31.1.13


31/01/13
Y bueno, para medio cerrar con nuestra particular alfombra hacia los Oscares, pensé que, ya que estábamos en esto, sería bueno acercarnos también a una categoría injustamente no tan importante: la de película animada. Ya comentamos hace algún tiempo "Wreck-It Ralph", así que ahora continuamos con las que nos faltan.



"Because you want everyone to hurt just as much as you are"
Norman es un chico un poco extraño, no sólo por su fascinación por el cine de zombies y todas las cosas un poco siniestras (que hoy en día tampoco es que sean gustos particularmente extraños), sino porque puede ver y hablar con los muertos. Cosa que no es muy bien vista por su cerrada comunidad y lo hace más bien un paria en su escuela, donde sólo se lleva con Neil, de quien también se burlan por su sobrepeso. Todo eso no sería tan raro si al menos en su casa lo entendieran pero no, Norman lo tiene difícil. Y todavía más difícil cuando se le aparece un tío-vagabundo para decirle que la leyenda local sobre una bruja y su maldición es real, y que si él no detiene la maldición el espíritu de la bruja despertará en unos pocos días y todo se irá al diablo.

En un momento en que el cine parece reivindicar la figura del raro, "ParaNorman" hace su tanto con especial énfasis en mostrar un personaje que está en plena aceptación de su 'diferencia'. Si bien nos encontramos un poco con el recurrente discurso del bullying y de la justificación de cómo las comunidades pueden ser ignorantes y agredir a sus individuos poco comunes, lo que destaca por sobre todo en la película es su amor por los zombies. Una perspectiva que si bien también es limitada, porque no es que sea por entero 'una película animada de zombies', es sin duda una excelente incorporación a este sub-género que tanto ha crecido en los últimos años. 
Sin que parezca buscar una trama más trascendente y sin apartarse demasiado de las usuales estrategias de cine infantil, el principal mérito de la película es el cuidado con el que está realizada y que deja una verdadera sensación de haber sida con cariño. Tiene un excelente diseño de personajes, el stop-motion es sencillamente fantástico, y si uno le tiene cierto cariño al cine de zombies se encontrará con una manifestación curiosa y fresca del mismo. 

Al final está por caer un poco en el abuso de la moralina para la resolución del conflicto pero creo que consigue librarla en el último momento, aunque quizá sin lograr en esas escenas finales un momento tan fuerte como son otros más al inicio de la película. Yo había leído además este dato curioso de que uno de los personajes era el primer personaje abiertamente homosexual en una película animada infantil, y quizá me predispuse a creer que el hecho tendría mayor relevancia cuando es sólo eso, un dato curioso. 




¿Otras películas de animación sobre temas paranormales?

29.1.13


29/01/13
Bueno, no puedo decirles lo sorprendida que estoy de haber visto todas las películas nominadas a Mejor Película antes de la entrega de premios. O siquiera de verlas todas, hace por lo menos unos siete años en que no cumplía con todas las nominadas (que en aquel entonces eran muchas menos) y seguro jamás lo había conseguido antes de la esperada noche. Y bueno, terminamos con Tarantino.



"Gentlemen, you had my curiosity. But now you have my attention"
Probablemente muchos ya sepan que no soy precisamente fan de Tarantino. Que no soy nada fan de Tarantino. Con todo debo decir que irse hacia el western e incluir de nuevo a Christoph Waltz en su reparto era un buen indicativo, aunque seguro me hubiera hecho del rogar sino me hubiese propuesto ver toda la categoría en cuestión. El caso es que traté de ver "Django Unchained" tan libre de prejuicios como fuese posible.

La película es algo así como un spin-off del "Django" original, que es a su vez una suerte de remake de "Yojimbo", y del que ya hemos visto una reinterpretación surreal a cargo de Miike en "Sukiyaki western Django", donde, además, participaba el propio Tarantino. Pues nada, esta producción se aleja un poco de todo eso y se va hasta el Estados Unidos sureño antes de la Guerra Civil y la liberación de los esclavos y todas esas cosas de las que ya nos platicará "Lincoln". El Dr. King Schultz es un casa recompensas que está en busca de una nueva misión pero no puede completarla solo, necesita de alguien que conozca físicamente a los hombres que busca, y de tal modo llega hasta un pequeño grupo de esclavos donde se encuentra uno que proviene de la misma plantación, Django. A partir de ese momento sus destinos se unirán en la búsqueda de recompensas y del amor perdido de Django, Broomhilda.

Tarantino hace toda una declaración de intenciones desde el primer momento: El logo inicial de Columbia de lo más retro, una serie de tomas al más puro estilo western, y sangre explosiva al por mayor. Si casi todas las películas nominadas este año son larguísimas, aquí nos encontramos con tres horas más que bien contadas, que no dan tregua en ningún momento y que se pasan entre la emoción, la desesperación y la sangre a montones, básicamente. 

Creo que el hecho de enfocarse más en un grupo reducido de personajes principales (lo pienso en contraposición con "Bastardos sin gloria") ayuda bastante al resultado. Los protagonistas quedan inmensos y cumplen a la perfección con su papel, especialmente Waltz que cada vez me sorprende más con lo increíble actor que es y lo carismático que resulta casi en cualquier personaje. Sin duda para mí fue lo mejor de la película, aunque no se quedan atrás Jamie Foxx como Django (ahora me cuesta imaginarme a Will Smith en ese papel, siendo que fue escrito inicialmente para él) y Leonardo DiCaprio como Calvin Candie. Y eso que yo también suelo tener un problema con DiCaprio, me parece un actor muy sobrevalorado y que siempre tiene la misma cara de seriedad/preocupación. Y aquí, que por primera vez parece más relajado y antagónico, le sienta bastante bien. Y eso que dicen que el propio actor se horrorizaba un poco de lo racista y despiadado que era su personaje, pero parece que le favorece a DiCaprio ser un desgraciado. 

Sí que hay detallitos que si me pongo especial podría ir señalando, y también podríamos hacer el desglose esquizofrénico de todas sus referencias, parodias, guiños, datos curiosos, y etcétera, que suelen conformar el cóctel Tarantino, pero lo cierto es que la película no lo necesita. Creo que consigue un producto mucho más sólido que en sus últimas producciones, con un balance ideal entre sus referencias y su plusvalía, y donde todos los aspectos están más que bien cuidados. Y se consigue una película, principalmente, más que entretenida, muy divertida, y con unas dosis fantásticas de violencia y venganza. Las tres horas se van de lo más rápido y hasta te quedas queriendo más. 

