30.4.10



30/04/10
Sí, esta imagen grita: "Soy John Carpenter y tengo todo el estilo del mundo".
Usualmente no suelo ver muchos documentales del tipo educativo-informativo, y es en casos como éste en que me doy cuenta de mi gran error. Porque lo mismo pueden ser del tipo "cómo educar bien a tus hijos" que "cómo nace el género slasher y sus principales representantes". Es una suerte que si bien el curso de cine de terror no nos pone demasiadas películas en forma, sí tuvo su buen porcentaje de documentales al caso.



"Lo que más me gusta es ir al cine y ver cómo le arrancan la cabeza a alguien"

El subgénero del terror sangriento sin duda es todo un movimiento, y eso es uno de los puntos en los que más énfasis hace esta cinta: los fanáticos del género son bastante distintos a los fanáticos de cualquier otro género cinematográfico. La subcultura de los amantes del terror es un panorama de lo más único e interesante, y es obvio que las películas que los inspiran no pueden serlo menos.

La idea del documental es seguir detalladamente el género slasher en las producciones norteamericanas (con una muy breve introducción sobre las cintas italianas que las inspiraron), especialmente entre los 70 y 80. El género slasher, como probablemente sabrán, consiste básicamente en que haya algún loco por la cinta cuya única finalidad parece ser la de destripar a todos los jóvenes que se aparecen en su camino. Y varios nombres se nos vienen a la mente cuando pensamos en esto, entre los principales se destaca, claro está, el trío fantástico de John Carpenter, Wes Craven y Sean S. Cunningham. Quienes, además, participan activamente en el documental haciendo comentarios tanto del género en general, del panorama de sus primeras producciones y otras tantas, y experiencias propias durante las películas o la producción de las mismas. Y no sólo ellos, sino varios actores icónicos del cine de terror, artistas del maquillaje, productores, directores más actuales y un largo etcétera. Lo que hace del documental una narración bastante dinámica, con oportunos e interesantes ejemplos visuales, incluso con bastante edición de otras entrevistas o detrás de cámaras que nos da un panorama bastante completo de lo que representó el género. Claro, con la limitación antes comentaba de la producción estadounidenses y que obviamente comenta muy poco de las películas posteriores a "Scream". Aunque aparece Rob Zombie, quien también nos habla un poco de esta nueva generación de directores del género.

Y, no lo sé, probablemente porque a mí me encantan las películas de este tipo, y es que hay algo muy genuino y sincero en ver a todos estos profesionales del campo hablando directamente de las cosas. Con comentarios del tipo "yo sólo tenía que idear distintos modos en que pudieran torturar a alguien en primer plano y que se viera realista" o "cuando publicamos el primer anuncio de 'Viernes 13' ni siquiera esperábamos que llegara a ser una película". Con un tono desenfadado, conscientes de que su arte no es considerado como tal, pero aún así amándolo de cierta manera. Y es que uno no puede evitar amar a Carpenter o a Craven cuando nos hablan directamente de sus películas y saber lo que representan incluso actualmente.

Magníficamente armado y de lo más interesante, además me deja con una larga lista de películas que aún me falta ver y de varias más que tengo que volver a ver, porque muchas de ellas formaron parte de mi infancia y conservo más el sentimiento que el recuerdo exacto. Y nunca está de más ver una película sólo para presenciar cómo a alguien le arrancan la cabeza, ¿verdad?



¿Slasher favorito?




29.4.10



29/04/10
Continuando con el terror cinematográficamente primigenio, en la clase nos pusieron este cortometraje que fue la primera adaptación al cine de la famosa novela (y el aún más famoso personaje) de Mary Shelley.



"Instead of a perfect human being, the evil in Frankenstein's mind creates a monster"

La verdad es que tiene ya su mérito pensar que en 1910 alguien se propuso adaptar una de las más icónicas novelas de monstruos. Sobre todo con la tecnología que tenían en la época y el modo en que tenían que arreglárselas para que la historia tuviera sentido.
Aunque en ese aspecto, "Frankenstein" representa una gran ventaja por sobre otras historias de terror o en general. El hecho de que sea tan conocida y que un gran número de personas sepan de qué va aunque no la hayan leído, sin duda que facilita la labor de adaptarla. En este caso el poco texto al que se recurre es meramente narrativo para que vayamos siguiendo el modo en que se resumió la historia. Claro que con 13 minutos lo que más se alcanza a hacer es centrarse en las escenas clave y darles todo el peso dramático posible. En este caso es la creación del monstruo y la última escena en que la criatura se encuentra con su creador poco antes de la noche de bodas de éste. Con un sumo cuidado en recrear esos dos momentos, lo cierto es que la película logra una impresión bastante positiva.

Fue producida por la compañía de Edison y estuvo perdida durante muchos años, lo cual hace que la calidad de video con que se recupera no sea la más apropiada aunque sirve para que uno logre ver lo necesario y tenga además la sensación de que, efectivamente, está viendo una película muy vieja. Se aprovechan al máximo todos los recursos de la época, y aunque la habitación de estudiante-alquimista de Frankenstein es un poco curiosa (tenemos siempre en primer plano un amigable esqueleto, para que nos hagamos a la idea del tipo de experimentos que tenían lugar ahí), la secuencia en que el monstruo va cobrando forma es bastante impresionante y bien cuidada para la época. Aunque finalmente el monstruo termine por ser una especie de duende-deforme-demoniaco (algo alejado de la posterior figura hecha a base de retazos y clavos), sin duda consigue el toque que se perseguía.

Lo que me parece curioso y que probablemente necesitaría una investigación más minuciosa, es si a partir de este momento es que la historia de Frankenstein comienza a mutar hacia una retórica menos siniestra. En este caso, además de que obviamente al resumir la historia en pocos minutos se saltan un gran número de episodios, se cambia el final por uno mucho más benigno. Y es algo que sucederá a lo largo de la tradición fílmica de este monstruo, que irá mutando (al igual que sus otros compañeros monstruos, claro) hasta convertirse en algo alejado de lo que Shelley había planteado en su novela. Un final, de hecho, bastante benévolo no sólo para el científico sino para la propia criatura. No dudo que hubiese sido difícil continuar la narración hasta el final exacto de la novela pero sin duda que había la opción de mantenerse al menos en la línea funesta, opción que no fue elegida deliberadamente.
O quizá sólo querían aprovechar los espejos, un recurso que ahora nos debe parecer de lo más sencillo pero que en ese momento le daba una profundidad a la secuencia y las acciones que era bastante interesante.



Tengo un propósito muy a largo plazo que es ponerme a ver cuanta película de Frankenstein, hombres lobo y Drácula (concretamente, entre todos los vampiros) para ver sus cambios narrativos. Pero no sé si aguante demasiado ver la misma historia tantas veces, así que iremos lentamente.



¿Película favorita en que aparezca la criatura de Frankenstein?




27.4.10



27/04/10
Aunque no he reseñado nada de él, también estuve llevando, a la par, un curso de cine de terror. Aunque nos ponían menos películas, lo cierto. Pero sin duda que con todo lo que comentábamos era como llevarse tarea a la casa. Y para mí fue buscar "El golem", en su versión más conocida, y a ver qué tal con el cine de terror antiguo.



