13.8.12


13/08/12
Y hablando de documentales, nos vamos hasta el considerado el primer documental tal como conocemos actualmente el género, "Nanuk, el esquimal".



"Más hombres que piedras en la orilla alrededor del hogar de Nanook han visto a Nanook, el amable, valeroso y simple esquimal"
Si uno piensa en el documental como género no deja de resultar algo curioso. Técnicamente un gran número de las primeras grabaciones audiovisuales fueron documentales, ya que se limitaban a documentar una escena cotidiana tal y como sucedía. Pero a partir de la introducción de la ficción cinematográfica es posible que el interés se inclinase mucho más hacia la innovación en ese campo que a pensar en métodos más complejos para estructurar esta documentación de la realidad. Eso al menos hasta los años 20 cuando Flaherty, tras vivir durante años con esquimales, pensó que sería apropiado mostrarle al mundo lo radicalmente distinto que era su modo de vida.

La historia es, claro, la de Nanook y su familia, una típica familia esquimal con actividades típicamente esquimales. A través de un sencillo seguimiento narrativo se van presentando distintas facetas de su vida y el modo en que ellos se mueven a través de eso mundo congelado y remoto, donde todo parece tan distinto y nuevo. 

Si la pieza audiovisual es ya un punto importante de la historia cinematográfica, la propia historia de Flaherty al iniciar y realizar el proyecto no hace sino enriquecerlo. Él, debido a su trabajo, vivió durante años en cercana compañía de esquimales de modo que decidió compartir con el mundo esta particular visión de vida. La primera versión del documental se perdió parcialmente debido a un incendio cuando Flaherty ya había abandonado el país pero decidió que bien valía la pena volver a grabarlo todo y hacerlo aún mejor, que es la versión que nos llega hasta ahora.

"Nanook" es, paradójicamente, una clara puesta en escena, con un importante sentido teatral, de la vida de los esquimales reinterpretada por el director estadounidense como él se la imaginaba en épocas todavía más remotas. Es fuertemente teatral y se organiza en función a las necesidades del rodaje y su guión, resultando extrañamente tan ficticia como cotidiana, y quizá en esta manifestación tan clara de 'el género y su máscara' es donde reside su relevancia e importancia como un documental en toda norma, precisamente en que se sumerge en las entrañas del género y muestra sin temor su estructura. De tal modo que no resulta relevante que Nanook no se llame Nanook, o que su esposa en pantalla sea realmente la esposa inuit del propio Flaherty; lo importante es la intención detrás de esa puesta en escena, la documentación de algo que se vuelve más un concepto o un símbolo antes que una vida concreta.

De resto la verdad es que resulta casi tierno, en la selección de acciones y escenas, ver e imaginar cómo decidieron montar el proyecto y cómo se van sucediendo esa serie de secuencias de vida en un territorio tan alejado y congelado como sigue siendo hasta nuestros días las regiones esquimales. 
De esas piezas que uno tiene que ver al menos para cumplir con partes fundamentales de la historia del cine.




¿Documental antiguo favorito?

1 comentario:



  1. de este habia escuchado tanto, creo que me toca verlo entonces

    suerte!

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