Ojalá Christoph Waltz se lleve el Oscar a Mejor Actor Secundario. Está brutal, lo amo. 

¿Qué más les puedo decir? Que vayan a verla.
(Esto no significa que estemos haciendo las paces, Tarantino, tampoco te emociones)




¿Película favorita de Quentin Tarantino?

27.1.13


27/01/13
Yo me meto solita en estos líos, la verdad es que no tenía particulares intenciones de ver "Lincoln" pero era, claro, una de las que más aparecía en todas las categorías de los premios de la Academia. Y allá voy.



"No one is loved as much as you by the people. Don't waste that power"
"Lincoln" es algo así como la gran película épica que Spielberg llevaba ya un rato queriendo hacer, o eso me hace suponer "Munich" y "War horse". Para eso nada mejor que agenciarse a uno de los más grandes talentos de Hollywood y pasar más de una década investigando sobre la vida del personaje. Daniel Day-Lewis ES Lincoln, una vez más el actor nos sorprende al hacerse uno con su personaje y conseguir una actuación tan sorprendente como natural, siguiendo un momento bastante concreto de la historia estadounidense. 
Si bien el título puede sonar bastante general, para cuando iniciamos ya Lincoln es un hombre y presidente hecho y derecho, la cuestión que se encuentra sobre la mesa es que al Guerra Civil lleva demasiados años asolando al país y que podría darse un importante paso en la historia política concediéndole la libertad a todos los negros en el territorio. Cosa nada fácil. Y si uno podría creer que el asunto iría más por las batallas y la intriga, Spielberg lo que nos ofrece es una serie de estrategias políticas y retóricas para conseguir aprobar la abolición de la esclavitud contra una sala llena de políticos nada dispuestos a permitirla.

Nos encontramos con una primera escena quizá demasiado Spielberg. Tenemos un encuentro entre el presidente y una serie de militares luchando en la Guerra Civil cuyos diálogos nos remiten directamente a esas ansias de emotividad hollywoodense por la fuerza, a lo que se suma el hecho de que el discurso es patrio a más no poder. Y la verdad es que yo estaba pensando 'aquí vamos de nuevo' pero no, el director consigue contenerse y a partir de ese momento aprovechar la seriedad y la complejidad del mundillo político del momento para dar una perspectiva diferente de un momento histórico ya de por sí bastante complicado. 

Creo que una constante de las películas que he reseñado para esta categoría, una de las más importantes de la entrega, es el 'yo no soy demasiado fan de...'. Y es que es cierto, yo no suelo disfrutar particularmente de Hollywood, ni del nacionalismo estadounidense, ni de muchas cosas que al parecer son un éxito en taquilla. Aquí la contraposición es: Puedo no disfrutar especialmente de la historia en sí pero es indudable que disfruto de Daniel Day-Lewis, y una vez más para mí ese hombre consigue sacar adelante la trama que menos podría interesarme (como en "There will be blood", que ciertamente me interesaba muchísimo menos). No suele gustarme el estilo blockbuster con que suelen asumir estas biopics pero debo aceptar que Spielberg consiguió un tono bastante oportuno, y escogió la perspectiva ideal para alejarse de los convencionalismos del momento en cuestión, una trampa en la que podría haber caído más que fácil.

Diría entonces que mi principal problema es la duración. No sé si esto pasa todos los años pero pareciera que todos se esmeraron por hacer películas lo más largas posibles. Y mientras en algunos casos se justifica, eso dista de que el resultado audiovisual tenga un ritmo apropiado. Y para mí "Lincoln" tuvo demasiados momentos en que decaía el interés, en que se alargaba o se alentaba demasiado, y yo sé que el contexto era difícil de resumir y tampoco es que creo que hubieron demasiadas partes o sub-tramas que podrían haberse recortado, pero sí pienso que podría haber sido una película más dinámica. Porque tiene excelentes escenas, bastante ágiles a pesar de no tratarse de situaciones emocionantes en sí mismas, como casi todas las que tenían lugar dentro de la cámara de representantes. A eso se le suma que hay personajes que podrían haber dado mucho más de sí mismos y tienen un tiempo limitado en cámara. Tommy Lee Jones se mantiene en la línea de haber estado el tiempo perfecto y de quizá poder haber sido un poco más protagónico, pero sin duda la que más eché en falta fue a Sally Field como Mary Todd Lincoln. Tiene grandes escenas pero apenas un par, y creo que es una faceta del presidente que también podría haberse exprimido mucho más. 

Fui un poco cruel en su momento, porque lo cierto es que sí terminó por aburrirme demasiado en algunas partes, pero creo que es una película interesante y bien hecha, y quizá sea cierto que 'la Academia se la debe' y Spielberg coseché este año. No es en absoluto mi favorita pero está visto que a mí no me preguntan nada.

Ya casi termino con la categoría a Mejor Película, no lo puedo creer.




¿Película de Steven Spielberg favorita?

25.1.13


25/01/13
No tengo que decirles que continuo con esto sólo porque me prometí ver todo lo posible en esta categoría a los Oscares y ahora debo cumplirlo, ¿no?



"I had a dream my life would be so different from this hell I'm living"
Pese a lo que suelo decir en el caso de Bollywood, donde apoyo al 100% que la gente se pongo a bailar y todos a su alrededor colaboren activamente en la coreografía, en realidad no me gustan los musicales adaptados al cine. Los musicales estilo Broadway, quiero decir, de hecho tampoco soy especialmente fan de ellos en teatro pero los tolero mejor. De modo que la perspectiva de ver una nueva adaptación de "Los miserables" tampoco es que me entusiasmara demasiado. 

La trama me imagino que ya todos la conocen: un hombre obtiene libertad condicional tras pasar varios años en la cárcel por un crimen ridículo y sabe que su vida a partir de entonces será otro penar, viviendo como ex carcelario. Así que decide romper su libertad condicional y volverse un hombre de bien, pero el agente que lo vigilada en aquellos años no planea dejar que se libre tan fácilmente. Y, varios personajes fugaces más alrededor, todos siendo en mayor o menor medida miserables.