"Si podemos compeler los poderes de la oscuridad para revelar la palabra mágica, podremos traer el Golem a la vida"

Las leyendas del Golem siempre me han gustado mucho, supongo que por esa cierta noción de monstruo no monstruoso. Y hace algunos años leí la novela de Maeterlinck y supongo que lo lógico era saltar a la película, aunque hay varias versiones. El propio Wegener hizo unas cuantas más, además de que representa al propio Golem.
El punto de que sea una película de los 20 es un poco engañoso. Por un lado quiere decir que desde los inicios del cine ya han tenido un rato para experimentar al respecto y presentar una trama más elaborada que en los primeros filmes, pero a la vez quiere decir que todavía no existe la estructura narrativa como tal de modo que hay muchos detalles que aún no se han desarrollado. Por ello se procura hacer que la historia se entienda con un mínimo de texto (que es cierto que siempre es más sencillo actuar que poner largos fragmentos, pero sin duda podría haberse escrito un poco más) y tiene un dejo de teatralidad bastante claro. Comenzando por la ambientación, que está mucho más cerca de "Viaje a la luna" que de "El hombre que ríe", ya que se supone que se localiza casi todo en el gueto judío pero en realidad parece una escenografía de una fiesta medieval. En ese punto en que la ropa parecen disfraces y nadie se ve muy judío. Excepto los que tienen largas barbas y lucen místicos. El Golem mismo tiene muchas limitaciones estéticas, pero debo decir que para la época las sortea bastante bien.

Eso hace que la película sea interesante pero deviene con facilidad en la pérdida de interés momentánea del espectador. Como el hilo se ha simplificado y muchas veces tenemos que ver largas acciones que parecen no tener demasiado sentido y uno tiene que armarlas como cree más apropiado. Hasta que uno termina con la sensación de que para lo que ha sucedido, la película resulta muy larga. De modo que al final creo que el asunto queda más anecdótico que nada.

Y tiene su encanto, sin duda, pero en cuestión sobre todo de cine de terror creo que se necesita un poco más de desarrollo cinematográfico para comenzar a ser efectivo. Aunque tampoco dudo que la película haya funcionado perfectamente en su momento.
Wegener tiene también "El estudiante de Praga" que es otra película en mi lista de cine de terror desde sus inicios. Y es que el título me gana, aunque algo me advierte que podría no ser el momento adecuado para verla. Además leí hace poco una novela del guionista de la película y yo cedo fácilmente. También creo que buscaré otra versión del Golem más contemporánea, a ver qué tal.


26.4.10



26/04/10
Siguiendo con mi curso de historia del cine, y ahora con el periodo del cine de oro de hollywood, nos tocó ver "The roaring twenties" (que me parece fue traducida como "Los violentos años 20"). En realidad creo que nos tocaba ver otra pero el profesor es un experto en perder la película que toca. Pero tampoco es que nos quejemos.



"I always say, when you got a job to do, get somebody else to do it"

La verdad es que no soy muy fan de las películas de gangster pero siempre hay que darles una oportunidad. En este caso el asunto no comienza sencillamente con los tiros, sino con un grupo de tres hombres que coinciden en una trinchera en la primera guerra mundial. Con un estilo desenfadado, tomando en cuenta que están en medio de una guerra, se hacen amigos, y poco tiempo después tienen la suerte de regresar a su país cuando ya todo ha terminado.
Eddie Bartlett, el que parecía el más joven y positivo de los tres, comienza a ver cómo sus esperanzas de regreso se van deshaciendo frente a sus ojos: el negocio en donde trabajaba decidió no esperarlo más y no tiene ya trabajo qué ofrecerle, va a conocer a la joven a la que le escribía mientras estaba en el campo de batalla y descubre que es apenas una adolescente, y se les viene encima la gran depresión así que no hay trabajo ni un poco de dignidad por los soldados que regresaron.
Lo curioso es que Bartlett comienza siendo un hombre perfectamente íntegro que por una situación o dos se ve involucrado en un negocio no demasiado íntegro: la manufactura y venta ilegal de alcohol durante la prohibición. Y ni siquiera es que se corrompa de golpe ante el poder, pero eventualmente todos ceden. Y poco a poco vamos presenciando cómo se transforma en un mafioso en toda la norma, perdiendo por completo el piso. Durante este periodo y entre un negocio y otro vuelve a ponerse en contacto con los hombres que conoció en aquella trinchera: Lloyd Hart, un abogado tranquilo que ayuda apenas con los papeles de la organización aunque no está demasiado de acuerdo con lo que hacen, y George Hally quien también ha encontrado su forma de vida en la mafia y se regodea por completo en ello, no le importa a quién tiene que traicionar ni de qué obstáculos debe deshacerse para conseguir lo que quiere.

El caso de Eddie Bartlett y toda la película en general, es el típico de el ascenso y caída de una gran figura. También por aquello de que en las películas de la época el malo no podía ser sencillamente malo, sino un hombre arrastrado por sus circunstancias quien tiene posibilidad de reivindicarse en el último minuto. Pero digamos que aún con esa carga moral, Eddie lo hace bastante bien, y nos muestra a través de su vida varios factores del Estados Unidos de la época. Con un tono que no pretende ser violento y crudo, pero que resulta bastante entretenido y efectivo.

Se destacan, principalmente, las magníficas actuaciones de Humphrey Bogart, como un cínico mafioso sin escrúpulos, y Gladys George como la diva venida a menos cuyo buen corazón debe ser oculto con sus modos mundanos. Ambos son problemamente lo mejor de la película, aunque lo demás no está nada mal.
Hasta me dan un poco de ganas de ver más películas de gangster. Tampoco demasiadas.



¿Película favorita de Bogard?




25.4.10



25/04/10
Es domingo de cinema familiar y usualmente suele ser difícil encontrar una película que todos estemos dispuestos a ver y tendemos a optar por la seguridad de las cómicas. Seguro que mi madre y mi hermana hubieran terminado por aceptar "Clash of the titans", pero mejor no arriesgarse.
Además, todos saben que mi madre y yo adoramos secreta (y no tan secretamente) a Steve Carrell.



"He turned the gun sideways! That's a kill shot!"

Lo cierto es que a pesar de tener a Steve Carrell y a Tina Fey como protagónicos, que ya es mucho decir, la película no sonaba demasiado interesante. Desde antes me había debatido entre si ir o no a verla. Principalmente porque la temática sonaba muy restrictiva: una pareja que lleva varios años casada y cuando tratan de darle un giro a su relación terminan por meterse en problemas que vaya que le darán un gran giro a la relación. Temía que fuera el tipo de películas que si no estás pasando por una situación similar entonces sencillamente no puedes sentir empatía por los personajes. Pero debí saber que Steve Carrell y Tina Fey eran más que suficientes para convencer a cualquiera.

Ciertamente una película sencilla, una película cómica de esas casi familiares, y el duo está magnífico como pareja. Aunque muchas de las situaciones son simples y las hemos visto un millón de veces (cómo los padres llevan con tedio una familia, cómo se acostumbran a hacer mil veces las mismas cosas), el humor a veces sutil y a veces hiperbólico de la pareja sirve para cautivarnos y arrancarnos carcajadas a la mínima provocación. Luego, que el giro argumental sea entre previsible y exagerado, también tiene su toque: una noche tratan de cenar en un restaurante demasiado elegante y como no tienen reservación se hacen pasar por una pareja que no se presentó. Una pareja de ladrones. Creyendo que han sido atrapados únicamente por robarse una reservación, terminan por enredarse con unos policías corruptos que tratan de recuperar la información que la pareja original robó. Y aunque todo parece apuntar a que han cometido un error terrible al confundir a una pareja promedio con unos estafadores, toda la máquina sigue corriendo mientras ellos no dejan de meterse en más líos.

