18.8.12


18/08/12
Continuando con los documentales, aunque en este caso se encontraba más sobre la línea de reportaje televisivo (fue producido por la BBC) que de documental cinematográfico, pero el tema había llamado ya poderosamente mi atención.



"Together, from far away we moved to this land of snow where oceans wail for my daughter lost"
La historia de Megumi Yokota, una joven estudiante japonesa, comienza como tantas series de televisión sobre personas desaparecidas: ella regresaba un día caminando desde su escuela en compañía de una amiga hasta su casa, y el punto en que el camino de ambas se separó fue el último sitio donde se le vio. Ella sólo tenía 13 años y su familia de pronto se encontró sin ninguna clase de respuesta sobre el misterioso suceso: no parecía un secuestro, o un crimen o un accidente. Sencillamente desapareció. 
La familia se dedicó durante años a movilizarse hacia cualquier clase de pista sin obtener demasiados resultados hasta que años después, al destaparse un caso aparentemente inconexo en otro sitio de Japón, volvió a verse la desaparición como lo que verdaderamente era: uno de los tantos casos de secuestros a ciudadanos japoneses por parte de espías norcoreanos. El caso de Megumi era excepcional ya que usualmente secuestraban parejas jóvenes, de modo que se sospechó que en el breve trayecto solitario hacia su casa presenció el secuestro de otros dos jóvenes de la zona y por ello se vio involucrada. A partir de ello el documental sigue la dura travesía de unos padres que durante años han hecho todo lo posible por presionar a su gobierno para que consiga que Corea del Norte devuelva a las docenas de japoneses que se saben secuestrados por ese gobierno con la intención de entrenar espías norcoreanos para que puedan actuar como japoneses. Desde las primeras visiones de una familia que de un día a otro se vio devastada por un doloroso misterio, hasta la causa a la que se han aferrado los padres en espera de tocar tantas puertas como sean necesarias.

Si la historia ya de por sí es terrible y conmovedora, parte de esta fuerza cruel se debe al enigma que representa para la mayor parte del mundo Corea del Norte. Se llega a la conclusión bastante viable de los secuestros a través de una serie de acciones específicas pero a partir de entonces todo lo demás debe esborzarse como una suerte de conjeturas: ciudadanos han sido secuestrados y se presume viven ahora en territorio norcoreano. Pero lo demás son habladurías: ¿Realmente la intención del gobierno de Corea del Norte es el de entrenar espías? ¿Qué clase de vida llevan esas personas tras años se haber sido alejados de sus países? ¿Qué tanto esconde el gobierno norcoreano tras aceptar convenientemente algunos hechos pero negar otros? En base a ello vemos una movilización ciudadana que trata de presionar constantemente al gobierno japonés para que maneje los tratos con Corea del Norte en virtud del bienestar de estos ciudadanos secuestros, lo cual no siempre es lo más sencillo porque si de por sí la diplomacia política es un asunto delicado se puede uno imaginar que tratar con Corea del Norte no debe ser cosa fácil. Pero sobre todo tenemos a un par de padres que se aferran a la idea de que su hija sigue viva en ese país y que es posible que algún día regrese a casa.

Sin duda una historia conmovedora y bastante fuerte sobre una situación muy concreta que no se conoce demasiado fuera de los países a los que concierne, y que no deja de resultar todavía más sorprendente el pensar que sucede en nuestros días (o al menos que el asunto ha llegado hasta el momento). Es claro que el documental entero está presentado para ser efectivo y hay quizás algunas variantes de la historia en las que no se profundiza cuando podrían problematizar la visión más favorable del conjunto, pero no deja de ser una pieza interesante. 

Como dato curioso, cuando el documental fue presentado por primera vez en Estados Unidos, se aprovechó para sacar a colación una serie de manifestaciones de ciudadanos estadounidenses bajo una serie de lemas tendenciosos del tipo "¡Japón secuestró a mi hijo!" y por el estilo (ok, quizá no todos eran así de dramáticos, pero más o menos esa era la idea), sobre los problemas generados por las distintas normas de derechos de paternidad post-divorcio entre parejas estadounidenses-japonesas (que derivan, sí, en una suerte de 'secuestro' por parte del padre de origen japonés quien regresa al país con el hijo en cuestión y desaparece para siempre). Quizá una cuestión que bien valdría su propia revisión pero que resultó en una comparación poco afortunada en ese momento, a mi parecer.




¿Documental favorito sobre secuestros o desapariciones o similares?

3 comentarios:

  1. Interesante lo buscare. Gracias por el aporte. Un saludo.

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  2. pues la ultima que vi fue Megan Is Missing (2011)

    :P

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  3. Reptilio: Ah, ¿y qué opinas de "Megan is missing"? Yo leí pésimas críticas al respecto pero la verdad es que por la trama hasta me arriesgaría a verla, creo.

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