Mi problema con este tipo de musicales es que abusan de las canciones y le restan importancia al diálogo. Nadie habla, hasta para decir la cosa más sencilla tienen que entonarlo cual épica musical y a mí, la verdad, es que me desespera. Eso hace que los números musicales en sí estén bien, algunos, pero el resto del tiempo la situación llegue a ser exasperando y hasta un poco vergonzosa. A personajes como Javert y Valjean no los veo discutiendo nimiedades con tonadita musical cuando podrían hablar, como los respetables caballeros que son ambos.

Una vez pasado esto por alto, y a menos que seas un fanático de los musicales, de la obra en particular, o de los blockbusters épicos, la película no tiene mucho más que ofrecer que lo que un montón de presupuesto debería darte por default. Los únicos actores que me parecieron más que correctos en sus papeles son Hugh Jackman (por su transformación física, y lo mucho que me gusta) y Anne Hathaway (que tiene más mérito por salir tan brevemente y conseguir robarle cámara a todas las demás actrices). De resto no es que hayan estado mal pero tampoco me parece que nadie haya quedado especialmente bien en sus personajes, ninguno me terminó de convencer y sobre todo me parece un terrible problema en aquellos casos en que son personajes que podrían haber sido buenos. En general yo siempre he tenido un problema con Javert (en las adaptaciones que he visto) porque creo que es un personaje que se queda en el antagonismo obvio y hasta intransigente cuando debería ser un maravilloso retrato de la obsesión y la inflexibilidad legal. Creo que tendré que ver esa adaptación de Bille August en que no cantan y Javert es interpretado por Geoffrey Rush.

Y luego, claro, sucede lo que pasa cuando quieres resumir un señor libro en dos hora y media de película: toda la acción es bastante vertiginosa y la edición requiere una serie de elipsis no siempre muy favorecedoras. De modo que si visualmente es impresionante, porque tienen todo el dinero del mundo para vestuarios, coreografías, escenografías y fotografía, no es emotiva y en la mayor parte del metraje no consigue convencer demasiado. Sólo hay que comparar la secuencia en la que Hathaway canta sus dos minutos de canción, sola, sin casi nada de fondo, y que es lo más cerca que tiene de romperte el corazón, en comparación con las varias secuencias bélicas, con un montón de muertos, acción, romance, lágrimas, lluvia, y que uno no termina de tragarse por ninguna parte. 

Supongo que, además, es de esos textos que tengo que tragarme la novela porque está claro que el cine no me está ayudando en nada a entender al pobre Victor Hugo que seguro no estaría del todo contento con esta faceta de su fama. Además que siempre me ha hecho cuestionarme: ¿Qué piensan los franceses cuando ven esta clase de productos sobre su historia? Porque "Los miserables" ha sido adaptada en todos lados, y siento que mucho nacionalismo y lo que sea pero no veo a los países anglosajones genuinamente interesado por las revoluciones francesas. Ya ni entremos en detalle con que, obviamente, nadie de los que intervienen en la película es francés. Detalles.

Lo cierto es que espero que no se lleve demasiados premios pero luego temo que quizá sí. Pero ya lo he dicho, que yo no entiendo no sólo a Hollywood sino a la mayoría de la gente, creo.




¿Adaptación cinematográfica de un musical favorita?

24.1.13


24/01/13
En el episodio de hoy de "Hollywood, no te entiendo": Kathryn Bigelow, nos encontramos de nuevo.



"I want targets. Do your fucking jobs. Bring me people to kill"
Voy a concederle que el título de la película es un buen título. Lo cual tampoco es que sea mérito en sí de Bigelow sino del slang militar. En México la película fue traducida como "Cazando a Bin Laden" y no pueden culparme por jamás relacionar ambas producciones, aunque recuerdo que los terribles posters que la publicitaban decían algo como 'de la ganadora del "oscar"', pero ese inadecuado uso de las comillas me confundía lo suficiente como para no pensar que Bigelow estaba dirigiendo otra apología de la guerra en Irak.

Pueden suponer todos la trama: en Medio Oriente hay desplegados operativos de la CIA que en aquel entonce se dedicaban casi exclusivamente a rastrear a Osama Bin Laden. Entre ellos la agente Maya que llegó un día sin demasiada emoción y se quedó poder ver con sus propios ojos el cadáver del terrorista. Ahora, yo no sé exactamente por qué se cataloga como thriller una trama en la que ya sabemos el final y si bien tenemos que ir viendo cómo se resuelve, tampoco es que haya ninguna sorpresa en ello.

Una vez más, no puedo ser objetiva con esta clase de productos. La película abre con unas secuencias de tortura a supuestos informantes de Al Qaeda que son tan brutales como todos podemos imaginarnos y que no terminan hasta que los quiebran, previsiblemente. ¿Cuál es la finalidad de esto? No queda en absoluto claro. ¿Se justifican las acciones tomadas por la Agencia de Inteligencia estadounidenses porque finalmente *hay una guerra allá afuera*? ¿Se condena de manera velada el abuso de la fuerza bruta? ¿Se enaltecen de ser ellos quienes quiebren a los terroristas antes de que los terroristas los quiebren a ellos? Nada de eso parece quedar claro y no sé si el abuso de ese supuesto tono neutral en realidad cumple con esa mera función. Yo, claramente, no es que quiera defender a Al Qaeda ni nada por el estilo, pero las acciones de Estados Unidos tampoco me quedan muy claras vistas de manera histórica y me quedan todavía menos claras dentro de la trama de la película.
Y a partir de ahí todo cobra más o menos ese matiz. Maya está obsesionada por encontrar a Bin Laden y fuera de ser un excelente retrato de esa obsesión que el país ha demostrado por el mismo tema desde el trágico suceso de las Torres Gemelas, no creo entender mucho más a su personaje. Y lo que nos ofrece la película es básicamente una serie de estrategias 'de inteligencia' (que no siempre son particularmente inteligentes, todo sea dicho) que van teniendo lugar para irlo rastreando. Dejando de lado el cuestionamiento del evento en sí, si esta fuese una película meramente ficticia, diría que ese seguimiento es bastante plano y hasta un poco aburrido. Si a eso le sumamos que ya todos sabemos el desenlace, gran parte de sus dos horas y medias se me antojan excesivas e innecesarias. 