Puede sonar a una película de comedia-acción de tantas en que un error lleva a otro y luego es imposible zafarse. Y aunque el hecho esencial es que la pareja de comediantes es de lo mejor, también está el detalle de que, pese a todo el drama que ocurre en sus vidas, también tienen que lidiar con detalles de lo más cotidianos. Como cuando Claire (Tina Fey, claro) tiene que hacerse pasar por bailarina exótica, con nula experiencia, y además tiene que escoger un traje que disimule su cicatriz de la cesárea. Y un montón de detalles con los que uno puede sentirse identificado, o al menos imaginar en su vida diaria. Genera perfectamente la sensación de que son una pareja común y corriente que se ha involucrado en una trama peligrosa y que, además, cree que puede hacer planes cinematográficos para salir de ella.


Debo decir, a resumidas cuentas, que yo me reí muchísimo más de lo que esperaba y pasé, sin duda, un rato de lo más agradable. No es que vaya a ser una película que revolucione el género pero sí es de lo más efectiva para su finalidad. Y tiene muy buenos personajes secundarios entre los que se lucen Mark Wahlberg, William Fichtner, Mark Ruffalo, James Franco y Mila Kunis.
Y creo que era la mejor opción en el cine. Aunque tengo unas ganas morbosas de ver "La pontífice". Jo.



¿Película favorita de Tina Fey?

24.4.10



24/04/10
Revisando las películas de mi hermano que aún no he visto, comentábamos algo sobre "La revolución de las ratas" (que es un título curioso pero yo diría que efectivo). Nunca vi la original y tampoco la nueva versión, que es la que él tiene, pero nos pareció apropiada para esa noche.



"We're done with each other, Ben. Just go! Go away! We are not friends anymore"

Con ese título y supongo que con la idea en general, uno podría pensar que "Willard" es uno de los típicos churros que involucran o un animal gigante o animales en su tamaño regular pero por montones. En este caso una rata ligeramente más grande que las habituales (pero sin llegar a ser gigante, claro) y un abrumador número de ratas normales. Que, además, es un animal por el que resulta difícil sentir empatía. Ratas.
Pero no, o no exactamente. La película, más que ser un ataque arbitrario y violento de ratas, se centra en la vida de Willard, el protagónico, un joven reprimido que ha vivido a la sombra de su familia y cuyo mundo deprimente parece venirse cada vez más abajo. Su padre ha muerto varios años y la compañía familiar ha sido invadida por su déspota socio, su madre está enferma y encuentra placer únicamente en torturarlo psicológicamente haciéndolo sentir aún peor. Tiene un trabajo que odia y que se le permite realizar sólo por obligación (el socio de su padre tiene que cumplir un contrato donde se compromete a emplear a Willard mientras su madre continue viva) y no tiene ningún amigo. Ni uno solo. Claro que con todo el desequilibrio mental que trae encima no resulta extraño. Hasta que un día conoce a Sócrates, una pequeño ratón blanco (estoy deduciendo que es un ratón y no una rata por mis básicos conocimientos de anatomía de roedores). Se niega a deshacerse de él y comienza a cuidarlo como a su mascota, su único amigo. Willard mismo es una especie de hombre rata: callado, merodeador, lleno de ángulos. Y con Sócrates vienen muchas otras ratas que comenzarán a crear una relación afectiva con Willard, quien es uno más de ellas. Hasta que llega Ben, claro, la rata gigante que pone en duda el papel de Willard como control de la situación.

Lo bello de la película es que uno puede ver la situación desde dos perspectivas distintas. La primera, claro está, es que nuestro protagónico tiene una especie de poder sensible sobre las ratas que le permiten estructurar su vida en base a ellas, y todo lo que viene después. La otra es que, sencillamente, Willard es una personalidad perturbada con delirios esquizofrénicos en que justifica su mundo en base a la existencia de centenares de ratas que lo obedecen casi incondicionalmente. Y todo el derrumbe posterior no es sólo por las circunstancias, sino por la poca cordura que le va restando después de los episodios traumáticos. Y para esto Crispin Glover, quien representa al personaje principal y prácticamente al único en que se profundiza, es sencillamente genial para ello. Recibe el peso completo de la película y la desarrolla de una manera fantástica. Es un increíble actor, que comprobé también después con "Alicia en el país de las maravillas" (cuyo papel me pareció lo más destacado, la verdad).
Lo más curioso es que mientras lo veía, en su papel de oficinista reprimido, no podía dejar de pensar que él encarnaba perfectamente a Bartleby (ya se sabe, del cuento de Melville). Y, oh, curiosidades de la vida, al revisar su filmografía encuentro con que aparece en una adaptación cinematográfica del cuento encarnando ese papel. Parece que no fui la primera en encontrarle el gran parecido.

También leí que el papel había sido pensado anteriormente para Doug Hutchison, Joaquin Phoenix y Macaulay Culkin pero ninguno lo aceptó. Y es de agradecerse, porque Glover es sencillamente fantástico. Ahora tendré que buscar más películas de él. Y las originales de estas adorables ratas, claro.

Otro detalle bastante destacable es que el dvd tiene una gran cantidad de extras, y bastante interesantes. No sólo las escenas borradas (que desarrollan bastante la relación entre Willard y Cathryn) y el final alternativo, sino un documental sobre las ratas como mascotas y las personas que las crían, y un video musical con Glover cantando surrealmente la famosa canción de "Ben". Es una delicia (surrealista), tienen que verlo:
http://www.youtube.com/watch?v=YTKNahASSDI




¿Película favorita de Crispin Glover?


23.4.10



23/04/10
Junto con las lecturas sobre casos de asesinos seriales y similares, también me he puesto un poco sobre periodos históricos atroces y poco conocidos. Y mi hermano me remitió inmediatamente a lo sucedido en la Unidad 731 durante el asentamiento japonés en China en la segunda guerra mundial. Al final, la amable filmografía mencionaba este título y no tardé en conseguirlo.



"Una rata lista puede vencer a un gato"

El título en inglés con que se conoce la cinta (y supongo que por ahí irá su traducción al español) es "Men behind the sun", que incluso creo que es un buen cambio para el título chino que más bien sugiere "Un sol negro". Ambas en referencia al símbolo más característico de Japón y que aparece en su bandera: el sol.
La historia de la Unidad 731 es relativamente simple pero sus implicaciones son bastante importantes: una unidad independiente del ejército japonés, instalada en una fría región China, se dedicó a hacer experimentos con motivo de desarrollar nueva tecnología para la posible guerra biológica. Todo esto podría ser comprensible, pero lo que llegó a suceder dentro de las instalaciones de la unidad fue un abuso abrumador de poder y una experimentación sin restricciones e increíblemente cruel. Se jugó hasta niveles absurdos con la vida de los sujetos de experimentaciones: ciudadanos chinos de poblaciones cercanas y que nada tenían que ver con la guerra.

Tun Fei Mou probablemente tenía una intención noble al encarar un periodo histórico bastante oscuro para China, y especialmente por las primeras secuencias notamos una preocupación por informar la espectador: dónde se localizaban las instalaciones, cómo se distribuía, cómo se organizaban, etc. Con un inicio bastante documental luego se salta a la dramatización de posibles tramas que ocurrieran dentro, basándose en los datos que se tiene de los experimentos que se realizaban ahí. El problema es que una vez entrado en lo subjetivo la película pierde por completo el piso y tras haberse mostrado con cierta seriedad, el disfraz se cae y se convierte en una película de explotación.
Lo cual no es que necesariamente este mal, si te gustan las películas de explotación, pero el discurso en el que se basa no sirve para que el espectador pueda involucrarse desde la perspectiva no-involucrada de violencia arbitraria. Tratan de decirnos "vean cómo sufrimos" pero al mismo tiempo parece que el director se deleita un poco mostrándonos ese sufrimiento. Y nos pierde, por completo: no podemos convertirlo en divertimento pero tampoco podemos juzgarnos.

