ya nos toca otro mini maratón y de nuevo con un director mexicano. Además uno del que da gusto hablar especialmente, como es Carlos Enrique Taboada, uno de los pocos directores especializados de buena manera en el cine de terror en México. No es cualquier cosa. Como ya hemos hablado de un par de piezas de su más conocida trilogía, ahora daremos inicio con algunas películas no tan famosas de él, pero no menos interesantes.



"Me dan miedo las gentes que tienen hambre"
No es que vaya a quejarme del terror fantástico-paranormal, ni mucho menos, pero viendo la filmografía de Taboada, me inquieta mucho más la imaginación febril de la pequeña protagonista de "Veneno para las hadas" que los posibles fantasmas en "Hasta el viento tiene miedo" y "Más negro que la noche". Taboada tenía esa capacidad para inquietarnos con aquello que no sabíamos siquiera si estaba ahí, y un poco por ese lado se va con "Vagabundo en la lluvia" (una pieza injustamente muy poco conocida).

Un par de nazis inauguran la primera escena. ¿Nazis en México? ¿En una película de terror? Pronto el ambiente festivo sesentero-setentero, ese sí muy propio del director, da cuenta de la situación real: una fiesta de disfraces de la clase alta llena de toda clase de extravagancias propias de la década. Ángela se dispone a irse temprano de la fiesta pese a las insistencias de sus amigos. Quiere viajar esa misma noche a Cuernavaca para arreglar la casa que tienen ahí para recibir a su marido al día siguiente. Es una noche lluviosa y al llegar a la casa se encuentra con que ya alguien en ella, un vagabundo que decidió irrumpir en el caserón desocupado para pasar la noche. El hombre se va pero se añade una inesperada visita, Mónica, una mujer que también estaba en la fiesta y borracha se quedó dormida en el coche de Ángela. Ambas mujeres pasarán la noche en aquella apartada casa, azotada por la lluvia, con sus secretos y el temor de que haya unos ojos mirándolas a través de cada cristal.

Con una trama poblada de culpas y paranoias, es de esos ejemplos de películas de terror en los que ni siquiera necesitas un enemigo real para resultar efectivos. El vagabundo real cobra toda su dimensión gracias al vagabundo en la mente de las mujeres, a todos esos momentos en que están seguras de que ven a alguien que luego ya no está ahí, que desaparece un objeto que segundos antes tenían al alcance. Ornamentado por el factor psicológico femenino que se desarrolla a través de los diálogos entre las mujeres, en apariencia totalmente distintas, la película mantiene un ritmo y un encanto que el tiempo no ha conseguido borrar. 
Quizá por los límites de tiempo y espacio no llega a caer en esos excesos retro que por momentos pueden desviar nuestra atención en las películas de Taboada (a mí es que en algunas ocasiones me costaba mantener la tensión viendo a sus personajes vestidos tan groovymente).

Aunque hacia el final cae hacia los subgéneros más fáciles del terror no por eso pierde su principal encanto, e incluso ese extraño final parece más que apropiado después de la noche de tormenta y terror que presenciamos. 
Yo ya sabía que Taboada tendría más emociones para mí, sobre todo faltándome una de las piezas de su trilogía, pero "Vagabundo en la lluvia" debe ser de las sorpresas más gratas que el cine de terror mexicano me ha dado. En parte, sin duda, por lo poco conocida que es, por su sencilla realización y por lo bien lograda que está. 
¿Qué ha sido de esas maravillosas épocas para el cine de terror en México?




¿Otras películas sobre personajes atemorizados por una entidad que quizá no está ahí?