En el aspecto técnico voy a alabar lo que una buena producción te garantiza, claro está. Jessica Chastain es una buena elección para sostener casi toda la fuerza de la película y se compagina bien con sus secundarios aunque por desgracia estos no hayan jugado un mejor papel. La fotografía es muy buena y el cuidado en la ambientación es bastante evidente (aunque no es que yo pudiera diferenciar demasiado entre un país de Medio Oriente y otro, sobre todo si la mayor parte de las secuencias son en bases militares o casi en medio del desierto). 
Y, básicamente eso, a mí personalmente me parece una película indignante y que ya hasta abusa de ese sentimiento ultrapatrio estadounidense. Que además omite de manera no demasiado afortunada el aspecto más cuestionado de todo el circo mediático de la muerte de Bin Laden, que es: si había un cuerpo ¿por qué no lo hemos visto? Vamos, que si nos ponemos conspiranoicos, toda esta publicidad para enfatizar que el susodicho sí está bien muerto es hasta sospechosa. 
Y al parecer no sólo lo pienso yo sino que incluso la Academia no está del todo segura y ahora Bigelow consigue apenas la mitad de las nominaciones que con "The hurt locker" y tiene menos posibilidades de alzarse como ganadora en dichas categorías. 

Traté de hacer la reseña sonando lo menos indignada posible pero no sé si me salió del todo bien.




¿Otras películas sobre grupos terroristas?

23.1.13


23/01/13
Por el poster, el reparto y la trama, yo hubiera pensado que se trataba de una comedia romántica de más, de modo que fue una sorpresa no sólo verla colarse a los Oscares sino incluso alzarse como favorita en varias categorías. Creo que incluso ahora, después de verla, sigue siendo una sorpresa.



"You know, for a while, I thought you were the best thing that ever happened to me"
Pat acaba de salir tras pasar unos meses en una institución mental, aunque más por presión de su madre que porque esté del todo listo. Antes de entrar tuvo una conmoción que causó algo así como el fin de su matrimonio y que terminaran diagnosticándolo con un desorden bipolar. Rehacer su vida no tiene pinta de ser cosa fácil y en una de esas conoce a Tiffany, hermana de la esposa de un amigo suyo, quien también parece tener suficientes problemas por sí misma como para encima ponerse a acosar a Pat. Entre ambos tratarán de ordenar sus mundos tanto como sea posible. 

Pese a lo que el diagnóstico inicial de bipolaridad, el esfuerzo de Bradley Cooper por ser convincente en su papel, y la presencia de Robert De Niro como un excelente secundario, ésta en realidad sí que es algo así como una comedia romántica más. Está el asunto de los trastornos mentales, compartidos en mayor o menor medida por casi todos los personajes que aparecen en pantalla, pero esto, además de resultar estadísticamente improbable, se mantiene en un nivel superficial la mayor parte del tiempo. Excepto por lo que concierne a Cooper quien se muestra comprometido por ser un bipolar durante todo el metraje. Pero si pasamos eso por alto no difiere demasiado de otras comedias románticas donde los protagónicos son ligeramente atípicos, en especial en lo relativo a la contraparte femenina, y si bien el contexto del personaje de Jennifer Lawrence es un poco más complejo de lo usual, en lo que a presencia en la trama se refiere no siento que diste demasiado de personajes como Kat Stratford (Julia Stiles en "10 cosas que odio de ti") o la problemática chica de "My sassy girl". 

Es cierto que tiene mucho tiene que ver que el género no es de los que me interesan, y no dudo que con una visión más objetiva resulte una comedia romántica por encima del promedio (un promedio que no creo sea particularmente bueno, viendo las terribles producciones que se hacen al respecto) y sin duda cuenta tanto con personajes como actores que sacan adelante una trama ligeramente atípica. Es sólo que siento que detrás de eso, de esos pequeños detalles ligeramente distintos, no hay mucho más dónde buscarle. Incluso hay elementos que están bastante desaprovechados aunque en apariencia sean abordados, como la relación entre Pat y su padre (creo que ese De Niro es el único nominado que rescataría de la película). O la enfermedad en sí.
Ya he leído artículos al respecto pero esta película viene a reforzar esa idea de que a hollywood no le gustan las visiones verosímiles de la enfermedad. Porque incluso en los momentos más frustrantes de la película, y con lo que se insinúa de la explosión inicial del protagonista, la perspectiva de la bipolaridad es bastante leve. Al igual que los trastornos de Tiffany. Lo que prima es únicamente es lo de 'chica conoce chico' pero donde los obstáculos son 'ellos mismos'. Y todo lo demás es la típica estructura hollywoodense.
Y lo digo porque me parece que es la única razón por la que una producción de este tipo llegaría hasta donde está (además de poseer actores de moda *probándose a sí mismos*), porque da esa ilusión de que maneja un tema profundo que en realidad es casi una estrategia retórica. Lo pienso en contraposición a una película que pasó totalmente ignorada por los premios en su momento como "We need to talk about Kevin" y que precisamente aborda de manera cruda y directa los trastornos mentales (quitándole la comedia y el romance, oh). Al parecer los trastornados sólo son bonitos cuando pueden enamorarse y superar sus problemas a través del amor, oh.

Ya sé que sueno como una amargada total, pero es que siento que incluso dentro de su categoría no destaca por sobre otras comedias románticas de los últimos años que siento que sí que hay innovado a su modo (voy a mencionar a "(500) days of Summer" incluso cuando tampoco haya sido de mi total devoción). Y aquí la tenemos, nominada en todo lo que se le podría nominar. Cooper, quien hace su esfuerzo lo más que puede, tiene muy difícil competir contra Daniel Day-Lewis o Hugh Jackman. Lawrence es que realmente no entiendo cómo es de las favoritas si no tiene nada de especial su actuación, casi que prefiero que le gane Jessica Chastain aunque mi favorita siempre será Emmanuelle Riva. Y, bueno, me gustaría creer que no tiene demasiadas posibilidades en sus demás categorías, pero lo más triste podría ser que quizás sí. 

Hollywood, no te entiendo.




¿Otras películas románticas que involucren trastornos mentales?

22.1.13


22/01/13
Siguiendo el ejemplo del buen Reptilio, continuamos con la categoría de Mejor Película rumbo a los Oscares. Aunque no sé si la emoción por los premios de la Academia nos durará demasiado. Ya hemos comentado "Amor", "Argo" y "La vida de Pi", así que ahora continuamos con "Beasts of the Southern Wild".



"Sometimes you break something so bad, that it can't get put back together"
Antes que nada debo decir que el título de "Beasts of the Southern Wild" (incluso su traducción como "Bestias del sur salvaje") me parece un bello título. El poster me genera un poco de sentimientos encontrados pero ya por esas sencillas razones habría sido una película que buscaría. Así de simple soy, a veces.