El punto es que muchos de los experimentos que aparecen en la película probablemente tuvieron lugar en dicho momento, por lo que he leído, y creo que hubieran funcionado bastante bien para impresionar al público. Pero el modo fácil y casi vulgar en que se victimizan mientras exageran los sucesos hace imposible que uno pueda involucrarse, dejando las acciones como violencia burda, mal dibujada y de muy mal gusto. Además que la realización, en un intento desesperado por ser realista, resulta aún de más mal gusto. No tengo que ponerle todos los ejemplos pero muchas secuencias de tortura fueron realmente realizadas, aunque con cadáveres y similares. O incluso hay una escena en que para representar la filosofía de grupo, de la frase que puse, se suelta a un gato entre un millar de ratas y se comen al gato. Realmente se comen al gato. Y no hay nada más que me indigne que gatos (o tortugas, ¿me escuchas "Holocausto caníbal"?) mueran absurdamente porque alguien pensó que se veía muy realista.
Y sí, fueron las víctimas, pero repetir hasta el cansancio las escenas violentas y repetir que los japoneses son unos malditos (que me queda más o menos claro que lo fueron) no hace que una película sea efectiva. Y, por el contrario, queda como que se aprovechó a traición un periodo histórico y lo dejaron muy mal parado.

Además parece ser que, posteriormente, otro director, inspirado por esta película, decidió hacer unas cuantas más por el tema. Y las críticas dicen que si ésta tenía cierto mínimo mérito histórico, las otras son llanamente provocación barata. La verdad me cuesta pensar que se pueda hacer una película, sobre este momento, que quede aún más mal parada que ésta. Pero en cine las sorpresas negativas nunca son tan sorpresivas.
También parece que T.F. Mou se adentró en otros periodos históricos oscuros chinos y algunas tienen mejores críticas, pero la verdad no creo que vaya a arriesgarme con él de nuevo, o al menos no pronto.



¿Películas que mal aprovechen un periodo histórico importante? (¿la de "Zapata" con el Potrillo?)






22.4.10



22/04/10
Ahora que había descubierto a los Marx, quería darles el mayor seguimiento posible. Que con lo dispersa que suelo ser cinematográficamente, eso ya es decir algo. Hubiera querido continuar con "Duck soup" pero tenía más a la mano "Animal crackers".



"One morning I shot an elephant in my pajamas. How he got in my pajamas, I don't know"

De alguna manera se puede decir que al ver una película de los hermanos Marx, ya podrá conocerse la línea a seguir en las demás. Cómicos de situación, siempre son ellos mismos deliberádamente disfrazándose de otros personajes. El encanto reside en que, claro, a través de un recurso tan sencillo y tan propio de los cómicos, pueden seguirnos cautivando en cada nueva ocasión.

"Animal crackers" fue traducida (o eso me dice google) como "El conflicto de los Marx". Terrible título, no es como si no estuvieran involucrados en toda clase de conflictos en cada película.
Groucho, un reconocido cazador e investigador de África ha sido invitado a una fiesta en casa de la señora Rittenhouse. Lo que debería ser una fastuosa fiesta se ve interrumpida por intrigas de otras burguesas que le tienen mala voluntad a la señora Rittenhouse y harán lo posible por arruinarle el momento. Por lo que deciden robar el cuadro que iba a ser presentado. Pero, obviamente, esa no será la única situación problemática. Del mismo modo tendremos a Zeppo como secretario de Groucho, y a Harpo y Chico como ladrones no muy efectivos, dando vueltas por la casa y complicando aún más las intrigas.

La trama me parece un poco más simple y dispersa que en "Horse feathers" pero la verdad es que resulta también de lo más entretenida. No es difícil que los Marx resuelven cualquier circunstancia convirtiéndola en algo genuinamente hilarante. Y sin duda que vale la pena volver a verlos sólo para dejarnos sorprender una vez más.

Un detalle que no deja de parecerme de lo más curioso es que el nombre que Groucho tiene en esta película, Capitán Spaulding, es también el mismo nombre que el personaje del payaso vulgar-siniestro de las películas de Rob Zombie: "La casa de los 1000 cuerpos" y "The devil's rejects". Podría ser una mera casualidad, podría que no, pero no deja de ser algo raro.

Por cierto, la frase que puse está considerada en el número 53 de las mejores frases del cine. O eso dice imdb, aunque supongo que habrá alguna delimitación a tan general afirmación. Con todo no deja de ser una gran frase. Nada que nos sorprenda de Groucho, ciertamente.


21.4.10



21/04/10
Desde hace algún tiempo he estado a la caza de falsos documentales de terror, porque suelen ser un género interesante y que suele buscarle al menos un toque original. En la medida de lo posible, claro. En mi clase de cine de terror hablábamos al respecto y el profesor mencionó ésta como posiblemente la primera película que explotó esa opción, el mismo año que "Alien abduction" y uno antes de que "El proyecto de la bruja de Blair" que lo haría tan famoso. Y yo tenía que conseguirla, además de que se trataba de el demonio de Jersey. Imposible perdérselo.



"Comencé este proyecto haciéndome las mismas preguntas que ustedes"

Cuando apenas inicia uno no sabe muy bien qué creer. Primero, el formato de falso documental es literal, es decir, no son sólo jóvenes con una cámara que están filmando todo por alguna razón específica, sino una voz en off que deliberadamente investiga un caso y lo arma como si fuera un documental para la televisión, tirando hacia reportaje. Luego, ¿dónde está el demonio de Jersey? ¿es una bella metáfora de la violencia humana? ¿hay casos del demonio de Jersey que no conozco? Todo a su tiempo. El caso es que la trama esencial gira en torno a Jim Sued, un joven muy extraño que ha sido acusado de asesinato. Pero si debemos seguir el tono de voz de nuestro narrador, hay algo irregular en esas acusaciones, aunque todo parece indicar, de manera bastante clara, que ciertamente podría haber sido él.
El escenario completo es que, tenemos una pequeña población en, Jersey supongo, y un par de jóvenes que trabajan en la televisora local con un programa de lo paranormal. Muy casero, sin duda, pero mientras parece que el programa se ha explotado al caso y buscan el modo de llegar a nuevos medios y espectadores, deciden hacer un programa sobre el demonio de Jersey. Yendo a buscarlo, directamente. Así contactan a Jim, un supuesto medium con poderes extrasensoriales y a un especialista en sonido y se meten los cuatro al bosque en espera de ¿qué? ser asesinados por el demonio de Jersey, yo lo veo muy claro. Y, tan tan, eso sucede pero Jim Sued sobrevive y todo parece apuntar sospechosamente hacia él.

La trama no parece tan emocionante como si el demonio fuera a saltar sobre nosotros de un momento a otro, pero al menos es psicológicamente interesante mientras tratamos de vislumbrar si el acusado es culpable y qué cosas hay irregulares sobre el caso. David Leigh, nuestro documentalista, trata de mostrarnos todo el escenario, todos los que estuvieron involucrados en él, los testigos que dan fe de los involucrados, las cuestiones de tiempo, las investigaciones, y un largo etc. Todos los detalles deben ser cubiertos.
Hay algunas de estas entrevistas que decaen un poco, porque dejan ese toque de documental sensacionalista norteamericano y es difícil de creer. Además de que algunas no se explica muy bien qué hacen ahí. Como un director que vive de sus viejas glorias televisivas, es exageradamente extravagante, y que supuestamente fue visitado por Steven y Locus (los del programa paranormal) para que grabaran su programa del demonio. Y supuestamente acepta y todo, pero jamás le explican a uno porque finalmente no se internó con ellos en el bosque (por sentido común, me inclino a pensar, pero aún así deberían decirlo).

