17.9.10



17/09/10
Yo siempre he dicho que tengo una gran deuda pendiente con Woody Allen (o con su filmografía, más específicamente), pero en lugar de ponerme a ver sus clásicas es más común que regrese al cine cuando estrena algo, y ni siquiera demasiado, porque para lo que he visto de él.
De ésta ni siquiera me había enterado su existencia concreta (lo que más me sonaba era eso de que quería a Freida Pinto para una película) hasta que la vi en cartelera. Y, bueno.



"Maybe he's not a tall dark stranger, but at least he's my stranger"

Me cuesta un poco creer que Woody Allen tenga películas que destaquen tanto, en cuestión publicitaria, y luego otras que aparecen sin más, como de incógnitas. Recuerdo toda la parafernalia alrededor de "Vicky Cristina Barcelona", cuyo tono incluso parecía buscar cierta trascendencia. Y luego me encuentro con "Conocerás al hombre de tus sueños" (con lo bien que suena el título en inglés) como una historia, casi un retrato, tan cotidiano como desapercibido. Es un poco extraño.
Lo que sí, con un reconocido elenco, que destaca a primera vista a Anthony Hopkins, Antonio Banderas y Naomi Watts pero que tiene algunas otras sorpresas por ahí.

La película trata, a modo de historias que se cruzan y se alejan, de la relación de varias parejas, especialmente en lo que se refiere a la fidelidad y al ideal del otro. Iniciamos con el divorcio de Helena y Alfie, una pareja que llevaba ya cuarenta años de casados. Nos enteramos porque Helena ha terminado por recurrir a una adivina después de que fallara el suicidio, los psiquiatras y los antidepresivos. Vemos una mujer que no controla los nervios y cuya vida gira únicamente en torno a sus pérdidas. Alfie, por otro lado, tiene algo así como su crisis de los setenta y le ha dado por sentirse joven de nuevo, se ha puesto a hacer ejercicio, sentirse mejor, y claro que Helena no va con este nuevo plan, por lo que la ha dejado para irse a vivir como un soltero y ha terminado enamorando de una prostituta con la que se ha casado apresuradamente.
Helena, además, se ha convertido en una carga para su hija Sally, quien tiene que aguantar las constantes visitas e indiscreciones de su madre que quiere opinar sobre todo en su vida. Sally, claro, tiene sus propios problemas amorosos: su matrimonio con Roy se ha convertido en un conjunto de peleas sin solución. Viven económicamente justos y no pueden pensar en los hijos que Sally se muere por tener, además que ha comenzado a sentirse atraída por su nuevo jefe (siendo éste Antonio Banderas, ¿cómo juzgarla?). Roy es un escritor que ha tenido un sólo éxito y ahora sólo vive para tratar de repetirlo, a la vez que se ha obsesionado con la vecina de enfrente, una misteriosa mujer que siempre viste de rojo.
Y, bueno, subtramas más y menos, pero básicamente en estas direcciones es que corren los hechos.

La película es, como dije, más una serie de retratos que una trama que vaya hacia un punto específico. Por momentos parece que va a haber un misterio o algún suceso impactante pero al final nos queda una sensación de 'bueno, así es la vida'. También mucho de la idea se presenta a través de las nuevas ideas esotéricas de Helena, sobre todo su nueva adivina de cabecera aunque en realidad vemos muy pocas veces sus encuentros. Creo que más bien su finalidad es transmitir que todos esperamos algo concreto, queremos creer que hay un sólo punto al que nos dirigimos, pero conforme avanza la trama vemos que esos puntos a los que se dirigían nuestros personajes no son nada claros y muchas veces son ilusiones por completo.

Las actuaciones en su mayoría son correctas y no mucho más, incluso casi ningún personaje sobresale particularmente. Yo destacaría, por una parte, a Gemma Jones como Helena, porque es probablemente el único papel que lo mueve a uno a emociones concretas. Uno pasa de sentir pena profunda por ella, a desesperarse por completo y odiarla, a tener un poco de ternura. Sin duda representa bastante bien su papel de mujer mayor dejada que siente que su vida termina ahí pero insiste en buscar algo más. De resto, debo decir que a mí me encanta aún ver a Antonio Banderas haciendo lo que sea aunque sólo aparezca en un par de escenas. Y qué decir de Freida Pinto, que tampoco aparece demasiado pero, jo, qué guapa es, luce incluso mejor que en "Slumdog millionarie" (y eso que recuerdo que ya entonces se veía bastante bien).

De resto, diría que es una película bastante normalona, la narración se hace entretenida pero esa sensación de que no vamos a ninguna parte a veces llega a quitarle la poca fuerza que lograba conseguir. No lo sé, no lo sé, no sé muy bien qué pensar de Woody Allen actualmente. Y entonces es cuando debería volver a sus clásicos, y al parecer tendré que hacerlo, jo.




¿Película favorita de Woody Allen?


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