La película trata de una pequeña comunidad en lo más profundo del Estados Unidos sureño, una isla que vive en una comunión mucho más cercana con la naturaleza, pero también acosada por sus propios demonios. En este lugar vive la pequeña Hushpuppy y su padre, Wink, su madre los abandonó y su relación oscila entre un entendimiento muy íntimo y un choque constante entre sus personalidades. Bathtub es acosada constantemente por las inclemencias climáticas y ahora se avecina una terrible tormenta que hace mucha gente del lugar decida irse. Pero no Hushpuppy y Wink, ni tampoco un variado grupo de lo más local. Pero la tormenta no es lo único que ha comenzado a amenazar el universo de Hushpuppy quien trata de mantener las piezas juntas el mayor tiempo posible.

La trama es una contraposición constante de Hushpuppy y el universo. Ella representa esta visión por una parte inocente del mundo, pero que al mismo tiempo comienza a darse a entender, a su modo, lo que está sucediendo. El universo tiene dos facetas, la más inmediata y dolorosa representada por Wink y su problemático carácter que a veces amenaza hasta el amor que siente por su hija. La otra faceta del universo es la de las bestias, aquellas que Hushpuppy sabe se acercan y amenazan tangiblemente su realidad. No es una tormenta, no es el mundo fuera de Bathtub, son las bestias. 

Uno de los primeros elementos que me cautivó fue la representación de una parte de Estados Unidos que no suele aparecer demasiado en la filmografía hollywoodense. Ese sur encantador pero desprovisto de tópicos y maquillajes. Con actores además de la zona y que encarnan muy bien el espíritu que trata de reproducirse, desde su habla hasta el modo en que se vuelven parte del entorno. Claramente destacando las actuaciones protagónicas de Quvenzhané Wallis como Hushpuppy y Dwight Henry como Wink. Ambos con una historia bastante increíble: ella audicionó para el papel con apenas 5 años de edad, teniendo que mentir diciendo que tenía 6 para poder inscribirse, y superó a las cerca de 4000 otras niñas que se presentaron; él era en realidad el propietario de una panadería enfrente del sitio donde estaba teniendo lugar las audiciones y el propio director lo invitó a presentarse, y una vez que lo eligieron entre los otros candidatos él rechazó el papel porque estaba demasiado ocupado con el negocio, por lo que todo el equipo de producción tuvo que pedirle que formara parte de la película. Es difícil imaginar que la fuerza de la película hubiese resultado mínimamente parecida sin los sólidos ejes que ambos actores y personajes representaron.

Para mí es una película que partiendo de una base sencilla, hablar de manera fantástica de la reinvención de la inocencia a través de una infancia difícil. Hushpuppy consigue conectarnos con su microcosmos pero también con el gran universo de todas las cosas, y le da sentido a su ilusión de que en un futuro lejano los científicos sabrán que alguna vez existió un sitio llamado Bathtub y ahí vivía Hushpuppy y su padre. 

Es grato ver operas prima como ésta, y también que películas que comenzaron de manera tan modesta y hasta complicada logren llegar hasta donde están. Y eso es, yuju, hasta cuatro categorías del Oscar. Aunque, por desgracia, veo un poco complicado que vaya a llevarse alguna de las estatuillas.




¿Alguna otra película que recuerden tenga lugar en el sur de Estados Unidos?

21.1.13


21/01/13
Y para terminar con los documentales que pude encontrar que estuvieran compitiendo este año, "Searching for Sugar Man". Probablemente el que menos tenía ganas de ver porque nunca he sido demasiado fan de los documentales musicales, ya no digamos de músicos que ni conozco.



"Won't ya bring back all those colours to my dreams?"
Rodriguez fue un artista entre el rock y el folk que sacó únicamente dos discos por allá de los 60-70. Si no les suena demasiado el nombre es precisamente porque no destacó demasiado en el panorama musical del momento y desapareció, probablemente como tantos otros artistas. Quizá con la diferencia de que las pocas personas que estuvieron involucradas en su debut musicales estaban convencidos de que él era uno de los grandes, alguien que no merecía pasar tan desapercibido como pasó. Hasta aquí hubiese llegado la historia en el más común de los casos, sino fuese por un extrañísimo incidente: la música de Rodriguez llegó, nadie sabe bien cómo, hasta Sudáfrica. En un momento, además, en que el apartheid estaba en su punto más álgido, y la generación del momento acogió sus canciones como un himno revolucionario que los guió por aquellos años. Mucho tiempo después un par de sudafricanos relacionados con la industria de la música caen en la cuenta de lo poco que saben de ese inaudito ídolo suyo que sufrió una desaparición y una muerte tan enigmáticas, y deciden que es momento de rastrearlo. 

La verdad es que la premisa hasta parece sacada de uno de esos falsos documentales. La situación es bastante particular e increíble. Si de por sí uno escucha esos datos curiosos de artistas que han resultado más famosos en tierras alejadas a las de su producción original, es difícil imaginar lo que esos hechos representaban en un momento histórico en que además el tránsito de información no tenía lugar de manera libre. Que un artista que nadie conocía en Estados Unidos se volviera de culto en Sudáfrica sin que nadie se enterara resulta casi alucinante. Pero lo cierto es que uno va viendo el video, va siguiendo la vida de Rodriguez, y casi que le parece algo natural que ese aura de misterio que siempre lo rodeó desembocara en ello.

Siendo uno de esos documentales sobre temas en que uno podría no estar del todo interesado, atrapa rápidamente con un ritmo apropiado, con unas maravillosas intromisiones musicales, y sobre todo con la presencia más que apropiada de todos los involucrados. Uno los escucha hablar, desde posiciones tan dispares alrededor del artista, con un amor, un respeto y un cariño tan genuinos que uno no puede menos que sentirse parte de ello, acompañarlos en su búsqueda y sus descubrimientos con la misma emoción que nos van transmitiendo, y es ese sentimiento 'de fan' lo que va dando ritmo a una trama musico-detectivesca que supera a la ficción. 