Bueno, para no hacer la cosa más larga ni soltar detalles que quizá vayan a arruinarle la película a alguien, lo único que debo decir es que es una película regular, mínimamente entretenida, hasta su giro final. Lo peor es que conforme se acercaban a él comencé a sentirlo, casi con terror. Y no porque fuera terrorífico, sino porque es increíblemente malo. Ha entrado en mi salón de la infamia de giros finales. TERRIBLE. Y lo peor de todo es que es tan malo, tan innecesario y tan fuera de contexto que le arruinan a uno todo el mínimo buen sabor de boca que la película había dejado. Digo, no era una gran producción, no era ni siquiera un poco terrorífica, pero al menos no era terrible. Lo cual no puede decir sus últimos minutos. De hecho pienso en ellos y siento que sufro y me enojo de nuevo. Argh.

No se dejen engañar, omítanla de sus listas de falsos documentales por ver.


¿Es tan difícil hacer una buena película del demonio de Jersey? Recuerdo que también hay un capítulo de los "Expedientes secretos X" pero no recuerdo si es en donde al final todo es obra de una especie de hombres salvajes de los bosques. Oh.

Una pena.
¿Película favorita de criaturas - leyendas urbanas?

20.4.10



20/04/10
Debo aceptar que en aquel momento yo no había visto aún nada de los grandiosos hermanos Marx, aunque ya había leído algunos textos de Groucho que habían provocado una impresión bastante positiva. Pero como la comedia nunca ha sido mi género predilecto, creo que temía enfrentarme a ellos y descubrir que no eran tan graciosos. Pero en la clase de historia del cine el profesor nos puso la que, según él, es la mejor de sus películas.



"I don't know what they have to say, it makes no difference anyway. Whatever it is: I'm against it"

Pese a mi superficial renuencia, debo decir que se necesitaron pocos minutos para ganarme por completo. Cuando Groucho es nombrado nuevo rector de la universidad y canta "I'm against it" me convencí completamente de que me encantaría. Después de ver el humor silente y percibir el cambio con estos cómicos que no dejan de hablar (excepto Harpo, claro), la perspectiva es radical. No porque uno sea mejor que el otro, pero sin duda que la dinámica que representan las películas es muy distinta. Y los hermanos Marx aprovechan el lenguaje a su máxima expresión, de una manera sencillamente deliciosa. Aunque puede hacer que la visión de sus películas resulte un poco problemática: no sé cómo estaría en el doblaje, pero incluso subtitulándola (que fue como la vimos) se pierde mucho. No sólo porque hablan vertiginosamente rápido y es difícil transcribirlo todo, sino porque también muchísimos juegos de palabra se pierden en la traducción. Así que también resulta un reto personal tratar de seguirles el hilo de la conversación, especialmente a Groucho y a Chico.

Y, bueno, ¿la trama? Groucho es nombrado nuevo rector de la universidad en que estudia su hijo, Zeppo, y su idea para hacerla un mejor lugar es tener un mejor equipo de futbol americano. Como en realidad su equipo no es muy bueno decide comprar jugadores de manera ilegal pero también en eso le gana el equipo contrario, por lo que contratará a Chico y a Harpo para que secuestren a los jugadores o, en su defecto, jueguen ellos mismos. Todo ello aderezado con innumerables situaciones hilarantes, por supuesto.

Creo que cualquiera que haya visto a los hermanos Marx no necesitará que agregue que lo ganan a uno rápidamente. Realmente funcionan como un gran equipo aunque se manejen la mayor parte del tiempo con cierta individualidad, cada uno con sus estrategias cómicas particulares. Yo, particularmente, quedé prendada con Harpo, el hermano mudo, quien tiene mucho de la vieja escuela de cómicos silentes pero abusando al máximo de ella: ya que, si bien no habla, hace todo el ruido posible con diversos accesorios. Y, sobre todo, juega infinitamente con la fonética y todas sus repercusiones. Aunque puede parecer el de humor más bobo, me parece que consigue elaborar un personaje de lo más efectivo y complejo, aunque parezca medio paradójico.

Todavía me faltarán comentar y ver aún más películas de este grupo de hermanos, pero no dudo que "Horse feathers" sea una de las mejores. Además que tiene de las mejores canciones que les he visto hasta ahora e incluso les dejaré los links de youtube para que se les abra el apetito a quienes no la hayan visto. Ya comenté sobre la de "I'm against it" que es sencillamente genial: http://www.youtube.com/watch?v=e7cry-4pyy8 y está también la de "Everybody says I love you" que después tomaría Woody Allen para uno de sus famosos títulos: http://www.youtube.com/watch?v=f0QpDpAHfwk

Algunas de las anécdotas curiosas sobre la película es que dicen que mientras la filmaban, pasó por el set Shirley Temple, antes de que fuera famosa, y Harpo se ofreció a adoptarla pagando en efectivo por ella. Adorable. También está la escena en que la actriz Thelma Todd cae al agua y grita por ayuda en la que, realmente estaba gritando por ayuda mientras Groucho creía que improvisaba.



¿Película favorita de los hermanos Marx? o ¿hermano Marx favorito?










19.4.10



19/04/10
Es bueno ver de vez en cuando películas de Fellini, que es un director que me encanta demasiado y que tiene en sus películas un toque exacto y fantástico que no ha dejado de sorprenderme en ninguna de sus películas que he visto.
"Los inútiles" llevaba un tiempo esperándome en el estante y un día me pareció de lo más apropiado.



"Claro que entiendo, Roberto, que tu orgullo te está devorando por tu propio ser. Roberto ríe. ¿Qué es lo que puede destruir de nuevo el orgullo de un alma ya quemada?"

Al igual que otras películas del director, en el caso de "Los inútiles" el filme parece girar más en torno de un estado de ánimo colectivo que una trama específica. Los inútiles son cinco jóvenes, ya llegados a los 30, de una pequeña población costera, que parecen renuentes a adentrarse a la vida tal y como la sociedad la impone. Ociosos, románticos, vagos, sin oficio, algunos viviendo de sus padres pero también contra ellos. Como detenidos en la desesperanza, con sueños vagos imposibles de cumplirse. Cada uno con su propia historia, aunque por momentos pudieran confundirse entre ellos, siempre con las mismas ropas, con complexiones similares, y siempre tan juntos y tan solos.
Fausto es un mujeriego muy a la Mastroianni, pero aún más niño, más perdido. Sale con Sandra, la hermana de Moraldo, pero se entera que la ha dejado embarazada y quiere huir, aunque su padre lo evita y lo obliga a casarse. Incapaz de mantener un trabajo, de ser padre, de no engañar a su mujer, genera excusas todo el tiempo para ser siempre la víctima, el engañado, pretendiendo que todos caigan en su papel.
Moraldo, el más sin rumbo de todos, quien sólo parecía seguir a sus amigos por ir a alguna parte, se encuentra atrapado entre el deberse a su hermana o deberse a su mejor amigo. Tratará de hacer lo mejor para ambos pero la mayoría de las veces será imposible.
Alberto adora a su familia, especialmente a su madre, pero no hace nada por ella más que vivir del dinero que su hermana lleva al hogar. Siente que la deshonra cae sobre ellos puesto que su hermana se ve con un hombre casado, y es razón suficiente para que se abrace a su papel de hijo consolando a la madre pero también sin mover un dedo por el hogar.
Leopoldo es el estereotipo del artista frustrado, que vive de sus papeles y sueña con la grandeza justificando siempre el no alcanzarla debido a los demás, a la sociedad ignorante y que no lo entiende. Viviendo, básicamente, de su incomprensión. Y Ricardo, quien finalmente sólo vive para la fiesta y sigue a sus amigos a cualquier parte en que puedan pasar un buen rato desenfadado.