Desde todos los aspectos es un documental de lo más cuidado: técnicamente impecable, con una fotografía preciosa, una narrativa visual muy rítmica, un manejo de la música que se va volviendo parte del discurso, una historia con la que cualquier documentalista (y musicólogo) soñaría, y sobre todo con una maravillosa construcción de la figura principal. Yo creo que es difícil terminar de verlo sin sentir ya un cierto cariño por Rodriguez. 
La verdad es que tampoco sé por qué recelo de los documentales musicales si en general he tenido bastante suerte con ellos, y aunque no sé qué tantas posibilidades tenga Sugar Man ante la academia, pero hasta el momento (y no tengo muy claro si tendré oportunidad de ver los otros dos nominados) es sin duda mi nominado favorito para este año. Maravilloso.




Seguro ya lo pregunté pero ¿otros documentales musicales que recomienden?

20.1.13


20/01/13
Continuando con los nominados en la categoría a Mejor Documental, nos encontramos con una revisión poco favorecedora del ejército de Estados Unidos.



"I'm sure you've all heard the saying: There's a right way, a wrong way, and the army way"
La guerra invisible a la que alude el título es la que tiene lugar dentro del ejército, dejando de lado sus patrióticas bases fundadoras o la debatible labor que realiza en distintas partes del mundo: las mujeres y hombres que sufren abuso sexual mientras sirven dentro de sus filas, agredidos por sus propios compañeros o superiores. 
De entrada no creo que sorprenda a nadie porque no es excepcional el caso de instituciones que tratan de ocultar los sucesos menos agradables que tienen lugar dentro de ellas para evitar su publicidad, y por mi parte es un asunto que he visto de manera tangencial presentado en casos de programas de televisión detectivescos ("La ley y el orden", "CSI", etc). Pero siendo en general en abuso sexual una situación tan delicada en sí misma, el documental se propone seguir detalladamente las particularidades de estos casos a los que se suma de manera importante un abuso de poder. 

Comenzamos con un collage de comerciales televisivos de propaganda militar, los típicos que imaginamos de 'I want you to join the army!', a los que se van añadiendo los que exaltan la nueva presencia de mujeres en el cuerpo militar. Los años pasan, hasta los comerciales más actuales, y entonces una serie de testimonios femeninos nos van contando cómo es que decidieron unirse al ejército: vengo de una familia militar, era una excelente oportunidad para conocer el mundo, quería servir a mi país, siempre soñé con formar parte de los marines, etcétera. Ese consabido sueño americano va cobrando forma de manera inmediata, se nos va explicando qué es lo que los llevó a tomar esas decisiones y de pronto, irrupción, en qué terminó dicha experiencia. 

Kirby Dick se las ingenia para presentarnos un tema que podría describirse de manera llana y sin mucho atractivo, apelando a la sensibilidad del espectador, siguiendo los casos que crea necesarios, y sobre todo dando giros a su discurso para que las voces individuales, las generales, las externas y los datos específicos vayan acomodándose de forma de que el mensaje consiga llegarnos del modo planeado: como un golpe. Una mujer que explica cómo su superior le dio un golpe en la mandíbula que le destrozó los discos en su quijada, antes de violarla. La encargada de una campaña para evitar las violaciones dentro del ejército se muestra incapaz de responder las preguntas más elementales sobre violencia sexual. Un hombre habla de los años que le tomó admitir que había sido abusado mientras servía. Este discurso que podría sólo dar vueltas sobre sí mismo y el testimonio de las víctimas, se encausa a través de su conocimiento concreto a través de la información disponible sobre los sucesos, un análisis delicado de las particularidades del caso (¿en qué se diferencian los procesos de las víctimas de abuso sexual civil de las que lo sufren mientras sirven en el ejército?), y posteriormente el seguimiento de una lucha porque estos sucesos lleguen a la luz pública y pueda establecerse algún modo de romper con el ciclo de abuso que se ha ido repitiendo desde muchos años atrás dentro de la institución. 

Si el tema es ya algo delicado de abordar, el añadirle el elemento militar no fue en ningún momento una estrategia meramente americanista sino una particularidad dolorosa que para las víctimas significó no sólo un abuso físico sino la humillación de sus propios sueños y aspiraciones. Escuchar cómo los testimonios de honor y respeto por el ideal americano del ejército iban cambiando hacia el estado de depresión y dolor en que ahora se encuentran, a lo que se suma el modo en que la propia institución ha tratado de silenciarlas, omitirlas y juzgarlas. 

Un documental sin duda interesante y bastante bien presentado, que consigue transmitir los sentimientos de indignación y pesar que las voces protagonistas están tratando de transmitir. A mí particularmente estos temas me indignan de sobre manera así que el documental cumple a la perfección su cometido. 
Por su temática 'muy americana' (al fin y al cabo) y su buena factura técnica y narrativa, no dudo que sea una de las opciones fuertes para llevarse el correspondiente premio.




¿Otros documentales sobre violencia de género?

18.1.13


18/01/13
Mientras tratamos de continuar con las dos películas extranjeras que nos faltan, nos vamos hacia una categoría de los Oscares que no recibe la suficiente atención: Mejor Documental. Y comenzamos con uno desde Palestina, siendo además la primera producción de ese país (zona, región, concepto) que reseñamos por acá.



"The old wounds don't have time to heal. New wounds will cover them up. So I film to hold onto my memories"
La premisa en sí misma ya es bastante efectista: un campesino palestino va filmando su crónica cotidiana de la resistencia pacífica que su comunidad sostiene contra el ejército israelí que ha comenzado a apoderarse de parte de su territorio. 

Lo de las 5 cámaras rotas es literal y mediante el seguimiento con voz en off nos lo expone: a lo largo del conflicto ha perdido 5 cámaras de video pero no sus ganas de grabar, y su seguimiento desde dentro del conflicto es también un seguimiento por su propia vida y la de su pueblo. 

Debo admitir que el conflicto palestino/israelí es un tema que no conozco demasiado a profundidad y que no dudo puede prestarse en muchos momentos para tomar una posición bastante subjetiva. El documental se presenta sin la intención de querer ser abarcador o decisivo y se limita a mantenerse como un testimonio en primera persona de una parte específica del conflicto, en la aldea de Bil'in. Emad, nuestro guía a través de los hechos, compra su primera cámara para grabar el nacimiento de su último hijo, Gibreel, quien nace justo el año en que una cerca comienza a delimitar su aldea de una zona que ya no les corresponde. Lo que en un inicio parece una sencilla manifestación de '¿podrían por favor quitar esa barda?' va escalando a través de los años al mismo ritmo que Gibreel va creciendo y la vida de la familia se va viendo condicionada por el conflicto.