Todo podría apuntar a que esa rebeldía contra la estructura social establecida podría pintar al grupo como una continua fiesta, como la representación colorida de la irresponsabilidad. Pero no, la inutilidad es un síntoma, un reflejo de una generación joven que no encaja y que trata de justificarse desesperadamente. La incapacidad de vivir, y aún más, la incapacidad de crecer y hacerse responsable. De los demás, de uno mismo, del papel que uno debe desempeñar. Y los personajes se encontraran frustrado ante esta imposición, ante el conocimiento de que debe resolverse de un modo u otro mientras se niegan a hacerlo. Mientras que sólo uno de ellos será capaz de tomar alguna acción al respecto.


He leído críticas al respecto de esta faceta de Fellini en que parece sencillamente sumergirnos en un ambiente, en un momento, en un grupo de personajes; porque encuentran que vuelve sus películas aburridas. Yo tengo que decir que, por el otro lado, a mí me parecen fantásticas. Fellini, sin duda, es uno de los mejores directores para representar el desencanto hacia la vida. Y aunque ésta es una película del 53, podría decir que no deja de ser contemporánea, ya que aunque hayan cambiado los detalles sociales, la actitud de los inútiles es algo que sin duda podremos identificar como un problema social aún en nuestros días. Y la gama de personajes permite tener toda una visión al respecto, en vez de centrarse, como suele hacer, en el mujeriego.

Se dice también que es una película con cierto contenido autobiográfico, y yo creo que más o menos puedo imaginar qué personaje debe ser el que lo representa.
También podría decir que cualquiera que haya crecido en una ciudad pequeña de provincia podrá sentirse identificado con ese aire de asfixia que por momentos parece surgir de todas partes.



Otra gran película de Fellini, sin duda. Ese hombre cada vez me gusta más.

18.4.10



18/04/10
Continuando, muy lentamente también, con mi plan malvado de ver todas las películas de Takashi Miike, ésta resultaba casi obligatoria. Primero, porque me la regalaron en navidad en una edición muy bonita y yo ni la había tocado, y luego, ¡porque es un western! Y de Miike, no se necesita decir más.



"What can i say? I'm an anime otaku at heart"

Como una clara referencia a todas las modalidades gastronómicas de western (entiéndase: spaghetti western, chilli western), Miike lo hace suyo convirtiéndolo, claramente, en un sukiyaki western. Lo cual nos avisa de cierta manera sobre el espectáculo casi surreal que estamos a punto de presenciar.
Con una introducción un poco extraña en que Tarantino, vestido de vaquero para la ocasión, mezcla su acento americano con una leyenda oriental. Pero cuando uno se pregunta si todo tendrá lugar en ese escenario artificial, todo se corta y comienza la verdadera acción: un prototípico pequeño pueblo en medio de una zona polvosa (que aunque tenga constitución del típico pueblo en que paran los vaqueros en las películas, tiene claramente una arquitectura bastante japonesa) donde nos grupos de bandoleros llevan años enemistados. En el extremo del maniqueismo, los grupos son blancos y rojos y se visten únicamente del color que les corresponde (como puede notarse con el bando de la foto), en una mezcla de moda inspiración vaquera con elementos casi cyberpunk. La extraña mezcla de todo no podría ser más atractiva.
Y, luego, las subhistorias necesarias para que la cosa avance: una relación al estilo Romeo y Julieta con personajes de ambos bandos, una damisela en peligro (o algo así), un nuevo bandolero que se detiene en el pueblo y no tiene bando, una mujer que desea vengar a su familiar. Y, también, todas las licencias poéticas: muchas armas nada vaqueras, el terrible inglés que todos mastican aunque en algunos casos apenas si se entienda, los giros inesperados y esperados en un universo imposible. ¿Tengo algo más que decir?

Uno de los puntos que me parecen más importantes, entre tanta cosa que resaltar, es la figura de Bloody Benten, probablemente uno de los pocos casos en que una figura femenina lleva realmente los pantalones. Bueno, sí, también la chica de "Audition" tenía algo de eso, pero aquí no hay justificaciones psicopáticas de por medio. Bloody Benten es toda una mujer que lucha por el bien, o algo así, con sus pistolas y con todo el estilo del mundo. De los pocos casos en que veremos con Miike un personaje femenino tan poderoso en todos los sentidos. Y da gusto, la verdad.
Otro de los puntos interesantes es que a pesar de que pueda parecer un caos posmoderno de trama, lo cierto es que todo, dentro del absurdo, está perfectamente calculado. Por un lado todos los guerreros están nombrados en base a personajes históricos japoneses que participan de la leyenda que se narra al principio. Aunque con una suerte de libertad en cuestión de sus personalidades y su desarrollo. Por otro lado, la referencia a Django es un vínculo evidente hacia la película de Sergio Corbucci, un spaghetti western, y no será la única.

Sin duda, una más de las joyas de Miike. Podrá ser esencialmente un espectáculo del absurdo pero sin duda está perfectamente bien calculado y resultará de lo más entretenido y disfrutable. No sé con cuál de todos los detalles me quedaría pero sin duda que la necesidad, también absurda, de que todos los japoneses tengan que hacer en ese horrible inglés (horrible-adorable inglés) me ganó bastante. Pero, jo, hay tanto qué resaltar que no terminaría nunca.


¿Debería hacer como /ranka mi cuenta personal de cuántas películas de Miike me faltan? Ajam, podría ser, pero creo que sólo me sentiría decepcionada a medida que no avanzo demasiado. Jo.


16.4.10



16/04/10
De uno de esos días en que se tienen ganas de ver cualquier película de terror asiática aunque todo parezca apuntar que podría ser terrible. Pero no importa. Vino Alejandro y no trajo películas, ni recuerdo cuál querían ver (porque había un plan B) pero yo tenía a "4bia" (no el mejor título posible, debo aceptar) mirándome desde el estante desde muchos meses atrás y decidí que ese era su momento.



"Sí, yo también estoy solo. Desde hace unos cien días"

Ya he comentado antes que me encantan las películas que constan de varios cortometrajes, especialmente si son de terror. Y aunque el terror tailandés no es mi favorito, igual habría que darle una oportunidad.
Entre los directores está la dupla que dirigió "Alone" y "Shutter", de las más representativas películas del género nacional. Y en general son cuatro pequeñas historias de terror.

La primera, "Happiness", es de una joven que se rompió la pierna recientemente y está encerrada en su departamento sin nada que hacer más que mandar mensajes por celular. Se siente lo suficientemente sola como para responder los mensajes de un número desconocido que también parece demasiado solo. Debo decir que la idea es extremadamente sencilla y la realización apenas si tiene un par de efectos, pero a mí me pareció una historia fantástica. Un terror muy elemental, una historia sin complicaciones pero efectiva de cierto modo. Es de esas historias que son tan simples que funcionan. Además la noción de que nunca sabes quién está detrás de un mensaje de texto se aprovecha al máximo (aunque la respuesta concreta sea medio exagerada).

Seguimos con "Tit for that", una historia que nos hace pensar que esa idea del bullying escolar terriblemente violento es algo común en toda Asia. Un grupo de jóvenes "rebeldes" molestan continuamente a otro chico porque interfiere con sus cosas y los acusa con los directores. Pero de una forma muy violenta, de hecho en la primera escena lo arrojan desde un coche a alta velocidad. Pero, como todos ya saben, una de cada cuatro personas en Tailandia practica brujería, y no es para menos el chico molestado que obtendrá una venganza siniestra.
Habría sido una buena historia, creo yo, si no se hubiera abusado de los efectos digitales mediocres. En muchos momentos se pudieron hacer tomas sutiles pero no, querían que se viera el efectazo y arruinara el momento. Una pena porque al principio prometía tener una estética muy cuidada.