Al parecer la resistencia pacífica de Bil'in ha sido un fenómeno importante dentro de la resistencia palestina, lo que en realidad pocas satisfacciones parece haber dejado. La propuesta del documental es sumergirnos por completo en la situación desde el punto de vista más íntimo, más ínfimo y presencial: no es necesario que entendamos el complejo proceso histórico, social, etc, que han atravesado las relaciones dentro del territorio ocupado palestino, sino que nos pongamos en los zapatos de un hombre que un día salió de su casa para descubrir que había una reja que ahora no le dejaba pasar libremente hacia los campos que alguna vez correspondieron a su ciudad, donde ahora comienzan a dibujarse edificios. Un hombre que varios años y cinco cámaras después no puede dar respuestas certeras a una ola de violencia que ha consumido la comunidad en la que nació, en la que nacieron sus cuatro hijos, y donde ahora tiene que enfrentarse con las preguntas del más pequeño de ellos que lo cuestiona con '¿por qué no vas y matas a todos esos soldados con un cuchillo?'. 

La estrategia audiovisual es bastante simple, ordenando un montaje de los varios años de grabación de Emad (y no dudo que con ayuda de algunas otras cámaras, sobre todo en el periodo en que empezaron a llegar observadores externos) y guiados a través de su voz en off lo que ayuda a reforzar esa sensación de que más que exponernos a un conflicto estamos entrando a una intimidad perturbada por circunstancias ajenas. Si bien no nos servirá demasiado para conocer más del contexto en que se desarrolla, si nos empapará de la terrible situación por la que están atravesando tantos palestinos.

No deja de parecerme un poco curiosa esta aparente necesidad contemporánea de mantener un registro audiovisual de todo. Pienso en los documentos sobre pueblos indígenas que comentábamos hace algún tiempo y esta idea de que siempre es mejor contar las cosas 'desde dentro'. Y cómo nos encontramos con el equivalente a las películas familiares de un campesino palestino que ahora se convierten en tema de documental, sin duda una situación que nos podría haber parecido extraña hace algunos años. Y es que la pulsión nace desde dentro: ya no es el espectador ajeno que desea adentrarse en un tema de su interés, sino un hombre que desde su condición más inmediata se da cuenta de que lo que está presenciando debe conservarse. Conservarse y compartirse. Lo personal ahora puede ser del interés de todos.

De mira a la entrega de premios no sé si su temática le jugará a favor o en contra, siendo que también es cierto que en cuestiones técnicas no tiene demasiados méritos. Dos elementos que parecer ser decisivos en esta categoría. 




¿Otra película/documental sobre el conflicto entre Palestina e Israel?

17.1.13


17/01/13
Y continuamos con la carrera extranjera al Oscar, con otra que parecía ser un poco favorita (no demasiado, pero es que Haneke no deja espacio para nadie): "Kon-Tiki", participando desde Noruega.



"Eres quien eres. Y vas a pasar el resto de la vida persiguiendo puestas de sol"
Ya la sola premisa no sólo es interesante sino es impresionante: Thor Heyerdal es un explorador noruega que tras vivir varios años en Polinesia plante la teoría de que las islas fueron habitadas por tribus provenientes de América Latina y no Asia, como todos suponían hasta el momento. La aseveración era difícil de creer y las sociedades científicas del momento la rechazaron tajantemente. De modo que, ¿qué mejor modo de comprobar una teoría que vivirla? Heyerdal juntó un pequeño grupo de compañeros nórdicos para viajar 8000 kilómetros de mar abierto desde Perú hasta Polinesia, utilizando sólo una pequeña barca.

Poco tienen que decir para dibujarnos la personalidad de Thor Heyerdal y la construcción de su increíble épica. Los años que pasó en Polinesia, la pasión con la que vendía su proyecto y la fe ciega que tenía en el mismo, que lo llevó a compartir un pequeño espacio conformado por troncos y rodeado por toda clase de peligros marinos durante poco más de tres meses con un grupo de hombres no tan convencidos del propósito del viaje. 

La película no sólo nos remite a este hecho concreto, ya suficientemente fantástico en sí mismo, sino de alguna manera a esa noción antigua de las expediciones, de la etnología más pura y aventurera. El mérito de Heyerdal no consiste únicamente en su supervivencia y la demostración de sus teorías sino la voluntad férrea de llevar sus ideas hasta sus últimas consecuencias en lo que podría parecer una locura total. Y si uno podría creer que siendo una película que transcurre principalmente en altamar caería en los tópicos usuales de náufragos y balsas a la deriva (es cierto que hay algunas escenas que nos remiten instantáneamente a "Life of Pi"), lo cierto es que consigue crear un drama propio y sumergirnos en el micro-universo de esos hombres que mantienen hasta el último momento su condición de supervivientes (científicos y seres humanos, en segundo plano). 

Ayuda mucho la bella fotografía que nos transporta desde las regiones más frías de Noruega, la naturaleza pura de Polinesia, las sociedades latinoamericanas de finales de los años 40, y finalmente un mar tan hermoso como inclemente. Y si en un primer momento los personajes, sin contar al propio Heyerdal, nos parecen tan solo 'un grupo de nórdicos', pronto comienzan a marcar sus personalidades y construir la dinámica tan particular de las expediciones. Reitero que en un momento donde cinematográficamente no somos ajenos a las embarcaciones que se toman su tiempo perdidas en el mar, "Kon-Tiki" consigue reconstruir la emoción de la expedición, de la búsqueda científica y humana de nuevos conocimientos desde el acercamiento más empírico. Y, además, está excelentemente bien contada. 

Un dato curioso es que la propia expedición grabó un documental a lo largo de su viaje que posteriormente compitió dentro de los Oscares en la categoría a Mejor Documental en 1951, llevándose el premio y convirtiéndose en la primera producción noruega en recibir la dichosa estatuilla. Creo que ahora tendré que buscar también ese documental y repetir la experiencia, unos años más atrás. 

Espero poder ver "No" en los próximos días, pero no estoy muy segura de si conseguiré "A royal affair" antes de la entrega. Lo cierto es que la categoría de Mejor Película Extranjera sigue siendo para mí la mejor delicia de toda la entrega. 




¿Películas sobre expediciones que les gusten?

16.1.13


16/01/13
Y continuando con la revisión de películas nominadas al Oscar Extranjero, no podíamos perdernos la favorita, que incluso compite dentro de la lejana categoría de Mejor Película sin importar su austriaco origen. Haneke, sorpréndenos de nuevo.



"I don't remember. I don't remember the film either. But I remember the feeling"
No se puede hablar de "Amour" más que en líneas generales y evasivas. Georges y Anne son una pareja mayor que ha compartido toda su vida y que ahora, tantos años después, todavía comparten una cotidianidad que no conseguido apagar sus sentimientos. Un día Anne sufre un derrame que hace que pierda la movilidad en la mitad de su cuerpo. Ambos saben que la situación es degenerativa y el tiempo apremia, pero Georges no planea permitir que esta situación vaya a separarlos. 

Hay muchas películas sobre parejas que enfrentan alguna dificultad relacionada con la salud, también películas sobre parejas mayores que presienten el ocaso de sus vidas demasiado cerca. La propuesta de Haneke, estrictamente, no promete mucho más que eso: un hombre y una mujer compartiendo sus últimos momentos. Pero es a partir de ahí que la complejidad de su aparentemente sencillo título comienza. 

Haneke, lo sabrá cualquiera que haya visto alguna de sus películas, es un director que apela directamente a las emociones. Ya sea en películas con estructura de thrillers, en películas violentas, en misterios o en frustraciones personales. No necesita decirnos algo directamente para conmovernos y violentarnos, y puede que se deba en gran medida a que no teme exponer los sentimientos de una manera cruel. 
El cine trata de decirnos constantemente qué es el amor: grandes dramas de época, comedias románticas, películas infantiles de princesas y príncipes que se encuentran, hombres que cambian, mujeres que superan sus desilusiones. Pareciera que se ha catalogado de manera puntual y sin embargo lo que en verdad se repite constantemente es algo así como la fórmula del amor. Qué hacer para. Haneke inicia dando por sentado que el amor ya está ahí, que no hace falta descubrirlo: Georges y Anne se aman, se han amado durante la mayor parte de su vida. El 'amour' de la película son las implicaciones, los efectos secundarios, lo que permanece tras la degradación del cuerpo. Y Haneke no teme ser cruel, no teme humillar, volver soberbios a sus personajes, egoístas, romperlos sabiendo que ya no podrán volver a armarse. Haneke nos dice que es ahí, en esa nueva y dolorosa cotidianidad, donde comienza el título de su película.

No se puede decir mucho más de una película que es emoción pura. Que conmueve y violenta sin necesidad de alejarse de las acciones más elementales de una pareja de ancianos. Jean-Louis Trintignant y Emmanuelle Riva están excelsos en sus personajes, y si ella no se lleva el Oscar a Mejor Actriz es porque ya todos sabemos cómo es Hollywood (¿Jennifer Lawrence? Háganme el favor).

No voy a decir nada más. Los invito a todos a que dejen de hacer lo que sea que estén haciendo y vayan a verla. Ya.




¿Parejas cinematográficas que los conmuevan?

15.1.13


15/01/13
Con qué tristes noticias tenemos que despertarnos. Si a finales del año pasado hablábamos de la terrible pérdida de Kôji Wakamatsu, el día de hoy se nos fue otro de los grandes de la cinematografía japonesa y universal: Nagisa Ôshima. Así que le rendimos un pequeño homenaje con una de tantas piezas clave en su filmografía: "The man who left his will on film".



"It seems like history is moving outside of our lives, but the camera makes it seems familiar, personal"
Oshima fue uno de los directores, sino el más importante, que ayudaron a definir la cinematografía japonesa en los 60, una época que sirvió para definir el curso que tomaría a partir de ese momento. Si con "A town of love and hope" y "Cruel story of youth" definió su proyecto personal y la ideología general de la Nuberu Bagu, con esta pieza, "The man who left his will on film", dio también cierre a una década y un momento histórico y cinematográfico concreto. Muchos la señalan, junto con "Eros plus massacre" y "The inferno of first love", como el final claro de la Nuberu Bagu.

"The man who left his will on film" es ciertamente un cierre, una reflexión cíclica sobre el cine, sus posibilidades, sobre las revueltas sociales de los años 60, sobre las imposibilidades, sobre esta repetición histórica no siempre conclusiva y sobre la muerte. 
La película inicia con alguien grabando con una cámara cuando comienza a ser cercado y perseguido, lo que lo lleva a escapar hasta el techo de un edificio de donde se arroja. Antes de que llegue la policía alguien recoge la cámara y huye a su vez. La cámara pertenece a un grupo de estudiantes de la resistencia cuya discusión oscila entre su grupalidad marxista y su individualismo. Motoki, quien recogió la cámara de la escena del crimen y pertenece al grupo, se obsesiona con la idea de recrear al fallecido, a quien nadie parece recordar demasiado bien, a través de sus grabaciones, que extrañamente consisten en escenarios vacíos. 

Varios de las preocupaciones usuales del director van convergiendo en una trama cuya obsesión es la reconstrucción de un discurso: un discurso personal, un discurso histórico, un discurso cinematográfico. Las pistas que se poseen para ello son ambiguas, extrañas, e incitan a reproducir un ciclo sin que se haya acabado de entender. Motoki, al querer recuperar la figura del muerto, se va convirtiendo en él, vuelve sobre sus pasos, reproduce sus escenarios y se inserta a sí mismo en ellos. El destino que persigue no es la resolución sino la repetición, un final que no involucra la asimilación de un mensaje.

Las tres películas mencionadas como cierre convergen en ese punto final: el cine ha sido su discurso, su herramienta, su revolución, pero al final las revoluciones sólo los han llevado al callejón sin salida que fue el inicio de la década de los 70 en Japón. El primer individuo, Motoki y Nagisa Ôshima dejaron ese 'testamento' fílmico para que sobreviviese a la muerte de ese momento histórico. 

Una de las películas más contundentes del director, con un mensaje que no sólo puede apreciarse en relación con los momentos en los que se inscribió sino en general como una reflexión sobre la creación artística y fílmica. Siendo un director cuya retórica giró casi siempre alrededor de la repetición, aquí consigue una de sus piezas más bellamente cíclicas, con una oscilación narrativa increíblemente bien conseguida. Y si bien representó el cierre de una etapa concreta en su propio proceso artístico, es también cierto que su propuesta continuo pero cambió a partir de ese momento. 

Y, eso, te vamos a extrañar, Ôshima :(




¿Película favorita de Nagisa Ôshima?