El tercero, "In the middle", en realidad está a un paso de no ser una historia de terror sino una parodia. Quizá por eso, si uno se lo toma por el lado cómico, resulta el mejor de todos. Un grupo de amigos van a acampar a un bosque y en la noche se fastidian entre ellos con las mil utópicas historias de terror en los bosques. Uno de ellos promete que si muere regresará para llevarse al que duerma en medio. Y, oh, al día siguiente desaparece en los rápidos y deja neuróticos a los otros. Lo interesante el corto es que todos parecen ser cinéfilos y hacen varias bromas referentes al cine que le dan al corto un toque único y lo convierten en una burla muy bien estructurada del cine de terror tailandés.

Y, finalmente, "Last fright", que trata sobre una azafata que le toca viajar sola en un vuelo con la princesa mala onda de algún país de Medio Oriente. Hay una tensión inaudita entre ambas pero también hay muchos secretos que están a medio decirse y que harán del vuelo una experiencia de lo más incómoda.
Es también una historia sencilla y bien realizada, incluso creo que sería muy buena sino fuera porque las acciones de la azafata la mayor parte del tiempo parecen demasiado absurdas. Digo, no puedo spoilear demasiado, pero hay momentos en que uno dice "por diox, aunque no hubiese la posibilidad de un fantasma o lo que sea, si yo fuera tú, jamás me hubiera subido a ese vuelo".

A excepción del segundo, los cortos están recreados en condiciones mínimas, con pocas escenas y con historias muy delimitadas. En realidad no son de terror en el aspecto de que pretendan darnos un susto específico, pero explotan los momentos en que uno se podría sentir vulnerable basándose en situaciones cotidianas. Son simples, ninguno va a dejarte sin dormir, pero la verdad resultan de lo más entretenidos y con una producción bastante correcta.


Y ahora, gracias a /argentoylunaazul sé que hay una segunda parte. Yeah. Que no puedo esperar a ver.

15.4.10



15/04/10
Y continuamos con el cine mexicano medio contemporáneo. Esta película la habían mostrado el año pasado en mi universidad y Raúl me comentó entonces, que le había encantado. Traté de buscarla poco después pero hasta hace algún tiempo llegó a mí. Siempre tuve curiosidad por ver la primera película de Amat Escalante, pero tendría que llegarle con la segunda.



"Deberíamos olvidarnos del pinche gringo ese y quedarnos con la lana. Tirar la escopeta, ni que fuéramos matones"

Por lo que he podido leer entre diversas críticas (buscando una frase, que no recordaba ninguna, y al final tuve que mirar el trailer en youtube, ajam), es del tipo de películas que amas indiscutiblemente o detestas con todo tu corazón. De las que ves y sientes que el cine mexicano es una joya emergente que el mundo debe descubrir pronto, o te dan ganas de ir a un rincón y llorar por todo ese dinero que se va en proyectos por el estilo.
Amat Escalante es 'artísticamente' apadrinado por Reygadas, supongo que eso dice lo suficiente.

Dejemos, entonces, las cartas sobre la mesa desde el inicio: la detesté. Podría haber sido incluso soportable, si fuera un cortometraje, si tuviera música metal mareadora, si, para variar, fuéramos inmigrantes violentos en cualquier otro país. Pero nada de eso se nos será otorgado.
La trama, ¿no la adivinan?, es de la difícil vida de los mexicano que viven ilegalmente en Estados Unidos. Aunque nuestros dos protagonistas son tipos duros, yeah, no se conforman con sembrar y hacer trabajitos, ellos aceptan también los trabajos sucios. Y, tienen una escopeta y una misión: matar a una mujer norteamericana.
Y, ya, tomen sus 90 minutos de película que sentirán como tres horas. Siguiendo la tradición de Reygadas (y de muchos otros directores que han aprovechado mejor el recurso, no me malinterpreten), tenemos larguísimas tomas de miles de minutos en que no pasa nada y nadie dice nada. En un par de escenas se nos va una vida y trata de hacer presencia un cierto discurso sobre la violencia y la vida vacía actual que jamás sabemos a dónde va. ¿Está mal que vayamos ilegalmente y matemos norteamericanos? ¿La violencia resuelve algo? ¿Hay algún karma detrás de todo lo sucedido? Probablemente nunca lo sepamos, aunque uno puede hacerse las hipótesis que quiera. E incluso, algunos, hasta disfrutarlos.

Entiendo e incluso llego a disfrutar el discurso de la violencia latinoamericana. Creo que, efectivamente, estamos inmersos en ella y no podemos sencillamente ignorarla. Pero de allá a basar una trama entera, resumida en una idea mínima y que descansa inestablemente sobre el gran concepto platónico de la violencia, me parece vacío. Y eso, principalmente, es el problema de la película: trata de ser realistamente chocante, pero al final no deja nada. Sí, tiene un par de escenas "fuertes", sobre todo contrastando con la cotidianidad de las demás escenas, pero no dice nada. Es un discurso hueco, revestido de tomas largamente artísticas, o actuaciones fundamentadas en el realismo de actores no profesionales. Pero todo es una cortina de humo, la película es aburrida, se siente inconmensurablemente larga, y, como dije, no deja nada.

Leí comentarios que la comparan, vagamente, con "Funny games". Sí, claro, si lo vemos como que dos hombres entran a una casa y agreden a las personas dentro, pues, de algún modo, pero de resto cualquier similitud es exagera. Principalmente porque cuando ves "Funny games" sientes que Haneke sabe lo que hace. Y lo hace bien. Escalante creo que se quedó en la búsqueda de lo que quería mostrar, y espero que al menos él tuviera una noción de lo que quería mostrar.


Debo decir que yo he aguantado películas que dan para ser muy aburridas, pero no creo sencillamente que el rumbo del cine nacional actual deba ser esa idea de ser "realistamente trasgresor", "largamente artístico" y creer que el público que no lo aprecia es porque no le gusta el cine. Creo que es una idea muy acartonada de lo que debe ser el buen cine.
Y, encima, que haya ganado tantos premios. No lo entiendo. Me parece, esencialmente, algo triste.


14/04/10
Yo nunca he estado a favor de las personas que desestiman a su producción cinematográfica nacional, pero creo que sí llega uno a cierto punto en que tiene que preguntar qué hace el cine nacional por uno encima de que se intenta incluso ver las películas en el cine y todo. Ajam.
Por otro lado tampoco tiene demasiado sentido que le hayan cambiado el título si ya tenía uno, sólo para distribuirla como "La profecía de los justos" (que sonaba más thriller hollywoodense, yo no sé) y, encima, que sea del 2007 y nosotros nos vengamos enterando apenas.
Aún no sé qué me dio valor para ir a verla.



"La fe es absurda. No importa si es verdad o si es mentira, sólo importa que hay gente dispuesta a creer en ello"

No sé ni por dónde comenzar, desde los primeros minutos te das cuenta de que vas a arrepentirte las próximas horas y lo que esperabas, en el mejor de los casos, que fuera un thriller mínimamente entretenido (mínimamente sobrellevable) probablemente no lo sea.
La trama apocalíptica ni siquiera estaba tan mal, si nos limitamos a lo estrictamente básico de ella: la Biblia dice (en alguna parte, y a saber qué tan sacado de contexto) que hay 36 justos que hacen que el mundo siga tal cual Dios lo dejo y no se vaya todo al diablo (como si necesitáramos más ayuda para arruinarlo). Y hay una asociación ultrasecreta de religiosos mala onda que quieren matar a esos 36 (que van reencarnando cada cierto tiempo y dando la vuelta por el mundo) para que una vez muertos todos (definitivamente) todo se vuelva caos y un nuevo orden se instaure. Y, claro, tiene que haber por ahí también otros agentes ultrasecretos no dispuestos a que esto suceda tan fácilmente.

Cuando nosotros abordamos el caso, después de escenas fragmentarias de gente muriendo en, no sé, Rusia, ya sólo nos queda uno. Un triste justo que de justo no sabemos qué tiene y que, encima, tiene problemas sentimentales. Teo es un arriesgado periodista que no puede tener una relación estable con su pareja que no desea que se arriesgue más. Por suerte la dicotomía le dura poco porque entonces llega un hombre de negro a tratar de matarlo antes de que otro hombre, ajam, creo que no de negro, lo salva vertiginosamente, pero su novia muere en el atentado. Oh, no. ¿Quién podría perseguir a Teo? Pronto se enterará de una terrible verdad que, literalmente, cambiará su vida por completo.

Espero que se haya notado el cinismo. Y no tengo nada contra los thrillers medio churros, pero es penoso que ni siquiera para eso seamos originales. Todos los personajes son caricaturas de otros, muy sacados de producciones norteamericanas similares, e incluso todos los diálogos y acciones parecen un gran collage de otras películas. Todo con ese aire agringado absurdamente (porque se trata desesperadamente de copiar algo y ni siquiera eso podemos hacer bien) y, peor aún, con cierta necesidad de meter algún elemento "muy mexicano" para salvar la situación. Sí, hay una asociación ultrasecreta que tiene su base en algún punto innombrable del Df y que parece sacado de la Matrix pero, oh, Teo soborna a algún burócrata para conseguir información porque eso es muy mexicano. También que la policía sea corrupta e incapaz de la más mínima acción. Y, creo que ya.

Uno de los principales problemas es que uno, como espectador, sabe casi todo desde el principio mientras que a Teo le toma una eternidad enterarse y, aún más, medio creérselo. Entonces uno ya está medio fastidiado, queriendo decirle que no importa si lo persigue la Interpol o una organización terrorista, que no se crea nada si no quiere, pero que un hecho comprobable es que lo están persiguiendo y lo quieren matar, que eso no necesita más lógica. Pero Teo sea hace el tío duro y tampoco da una.
Luego, las actuaciones son dolorosamente malas. Nadie parece sincero al hablar, he visto películas serie Z con mejor actuaciones. Parece que nadie quiere estar ahí, Ana Claudia Talancón de pronto daba la sensación de querer decir "si a mí ni me gusta esta película, no me pidan que actuen". Pedro Armedariz, claro, siempre muy correcto, parece que no soporta más y mejor se muere a los cinco minutos de diálogo. En el acto más racional de toda la película.

Terrible, los giros argumentales terribles, las seudo escenas de acción terribles. Y un muy largo etcétera. Pero yo creo que fuera de todo eso (digo, uno que se va acostumbrando a ver películas malas) es que es verdaderamente triste ver que no hay siquiera un intento de hacer algo original, algo bueno. Porque, esencialmente, lo que le falta al cine mexicano es visión. De lo que sea, aunque sea para hacer remakes a la mexicana, pero dejar de creer que tenemos un pequeño hollywood y darle un gran presupuesto a ideas cuanto menos originales mejor.

Y luego, detalles sin sentido, como que Teo se supone que es mexicano y lo enfatizan toda la película, pero habla claramente con acento español. México está a punto de entrar en una dimensión donde, no muy a menudo, suceden cosas normales.


13/04/10
En ese punto en que uno siente que debe detenerse y preguntarse qué más tiene el cine de terror que ofrecerle, es que resulta fantástico encontrarse con películas que le devuelvan la esperanza en el género. Y sin que se espere, además, ésta se encontraba entre el montón de películas que me pasó Andrés y que ahora creo que ni siquiera él sabía de qué iban. Yo lo único que tenía era un título, bastante sugestivo: "Eyes without a face". Y ganas de probar suerte, claro.



"The future, Madame, is something we should have started on a long time ago"

Como dato curioso, y en curiosa respuesta a mi constante queja de las terribles traducciones que suelen tener los títulos en español, hay que tomar en cuenta los abusos que sufrieron los títulos de películas de serie B por parte de los traductores norteamericanos. Esta película, por poner un ejemplo, no fue distribuida originalmente con el título que tiene ahora, sino como: "The Horror Chamber of Dr. Faustus".
Se merece un premio. Principalmente porque, oh, no hay nadie llamado Fausto en toda la película.

La película es sencillamente fantástica, debo decir eso. Y es, además, una gran prueba de lo que el terror puede ser sin la intensión explícita de resultar "terrorífico", que es lo que hacen todos hoy en día. Una trama simple pero siniestra: un respetable médico cirujano es llamado por la policía para identificar un cuerpo que posiblemente podría corresponder a su hija. La joven, días antes, sufrió un terrible accidente automovilístico y, una vez que recobró la conciencia, escapó del hospital. La identificación es problemática pues la joven tiene el rostro desfigurado pero el doctor está seguro de que es su hija.
O eso nos gustaría creer a todos. El médico tiene recientemente una obsesión por los transplantes, un tema en el que lleva trabajando largo tiempo. Y de manera no muy feliz pero sí bastante casual, se encuentra con su hija horriblemente desfigurada por un accidente. Christiane, la hija, no es la joven muerta, ¿pero quién podría demostrar lo contrario? Ella está encerrada en la enorme y alejada mansión del médico, mientras su padre y su secretaría tratan de encontrar a la joven adecuada para sus propósitos finales: darle un nuevo rostro a Christiane.

La estética en blanco y negro, la enorme mansión, los ruidos mínimos, una joven cuya máscara tan delicada casi podría confundirse con su rostro, la obsesión por un fin enfermo sin importar lo que tenga que hacerse; todo esto logra conformar un gran film cuya estructura se parece un poco más al thriller aunque prescindiendo de la tensión sorpresiva. El sentimiento general que la película nos transmite es angustia, una desesperación lenta, silente, un temor a la comunicación, a la noción de ser visto. La figura lánguida de Christine reina sutilmente sobre todo, contagiando todo con su doloroso silencio y resignación.
Y el diseño de esa máscara, e incluso las escenas en que no vemos ese rostro detrás pero lo intuimos. Una mujer que fue bella pero no más, y ahora se esconde detrás de una máscara de lo que fue.

Una película increíblemente buena, además con un cuidado magnífico para su época. Porque ya se sabe que a veces, en casos así, se abusa de efectos que no se tienen y luego nos arruinan por momentos, pero incluso secuencias como las operaciones faciales extremas del médico están hechas con un cuidado tal que resultan sugestivas pero aún así bastante impactantes.
Y, como ya dije, principalmente la figura de Christiane, es magnífica. Entre los datos curiosos se dice que John Carpenter alguna vez dijo que la idea de ponerle una máscara a Michael Myers vino de esta película (yo pensé que era por extensión de la obsesión de Ed Gein de forrar todo con piel humana pero, ajam).

Yo no sé por qué los médicos locos con fijaciones más específicas que sencillamente desmembrar no han sido mejor utilizados en películas de terror, sobre todo recientes (y quitando los prototípicos científicos locos que hacen monstruos a diestra y siniestra, quiero decir). Con lo bien que les queda, y con lo siniestra que puede llegar a ser la medicina si se lo propone. Jo.



¿Película de terror favorita relacionada con máscaras?